Municipios realizan operativo de limpieza en sus accesos

Distintos municipios misioneros implementaron ayer operativos de limpieza y desinfección en sus accesos para seguir previniendo la expansión del coronavirus.
En el municipio de San Ignacio, se implementó restricción absoluta en el ingreso y en el egreso a la localidad y desde ayer se puso en práctica la desinfección con agua y jabón a los vehículos de los proveedores de mercadería que entran a la localidad.
También se dispuso de recipientes de agua con lavandina para que tanto el chofer como el acompañante se desinfecten el calzado y se les provee de alcohol en gel para una asepsia total.
En Puerto Rico, en el único acceso habilitado, por la avenida 9 de Julio, los camiones abastecedores de mercados y comercios son desinfectados por un equipo de las Secretaría de Obras y Servicios Públicos y la Dirección de Agro, Producción y Medio Ambiente. En el lugar también hay un control de la Policía.
Además, ayer se pudo observar mucho movimiento en la zona de supermercados, bancos y cajeros.
En Montecarlo desde ayer funciona un espacio de desinfección de vehículos en el único acceso habilitado. Allí, en unos minutos se limpian lo camiones de alimentos que ingresan, los vehículos particulares de personas que viajan a localidades vecinas para trabajar y los móviles que se utilizan para trasladar enfermos al Hospital Samic de Eldorado.
Por otra parte, el domingo los Bomberos Voluntarios conjuntamente con el municipio realizaron tareas de desinfección en las principales avenidas, como en las zonas de supermercados y bancos.
En El Soberbio desde que arrancó la cuarentena, los bomberos voluntarios y agentes municipales realizan todos los días lavado a presión con lavandina al 0,1% en los lugares mas concurridos. Los lugares fueron el hospital, comisaría, banco y paradas de colectivos.

Así se vive la cuarentena
Durante la mañana, las calles de Jardín América reflejan cierto movimiento de personas, sobre todo el vinculado a los cajeros y a las compras en supermercados y farmacias.
A la tarde a partir de las 16 la mayoría ya está en sus domicilios y quienes circulan por la calle son controlados por las fuerza y allí deben justificar las razones de su permanencia en la vía pública. Después del mediodía la mayoría de los comercios también cierran sus puertas.
Respecto de la asistencia social en los barrios más carenciados, el municipio sirve el almuerzo en el CIC del barrio Capilla. Además hay comedores en otros vecindarios que son atendidos por organizaciones sociales y con la asistencia del municipio.

Postergado el pago a municipales
En Leandro N. Alem, la comuna resolvió retrasar el pago a los empleados municipales “para evitar tanta gente en los cajeros”, según explicó el secretario de Gobierno Pablo Comby.
Desde el día viernes, cuando se acreditaron diferentes asignaciones de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), Alem fue una de las ciudades que sin previsión, más que el control policial, tuvo largas colas y aglomeraciones de personas durante todo el día en torno a los cajeros automáticos.
Debido a ese movimiento, se tomó la medida de estirar el pago de municipales unos días más.

Avivados en Garuhapé
En Garuhapé, las rutinas fueron cambiando a medida que se fueron prolongando. Los vecinos de Garuhapé Mí, a más de 10 kilómetros del casco urbano principal, quedaran aislados por la paralización del transporte y cuando se acreditaron los haberes, llegar al cajero era imposible.
Así, algunos remises oportunistas cobraban más de 500 pesos el viaje, pero cuando eso se hizo público, cejaron en su actitud.
Actualmente funciona un servicio de colectivos exclusivo autorizado por el municipio “para que la gente pueda acercarse al cajero a hacer sus respectivas cobranzas y algún otro trámite de importancia que necesitan”, comentó el intendente Gerardo Schmied.

En Irigoyen se cumple
En Bernardo de Irigoyen, la población sigue respetando la cuarentena y las calles se encuentran vacías.
Los supermercados ofrecen atención a no más de diez personas dentro del local y con permanencia de no más de quince minutos, con orientación personalizada del personal para mantener el orden en las filas y cumplir con los protocolos establecidos.
En Ruiz de Montoya, el descarte de un posible caso sospechoso trajo tranquilidad a la población.
El intendente local, a través de la resolución 146/2020, estableció la atención en los comercios de 8 a 17, mientras que de 10 a 12 deberán atender a personas mayores de 60 años, embarazadas y personas de grupos de riesgo.