ArteRoga, un faro creativo en Puerto Iguazú
La primera sala de teatro independiente en Puerto Iguazú es ArteRoga Espacio Cultural (Roga, en guaraní: casa - ArteRoga: casa de arte), que nació en 2015 como continuidad del proyecto Paracultural de la Selva (1999-2011).
Se trata de un espacio abierto a todas las propuestas creativas, dedicado a las artes escénicas, teatro, títeres, capacitaciones, dramaturgia, danza, cine debate, yoga para niños y adultos y sala de ensayo. Es un centro autogestionado que cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro, el Instituto Provincial del Teatro Independiente (Ipti) y del Estado provincial y el municipal.
Como todo espacio independiente tiene ciertas necesidades, pero para Bibiana Feldmann, quien está al frente de ArteRoga, la más importante es que la agenda sociopolítica incluya la cultura no sólo “como una palabra que adorna”. Consideró que es imprescindible que la agenda incluya a los centros culturales dentro del presupuesto, no como un apoyo individual, sino como una cuestión necesaria que promueve ecos culturales de trascendencia social.
“Mantener un espacio independiente o autogestionado tiene que ver con una decisión de militancia, de poner el cuerpo, sostener y fomentar. Generando eventos, programando funciones para elencos en gira, que a su vez generan la agenda de funciones aportando a la oferta artística para el público local. Ofreciendo talleres de formación, de recreación y salud”, remarcó la reconocida artista y gestora cultural.
Si bien ArteRoga es autogestionado, depende en gran parte del apoyo invaluable del Estado. “Estos organismos del Estado, con sus proyectos de apoyo al que aplicamos en contraprestaciones de hechos culturales, son fundamentales para la permanencia de nuestro quehacer”, insistió.
Con respecto a la aceptación del público local ante las propuestas del centro cultural explicó que “nadie ama lo que no conoce”, por eso es tan importante el fomento, sin embargo y a pesar de que la oferta se ha ampliado con otros espacios independientes, se sigue remando”.
“Aún no sabemos cómo, pero pasa que, con la misma convocatoria de prensa, redes sociales, afiches promocionales, entradas a costos simbólicos, a veces se llena la sala y otras se suspende la actividad. Pero seguimos adelante porque en general la comunidad responde”, marcó.
En alerta
La situación actual, debido a las propuestas electorales que denostan la cultura, mantiene a los promotores culturales en estado de alerta.
“La situación actual de los que promovemos la cultura es de tanta incertidumbre”, consideró y apuntó: “A todas las realidades que enfrentamos, estamos en alerta por las potenciales terribles propuestas de cerrar los centros de estudios públicos, el sostenimiento a la cultura, el acceso al derecho a estudiar en una escuela o universidad pública. Estamos más que nunca levantando las banderas, no de un partido político, sino defendiendo los derechos ganados, el Estado presente y los derechos sin clases sociales”, subrayó Feldmann.
Asimismo, remarcó que “todo lo que hacemos es político, nuestro arte es político. Hoy corremos un riesgo enorme, si no logramos superar las barrabasadas que algún sector propone, de borrarnos literalmente del mapa. Apelamos a la coherencia de la sociedad en querer y necesitar avanzar. Nunca nos ha sido fácil, pero corremos el riesgo de que sea peor que difícil”, concluyó.
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