El acceso global a la Inteligencia Artificial exige máxima adaptabilidad

Sin pedir permiso a nadie, la inteligencia artificial (IA) tomó por asalto a la humanidad. De modo global se metió de manera silenciosa en nuestras vidas y nadie puede saber en qué medida afectarán o modificarán las profesiones o tareas cotidianas o futuras en los más diversos campos, desde la educación a la seguridad, del campo a la ciudad, del agro a la industria, de la información a la seguridad privada y la salud pública. En los últimos tiempos se tornó sumamente popular, por el uso masivo del Chat GPT, un chatbot que utiliza un software basado en IA con posibilidades de mantener conversación por texto o voz. Está claro que esta rama de la informática genera revolución tecnológica en la nueva era digital. En rigor, muchas tecnologías con inteligencia tienen más de 50 años. Dispositivos móviles como los smartphones hace mucho tiempo están dotados de IA para detección de rostros u objetos, como ya está aplicando la Policía de Misiones o la geolocalización y hasta la seguridad biométrica para que funcionen con el detector de huellas dactilares o reconocimiento facial. Es decir, en medio siglo se produjeron estos avances y se fueron recopilando toneladas de datos, que ahora con el uso de nuevos algoritmos, la inteligencia artificial tiene la capacidad de realizar tareas, resolver problemas complejos, tomar decisiones de manera autónoma que hasta ahora sólo podía concebirse desde la inteligencia humana.

En estos momentos la IA está llevando a cabo tareas como análisis de datos, con capacidad de identificar patrones -en imágenes, textos y otros datos- y desarrollar pronósticos y con ello, por ejemplo, prever desastres naturales, mejorar la productividad en las chacras o formular alternativas para reducir el impacto ambiental. Es el camino además que pretende transitar la empresa Agro Sustentable de bioinsumos de Misiones, según anunció el viernes Joaquín Basanta. Puede, a su vez, aplicarse en el monitoreo, para predecir fallas o averías en maquinaria o automatizar industrias, además de utilizar robots para tareas peligrosas o analizar la calidad de los productos con el fin de mejorarlos. En el comercio, desde la planificación de rutas de envío del producto a la identificación de tendencias en el mercado, atención al cliente, organizar pedidos, facturación, controles de inventarios, patrones de compras del cliente y de gran impacto en el comercio electrónico.

Como queda demostrado, atraviesa todos los ámbitos y la pregunta es cómo se preparan en todos los ámbitos, un país o una provincia como Misiones para afrontar la irrupción de esta nueva tecnología que “seguirá evolucionando exponencialmente y lo más importante será poder entender cómo manejar las nuevas herramientas”, sostuvo Martín Bueno, presidente y director ejecutivo del consorcio Faniot, con base en el Parque Industrial de Posadas y que ya lanzó varios productos, como el termómetro infrarrojo que le valió el premio Innovar. A su vez, como se indicó, Misiones ha creado un sistema de vigilancia permanente que se apoya en la tecnología más avanzada. Del mismo modo, IA y ciencia de datos se combinan para que niños y jóvenes misioneros y con expansión en el país, accedan a la nueva funcionalidad del Kit Maker IOT. En Oberá se lanzó un proyecto para desarrollar dispositivos para ciudades inteligentes/smartcity que contribuyan a obtener datos referidos a la calidad del aire, temperatura en zonas urbanas, contaminación sonora, calidad y disponibilidad de agua y consumo energético

Se estima que ya para el año que viene la inteligencia artificial superará a la inteligencia humana a la hora de traducir idiomas, hasta podría llegar a escribir en el futuro bestsellers. Como proyección de futuro en medicina tiene Misiones el Robot Da Vinci, que es considerado uno de los más sofisticados instrumentos quirúrgicos conocidos, pero que aún es manejado y obedece las órdenes impartidas por el cirujano para operar con precisión y destreza. Se conoció que ya lleva concretadas más de 1.500 cirugías desde que comenzó a funcionar en 2012 en el Hospital Madariaga hasta el presente, siendo el único que opera de manera gratuita en un hospital público. Se proyecta que se concebirán máquinas autónomas que desarrollarán cirugías complejas.

Fuera de la Argentina, países como China, Estados Unidos e Italia avanzan en su regulación, ante la falta de legislación específica, como también sucede en la Argentina según advierten profesionales del derecho, preocupados por la ausencia del resguardo de la privacidad o ante una posible desinformación. Por eso, el mejor antídoto, como se propone en este informe, es comenzar a entender de lo que habla el mundo en este momento, de qué se trata la IA y cómo acceder y adaptarse a esta nueva herramienta tecnológica.

El chatbot

Al ser consultado el bot creado por Open AI para que defina sus propias funciones, esto fue lo que respondió: “Un chatbot, también conocido como agente conversacional o asistente virtual, es un programa informático que utiliza inteligencia artificial para simular una conversación con un usuario a través de un chat o aplicación de mensajería instantánea. Los chatbots son capaces de reconocer y procesar el lenguaje natural, entender las preguntas y ofrecer respuestas automatizadas y personalizadas en tiempo real. Son utilizados en distintos ámbitos, desde el servicio al cliente hasta el comercio electrónico y el entretenimiento”.

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