Se perdieron cultivos y monte nativo
En Misiones, la lucha sin cuartel empezó en diciembre
El verano fue muy movido para los Bomberos Voluntarios de Misiones y brigadistas del Ministerio de Ecología de Misiones. Es que los focos de incendios empezaron a fines de diciembre en la zona de Colonia Carril y se extendieron hasta mediados de febrero.
En una sequía sin precedentes, el 23 de diciembre se declaró el primer gran foco que empezó en una chacra en Colonia Carril con un rosado que no se pudo controlar y se extendió por el Valle del Cuñá Pirú.
Ese foco llegó hasta el Parque Provincial Salto Encantado y consumió varias hectáreas, pudiendo controlarlo el 7 de febrero, ya con la presencia de brigadistas de La Pampa.
El segundo gran incendio fue el de Cerro Corá que empezó los primeros días de enero y se mantuvo activo hasta el 10 de febrero cuando la lluvia llegó para ayudar a los bomberos de Cerro Azul, Candelaria y brigadistas de Santa Fe que llevaban varias semanas en la zona.
En Montecarlo, por la ruta 15, en Caraguatay, los Bomberos Voluntarios de Montecarlo estuvieron 20 días luchando contra las llamas para que no lleguen a las aldeas Mbya de la zona. Fue una lucha desigual que recién se pudo controlar con el trabajo del avión hidrante.
En San Javier, el fuego que empezó en una chacra en los primeros días de febrero, arrasó en sólo cinco días, con la zona productiva ubicada cerca del Cerro Monje.
Gracias al trabajo del helicóptero, los bomberos y los propios colonos se pudo controlar. Pero se perdió gran parte de la caña de azúcar, monte nativo, pasturas, mandioca y verdeo.
Durante el pico de la crisis de los incendios, en los primeros días de febrero, los bomberos, brigadistas, y voluntarios arrancaban a las 5 de la mañana y terminaban pasada las 22 y llegaron a tener 7 focos en simultáneos, ya que además de los mencionados incendios, hubo focos en Posadas, San Ignacio, Santa Ana y Jardín América.
La base del Plan del Manejo del Fuego en Apóstoles no dio abasto a los pedidos, que llegaban de distintos puntos de la provincia y el norte de Corrientes, donde la situación llegó a ser desesperante.
Por suerte a mediado de febrero, llegó la lluvia y trajo un poco de alivio a Misiones, pero las secuelas de los incendio dejó más de 1000 hectáreas quemadas, zonas productivas arrasadas y pérdidas millonarias.
Informe de domingo:
En Misiones, la lucha sin cuartel empezó en diciembre
Insisten en el Congreso con una ley de humedales
Cruz Roja se quedará en Santo Tomé unos tres meses más
“Sólo estamos teniendo un respiro de los incendios”
Advierten que con el correr de los años la zona del Iberá será de sequía
Corrientes controla que no se produzcan nuevos incendios forestales
Acciones para asistir a los trabajadores rurales
Trabajan con iniciativas para recuperar y evitar siniestros
Impulsan ley para una restauración ecológica
Superincendios y derecho penal
La sequía continuaría y se extendería hasta fines de mayo
La forestoindustria fue uno de los sectores más golpeados
Para Kreimer, la política ambiental hizo la diferencia en Misiones
