Los protocolos de seguridad necesarios en los boliches

domingo 16 de febrero de 2020 | 5:00hs.
Los protocolos de seguridad necesarios en los boliches
Los protocolos de seguridad necesarios en los boliches
Victoria Bergunker

Por Victoria Bergunker interior@elterritorio.com.ar

Hoy el debate gira en torno a la violencia y, como consecuencia, a la seguridad. El asesinato en masa de Fernando Báez Sosa a la salida de un boliche en Villa Gesell volvió a poner en primer plano la discusión en torno a la nocturnidad y todo lo que en ese ámbito pueda ocurrir.
Este tema llamó a reflexionar sobre la noche posadeña y cómo funcionan los protocolos de seguridad en los boliches. El Territorio dialogó al respecto con referentes de este sector, quienes hablaron acerca de las principales medidas y dieron su punto de vista sobre las situaciones violentas.
Julio Villagra (34) es el dueño de la discoteca Brooklyn, ubicada justo en la esquina de las avenidas Centenario y Corrientes. En su caso, sostuvo que luego de lo sucedido a nivel nacional, decidió intensificar las medidas de prevención ante cualquier hecho violento.
“En cada sector tenemos cámaras de seguridad. A raíz de todo lo que está pasando en el país ya compramos cuatro cámaras más: teníamos catorce y ahora son 18 para tener una mejor visión ante cualquier problema desde que comienza adentro hasta que llega afuera del boliche”, afirmó. Esta medida de instalación de cámaras será obligatoria, según adelantó el jefe de la Policía, Víctor Zenon Cabrera.
En este sentido, Villagra comentó que tiene más de diez personas encargadas de la vigilancia, entre guardias civiles y personal policial. “Cada punto del boliche tiene su handy y su láser, que ante cualquier inconveniente se le apunta a la persona indicada, automáticamente el DJ baja la música y avisa que hay un problema, entonces el personal ya está al tanto y se comunican entre sí”, detalló.
En el caso de Brooklyn, la capacidad máxima es de 600 personas, regla que debe respetarse y que debe ser monitoreada por los controles municipales, además de tener todos los papeles al día y contar con las habilitaciones necesarias ante cualquier contingencia. “Tenemos una salida rápida tanto hacia la avenida Centenario como Corrientes, eso se toma en cuenta no solo por problemas de violencia, a veces hay chicos en mal estado, entonces se llama a la ambulancia y se los saca por la vía más rápida para que no se sofoquen”, aseguró Villagra.
“Yo también perdí a un amigo en el año 2002”, recordó apenado, y afirmó que eso lo impulsó a ser “muy riguroso con la seguridad”.  “Siempre hubo violencia, lo que pasa hoy es que se visibiliza más rápido por las redes sociales, circulan videos y demás. Esto ya pasó antes, no es algo nuevo, pero está bueno que la sociedad empiece a tomar conciencia y que los bolicheros tomemos las medidas necesarias para prevenir”. 
Sin embargo, asumió que una característica de la sociedad actual es la intolerancia, y que ante cualquier situación conflictiva la respuesta es ir al choque. 
“El tema es que está en el ser humano la forma de actuar ante la caída de un vaso, es muy fácil chocar a alguien en un boliche pero está en uno pedir permiso o disculpas, eso es lo que no veo hoy en día. Siempre van al choque”, aseguró.
Por su parte, Fabián Negrete, dueño del local gastronómico y bailable Mentecato (San Lorenzo entre Córdoba y La Rioja), aseguró en Radioactiva 100.7: “Cuando tenés una discusión dentro del boliche, dependiendo de la gravedad se los invita a salir, se saca a los que sea necesario y siempre se trata de que no se encuentren en la calle, pero no siempre termina ahí”.
Asimismo, consideró que los boliches son los que siempre quedan en el ojo de la tormenta, pero las situaciones de violencia se dan en ámbitos variados y lamentó que “hoy nadie respeta a nadie”. 
“Los chicos y las chicas se pegan a la salida del colegio y los compañeros lo filman. Si no logramos el respeto desde la casa, esto va a ser cada vez peor”, opinó.
En cuanto al Código de Nocturnidad, Negrete sostuvo que una medida sería multar a los que ocasionan inconvenientes dentro del boliche, que según afirmó los empujones no duran más de medio minuto hasta que interviene personal de seguridad. “Además, con los chicos que quieren regresar a un lugar donde ya tuvieron problemas es justificado reservarse el derecho de admisión”, añadió.
Como padre, confesó que " siempre le digo a mi hijo que entre temprano y se vaya temprano, antes de que salgan todos tomados; si tiene alguna diferencia con alguien que no se enganche y pida disculpas, evitar la pelea hasta el límite y que recurra a la seguridad si hace falta”, aseveró. 

Código de Nocturnidad de Posadas

En el año 2004 el Concejo Deliberante de Posadas sancionó un Código de Nocturnidad que establece restricciones a la venta de alcohol y cigarrillos a menores de edad, prohíbe el consumo de bebidas en la vía pública y fija sanciones a los comerciantes infractores. En 2018, el concejal Martín Arjol impulsó una reforma que establecía -entre otros puntos- que cada local bailable pudiera tener pistas diferenciales para menores de 17 y 16 años y otras para los mayores. Además, el proyecto sugería terminar con las fiestas clandestinas. Sin embargo, por falta de consenso con sus pares, no hubo acuerdo para llegar a un dictamen final.