El Bachillerato Nº16 cumple 50 años apostando a formar futuros profesionales y educando en valores

La lluvia, no opacó el festejo con un acto protocolar por los 50 años del Bachillerato Nº 16, estuvieron presentes ex alumnos, docentes y el primer director de la institución, Carlos González, que llegó a la localidad con diferentes experiencias en educación para hacerse cargo de la dirección.

El acto estaba previsto que se realice al aire libre, pero el clima les jugó una mala pasada y se tuvo que realizar el acto dentro del salón principal, allí una vez todos presentes, el primer director recordó los inicios y para sostener el relato, invitó a el plantel docente que lo acompañaron los primeros años de la institución.

“Tengo un machete para no olvidarme, como hacían nuestros alumnos, a raíz de la creación de tres colegios secundarios, en la provincia y el Concejo de Educación llamó a concurso para cubrir cargos de docentes y allí fui seleccionado para ser director con una antigüedad de 2 años, con 15 horas y el cargo”, manifestó González.

Los primeros meses fue difícil, porque los docentes no estaban cobrando los sueldos y era un esfuerzo pasar más de cuatro meses sin recibir el pago por las prestaciones docentes, “a pesar de no estar cobrando, nuestro concepto en educación era educar en valores, dónde la palabra era más valiosa que un documento, ser honesto y respetar a los mayores y a la democracia, buscando la libertad del sujeto”, dijo emocionado el ex primer director.

Tras la creación de la institución, tuvieron que solicitar al alcalde de la época, Héctor Horacio “chiquito” Dalmau, un espacio para dar las clases y compartir el edificio y hasta la letrina de madera que tenía la municipalidad, compartido por empleados de la comuna, alumnos y docentes.

“Chiquito, nos abrazó, a pesar que éramos de partido contrario, nosotros radicales y él peronista, pero no hubo diferencias y los temas políticos se solucionaban en la oficina del alcalde”, reflexionó González, dejando en claro que se podía convivir a favor de la comunicación.

La llegada al pueblo de los docentes y los alumnos en los años setenta y hasta la llegada del asfalto, fue toda una aventura, “todos los docentes tenían Fiat 600, no podías ser docente si no tenías ese auto”, empezó explicando la ex docente de historia, Mirtha Monge.

El recuerdo es sobre los caminos terrados, se complicaban los días de lluvia y varias veces quedaron en el barranco hasta que mejoraba el clima, “en la zona conocida como el Guaraypo, el camino era hermoso, roja la tierra, parecía un asfalto, pero los días que no llovía y el problema cuando estaba mojado, la primera vez que vine con el auto de mi papá, pensé que iba a poder manejar en el barro, y no fue así, tres días estuvo el auto en el barranco”, comentó entre risas la profesora de historia.

Entre los ex alumnos, además de tener a un locutor nacional, como es el caso de Lucas Turcheñuk, también hay diferentes profesiones que se forjaron en las aulas del bachillerato, también el intendente José Luis Márquez Da Silva, fue un alumno que estudio en esa institución.

“Con algunos profesores, como es el caso de Tonin Filippin, hablábamos de fútbol para que no nos dé el taller de 5 horas y cuando se daba cuenta paso el tiempo y nos íbamos sin dar las clases, agradecemos a todos los profesores, porque no hicieron buenas personas”, dijo el alcalde en su alocución.

Joselo Márquez, remarcó que siempre es bueno pensar en la educación, “cuando pasamos por frente al colegio, nos da ganas de volver unas horas o unos días para volver a esa época escolar, porque con la educación somos libres y los alumnos deben seguir defendiendo esa libertad de recibir educación”.