Realizarán reclamos contra aumentos en planes de auto

Bajo la consigna “Basta de ajustes en planes de ahorro”, un grupo de autoconvocados realizarán hoy un bocinazo en la costanera de Posadas ante el incremento en las cuotas que aplican las concesionarias, cuyos montos alcanzan el 250 por ciento.
La concentración se realizará a las 15 horas en avenida Comandante Rosales y Costanera. Allí firmarán un petitorio que elevarán a la Cámara de Diputados y Senadores con el objetivo de frenar las fuertes subas en los planes de financiación para tener un auto cero kilómetros.
Desde las 17 se movilizarán por la Costanera para visibilizar el reclamo que aqueja a varios damnificados, tanto de la Tierra Colorada como de todo el país. Además, instan a los vecinos a que acompañen el reclamo.
“Estamos muy preocupados. Pedimos que revean esta cuestión porque creímos en las bonificaciones que nos ofrecieron y nos terminaron engañando”, manifestó María de los Ángeles Doronzoro, una de las perjudicadas de este sistema al que consideró como “una trampa”.

Montos impagables
Según comentó a El Territorio uno de los organizadores y también damnificado, Jesús Mascarino, el problema radica en tres aspectos generales: aquellos adjudicados que ya retiraron el auto y no pueden seguir pagando las cuotas mensuales por su precio, que deriva en el remate del auto y la posterior deuda.
Asimismo, aquellos que continúan pagando el plan pero por los aumentos en las cuotas no pueden seguir haciéndolo. Los incrementos varían, según el caso.
Las subas se produjeron por la corrida cambiaria, ya que los valores de los automóviles se cobran por precio dólar. En este sentido manifestó que “no se cumplen con lo acordado y cambian la gama de los automóviles como si nada, sin avisarnos”.
Doronzoro, por su parte, explicó su situación: “comencé pagando 1.900 pesos de cuota el año pasado por un auto de gama media y ahora tengo que pagar 11.000 pesos; es un monto que me resulta imposible pagar”.
Las quejas no solamente se producen en Misiones. Según Mascarino, la situación afectó a todos los ahorristas del país y que, muchos de ellos, perdieron los autos ante el remate por la dificultad de afrontar los costos elevados.
Los damnificados precisaron que, por el momento, no acudieron a medidas judiciales. “Sería una última instancia; no queremos más problemas de los que tenemos”, consideró María de los Ángeles.