Entrevista a la estimuladora Mariana Hoffmann
Estimulación temprana, la posibilidad de potenciar al máximo las habilidades de un niño
Cuando un bebé nace, automáticamente entra en contacto con el mundo exterior. Comienza a escuchar más sonidos, a percibir más olores, a tocar, acariciar, a saborear; y todo ello va a ir conformando tanto su personalidad como su desarrollo cognitivo y motor.
En ese sentido, los primeros años de vida de un niño son determinantes para su correcto desarrollo. Teniendo en cuenta la neuroplasticidad del cerebro en los primeros años -cuando las neuronas establecen comunicación-, esta etapa es un momento único e irrepetible para estimular de manera oportuna. Los estímulos familiares, así como los que le presenta el propio mundo exterior son fundamentales y, además, tienen un impacto muy importante desde el mes uno y hasta los 6 años.
En ese marco, la Estimulación Temprana (ET) se potencia como una disciplina importante para los primeros años de vida, ya que potencia el óptimo desarrollo de las habilidades innatas del niño. También, con ET se pueden prevenir algunos trastornos neurológicos, detectar algún déficit o reducirlo.
Sobre la importancia del aprovechamiento de la capacidad de aprendizaje y adaptabilidad del cerebro del bebé, habló la especialista Mariana Hoffmann. Destacó, entre otras particularidades, que la estimulación en esta etapa de la vida es crucial ya que no sólo se trata de desarrollar el aspecto intelectual del niño, sino además sus capacidades físicas, emocionales y sociales.
¿En qué consiste la estimulación temprana y por qué es tan importante?
Se trata de una disciplina con base científica que abarca las edades tempranas desde que nace el ser humano hasta los 6 años de vida aproximadamente.
Se busca el aprovechamiento de la capacidad de aprendizaje y adaptabilidad del cerebro del bebé a través una serie de estímulos que fijan la atención e interés del pequeño para incentivar las funciones cerebrales.
La intención de la ET es potenciar al máximo todas las habilidades innatas que tiene el bebé. Pero además de potenciar su desarrollo, esta disciplina también permite identificar, detectar, prevenir o incluso reducir algunos trastornos o déficit neurológicos. Se busca potenciar al máximo las habilidades.
¿Por qué es importante la estimulación del niño a una edad tan temprana?
Es importante estimular a una edad temprana porque el cerebro desde el nacimiento y hasta la edad de los 3 años es cuando existe un mayor número desarrollo neurológico. Se estima que el 80% de las conexiones neurológicas suceden en ese período etario. Por eso, estimularlo a tiempo permite prevenir, reducir y hasta evitar en ocasiones muchos trastornos o patologías, así como también potencia de manera positiva el desarrollo de todas las áreas.
En esa etapa de crecimiento es cuando se da el momento de máximo desarrollo neuronal en el ser humano, cuando se desarrollan y maduran capacidades como el lenguaje, las sensaciones, las funciones motoras, psicológicas, entre otras. Asimismo, la estimulación temprana se utiliza de manera análoga para prevenir y mejorar posibles déficits en el desarrollo del niño.
La estimulación temprana es útil para aprovechar la neuroplasticidad del cerebro y detectar precozmente posibles problemas y soluciones.
¿Todos los niños necesitan este tipo de estimulación?
La estimulación temprana es una opción educativa que se puede proponer a cualquier niño desde su nacimiento hasta los 6 años. Sin embargo, es indispensable para aquellos que presentan dificultades de aprendizaje o retrasos en el desarrollo.
Hay niños que necesitan más estimulación que otros, por lo general los niños que nacen con algún diagnóstico o patología necesitan estimulación para potenciar sus habilidades al máximo en estos primeros tiempos.
Algo que se está notando con mayor frecuencia en los últimos tiempos es la derivación de neurólogos a estimuladores por el uso de las pantallas por ejemplo -y en ocasiones excesivo-. Exponer a los bebés a las pantallas por un largo tiempo afecta a su desarrollo.
¿Por qué?
Muchas veces los padres, tutores o los que están al cuidado del bebé los exponen frente a las pantallas pensando que, si les muestran algún contenido didáctico o de aprendizaje podría ser beneficioso para ellos. Muchas veces se cree que esto puede ayudar en su desarrollo, pero el cerebro de los niños no está todavía preparado todavía para recibir ese tipo de información y la realidad es que puede generar problemas en la atención, de sueño y otras cuestiones.
¿Es distinta la estimulación en cada niño?
Sí, para cada niño es diferente el tratamiento. Depende de lo que necesita, de lo que atraviesa, del contexto en el que se desenvuelve. Debemos pensar que cada persona es distinta y atraviesa su proceso a su ritmo y a su tiempo, y las estimuladoras debemos buscar las herramientas y métodos que mejor se adapten a ese niño. Si bien, contamos con una serie de herramientas en común para estimular, debemos entender que ningún niño es igual a otro. Además, la etapa etaria que se encuentra atravesando también es un factor importantísimo.
¿Cómo se estimula, cómo se trabaja la estimulación temprana?
Los estimuladores trabajamos con diferentes técnicas, métodos y herramientas. La ET se divide en diferentes etapas y depende mucho de la edad del niño.
A veces utilizamos juguetes, colores y texturas, técnicas de masajes, canciones y música.
La ET busca utilizar los sentidos del niño para potenciar las áreas de desarrollo.
Y siempre se realiza un plan acorde a cada paciente, a sus necesidades e individualidades.
¿Algunos beneficios de la estimulación temprana?
Son muchísimos los beneficios de la ET porque trabaja todas las áreas de desarrollo: cognitiva, motriz, lenguaje y socioemocional.
Estimulación motora en bebés.
La mayoría de los niños enfrenta frustración en sus primeros años y en ese caso, la estimulación lo que hace es reducir esa frustración a partir de la incorporación de reglas, por ejemplo. También se mejora el déficit de atención, se aprende a respetar turnos, a tener mayor capacidad de tolerancia y espera; aumenta su autoestima, mejora su falta de seguridad, su capacidad de expresión, aumenta y mejora su lenguaje, su capacidad cognitiva, permite mantener más la atención del niño; mejora también sus vínculos con sus pares y con sus padres.
En definitiva, la ET potencia el desarrollo integral de los seres humanos en la etapa más crítica del aprendizaje.
Beneficios de la ET
- Motiva a los niños a adquirir nuevos conocimientos.
- Favorece su autonomía y seguridad en si mismos.
- Fomenta la creatividad y la imaginación.
- Conocen nuevos recursos para poder jugar.
- Aumenta la capacidad de aprendizaje y análisis.
- Crea mayores lazos afectivos entre los padres y el bebé/niño.
- Fortalecer sus músculos al trabajar tanto la motricidad fina como la gruesa.
- Ayuda en los procesos de socialización.
Algunas sugerencias para los padres
Respetar el tiempo de respuesta de los hijos. Elegir un momento tranquilo para jugar con él. Y evitar hacerlo cuando los niños están cansados o sobrecargarlo de tareas y de estímulos.
Elegir objetos agradables al tacto, al oído, al paladar y que sean seguros.
Los juegos deben ir acompañados por canciones, palabras y sonrisas.
El juego tiene que ser algo placentero tanto para los padres como para los hijos.
Aprovechar el momento del baño para dar un masaje al bebé.
Usar música mientras se traslada al niño en el automóvil, incluso en la misma casa.
Enseñar libros a los hijos. Existen textos de tela, de plástico, con olores y distintas texturas.
Contar cuentos antes de ir a dormir.
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