San Pedro: menor terminó en el hospital luego de oler hojas que un compañero tenía en una bolsa

El consumo de droga no da tregua en la localidad de San Pedro donde la preocupación es enorme. Esta vez, una madre contó a El Territorio, el terrible momento que atravesó con su hijo de 11 años con autismo quien al regresar de la escuela presentaba síntomas compatibles con los efectos de algún tipo de estupefaciente. A consecuencia el menor estuvo en observación en el hospital local, hasta tanto pase el efecto de la sustancia que estuvo en contacto.

Lo grave de la situación es que todo ocurrió dentro del establecimiento educativo al que asiste el menor, la Escuela 341 de Terciados Paraíso que funciona en la zona urbanizada de dicho lugar, donde el consumo de drogas es notable al igual que otros lugares de similares características que se ubican en la zona rural del municipio.

Según detalló a este medio la madre del menor, Rosana Bone, quien está a cargo de un merendero con el que busca contener a los niños del barrio, en la mañana del miércoles, cerca de las 11, el director del establecimiento educativo se comunicó con ella para solicitarle se acerque a la escuela, y por el horario ella quedó en dirigirse por la tarde. Sn embargo, las condiciones en la que llegó su hijo a la casa le cambiaron los planes.

El menor al regresar al hogar, cerca de las 12:30, presentaba los ojos rojos, se quejaba por dolor de cabeza, mareo y dolor en los ojos. "Le pregunté qué pasó y me dijo que un primo llevó a la escuela una bolsa con yuyos, según él era marihuana y le mando oler. Comenzó a sentirse mal. Avise a la escuela que lo llevaría al hospital. Él estuvo en emergencia, solo dormía, el médico me dijo que era efecto de alguna droga", indicó Rosana Bone.

La madre asegura que es la primera vez que el niño presenta síntomas similares y que no sale de la casa para otra cosa que no sea ir a la escuela, por lo que se siente más que preocupada "La vida de mi hijo es de casa a la escuela, jamás anduvo solo. En la escuela me dijeron que lo que había en la bolsa era un cogollo y que acercarían a Gendarmería Nacional para que analicen de que se trata", señaló Rosana.

"Me siento muy aterrada, pido por favor se haga algo para detener este problema que llegó a los niños. Yo vengo luchando diariamente para que los chicos no caigan en las adicciones, es durísimo y triste ver que afecta a los niños. Voy a activar todos los mecanismos para que esto no vuelva a pasar", dijo Bone. El menor estuvo en observación por cerca de cinco horas. De acuerdo al certificado médico "Ingresó a emergencia por haber aspirado producto que se encontraba en la bolsa".

En la escuela el hecho fue detectado por los docentes que diariamente están atentos a lo que realizan los niños durante los recreos. Ayer, luego del último recreo en el turno mañana, surgió el comentario entre los alumnos de que uno de ellos tenía droga, por lo que de inmediato, el personal docente junto al director tomaron medidas y encontraron la bolsita que contenía las hojas.

Ante el hallazgo y sin saber a ciencia cierta si se trata de marihuana, desde la escuela dieron procedimiento al protocolo para avisar a las familias involucradas, a la supervisión y luego a las demás familias y así transmitir tranquilidad. En horas de la tarde se conocerá si las hojas corresponden a Cannabis Sativa.

Si bien, lo único que hallaron fueron hojas, resulta inquietante y resta determinar si el olor de las hojas de marihuana es capaz de provocar este tipo de reacciones o se trató de alguna otra sustancia que no fue encontrada. El hecho pone en relevancia la necesidad de que las escuelas cuenten con un equipo interdisciplinario para abordar de manera permanente este tipo de problemáticas y generar conciencia en los alumnos, más allá de alguna charla o taller que pueda realizarse.