Los combustibles tendrán una nueva suba esta semana: entre 2 y 2,5%

miércoles 31 de julio de 2019 | 2:00hs.
Los combustibles tendrán una nueva suba esta semana: entre 2 y 2,5%
Los combustibles tendrán una nueva suba esta semana: entre 2 y 2,5%
Como lo vienen haciendo todos los meses, los combustibles volverán a ajustar sus precios durante esta semana, en el arranque de agosto. Aunque todavía no está claro el porcentaje del ajuste, se ubicaría entre el 2 y el 2,5 por ciento.

A nivel nacional, en promedio, las naftas subieron un 17,5 por ciento en lo que va de 2019, con un arrastre de más del 70 por ciento de incremento en 2018.  En los casi cuatro años de gobierno de Mauricio Macri, el aumento superó el 250 por ciento.

Cuando se produzca, la nafta súper alcanzará o incluso superará por primera vez en Misiones los 50 pesos (hoy cuesta 48,88), mientras que la versión premium, actualmente en 54,51 pesos, se podría ir hasta casi 56 pesos.

Es que este mes el gobierno  nacional debería aplicar lo que quedó del impuesto a los combustibles del mes pasado, cuando desdobló su aplicación, de acuerdo a informaciones publicadas por el portal Infobae y por el diario Ámbito Financiero.

Al decir de los especialistas del sector se trata, sin embargo, de un valor moderado, teniendo en cuenta que, a juicio de las petroleras, los combustibles todavía tienen un atraso estimado del 10 por ciento respecto del precio de la variación que tuvieron el tipo de cambio y el petróleo en lo que va del presente año.

En los próximos días el gobierno oficializará una resolución en la que definirá cuánto aumentará del impuesto, pero si se aplica todo lo que quedó de julio, la suba podría variar entre el 2 y el 2,5 por ciento. Salvo que decida, una vez más, seguir difiriendo el tributo referido producto de cercanía de las elecciones. 
Luego, las petroleras determinarán si sobre eso aplican una recomposición del precio producto del atraso.

En julio, el aumento anunciado fue del 2,5 por ciento para las naftas y del 1,75 por ciento para el gasoil, pero la Secretaría de Energía de la Nación había informado que desdoblaba el aumento en dos para moderar el aumento. 

La mera aplicación del impuesto habilitaba una suba del 1,8 por ciento, según dijeron en el sector, pero el aumento fue superior.

Atraso con el dólar 

Según los referentes de las petroleras, los combustibles todavía tienen un atraso del 10 por ciento respecto del precio de la variación que tuvieron el tipo de cambio y el petróleo en lo que va del año

 Afortunadamente para el consumidor, el dólar y el petróleo no tuvieron en los últimos meses nuevas variaciones, al decir de los especialistas económicos. Bajaron, incluso, su cotización.

El dólar se mantuvo algunos meses estable en el país y volvió a cobrar ritmo en los últimos días, aunque de forma leve, mientras que el Brent llegó a valer 68 de dólares el barril, ayer se ubicó en 63,71 de la moneda estadounidense. 

Perjuicio para el sector

A inicio de julio, la Federación de Empresarios del Combustible (Fecra) criticó el aumento de combustibles que aplicó YPF y que tuvo su correlato en el sector privado. “Con cada aumento, el capital de trabajo se ve afectado”, aseguró por entonces el secretario de Fecra, Hernán Landgrebe. Según detalló, el sector ya experimenta una caída de las ventas del 10% en el último año y en la oferta premium la migración a combustibles más baratos alcanzó el 25%. Días atrás, la decisión del gobierno de aplicar sólo un tercio del Impuestos a los Combustibles Líquidos (ICL) llevó cierto optimismo a los estacioneros. “Supimos que, después del desdoblamiento que hizo el gobierno, dos petroleras privadas habían decidido absorber el impuesto. Sin embargo, nos enteramos que YPF dio este aumento y ya sabemos que el resto de las petroleras va a ir detrás”, sostuvo Landgrebe. Agregó: “Pensábamos que con el dólar planchado y con la baja en el crudo, ya tenían recompuestos sus márgenes de ganancias. A nosotros como operadores nos complica, porque cada aumento que hay se resiente en el consumo. Creímos que la segunda parte del año iba a empezar bien, pero parece que no”. La petrolera estatal informó que el incremento responde a la suba global del precio del petróleo, que tuvo un crecimiento de casi 6% en Londres. “La decisión del gobierno de aumentar el Impuesto a los Combustibles Líquidos ayuda a moderar la suba. Los aumentos, previo a impuestos, están por debajo a la inflación de junio”, destacó la compañía.

Hace cuatro años, en Capital se pagaban $12,45 por litro

 El 23 de noviembre de 2015, el día después del triunfo de Mauricio Macri en el balotaje, YPF aplicó un aumento del 4,5 por ciento, lo que significó la mayor suba desde 2013. Respondió al alza del dólar  por el anuncio de Alfonso Prat Gay de levantar las regulaciones cambiarias. Con el dólar a 9,74 pesos, el valor de la súper quedó en 12,45 pesos. Ahora la nafta súper de YPF cuesta 43,81 pesos en Buenos Aires, lo que significa un 251 por ciento de aumento en menos de cuatro años.
Por su parte, el litro de nafta premium era de 14,03 pesos, mientras que ahora es de 50,43 pesos: una suba del 259 por ciento. El euro diesel pasó de 12,97 pesos a 47,22 pesos, lo que significa un incremento del 264 por ciento. Y el diesel  500 pasó de 11,82 pesos a 40,94 pesos, un 246 por ciento más.
Mientras que ahora el litro de nafta súper cuesta 43,81 pesos en el centro del país, hace exactamente un año tenía un valor de 27,83 pesos. En julio de 2017 era de 19,74 pesos y en julio de 2016, de 17,08 pesos, según un revelamiento de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y afines de la República Argentina (Cecha), publicado por Página 12.

Con respecto a la premium, hace tres años el litro costaba 19,30 pesos. En julio de 2017, 22,33 pesos. En el mismo mes de 2018, 33,20 pesos. Ahora el valor es de 50,43 pesos.

En el caso del gasoil, el litro en julio de 2016 costaba 15,53 pesos. Un año después, 17,32 pesos. En 2018, 24,20 pesos. Y finalmente hoy tiene un valor de 40,94 pesos.

 Una de las causas del aumento de las naftas es el incremento del impuesto sobre los Combustibles Líquidos.  
Mediante un decreto publicado en el Boletín Oficial, el gobierno dispuso que la suba de julio sea del 3,92 por ciento, por lo que el gravamen pasó de 9,94 a 10,33 pesos por litro de nafta y de 6,13 a 6,37 pesos por litro de gasoil.

Sin embargo, el aumento del impuesto que había fijado anteriormente el gobierno era casi tres veces mayor, del 11,8 por ciento por litro.   La diferencia se compensará en agosto y esta semana se producirá otro incremento de los combustibles al público. 
“Los constantes ajustes en el valor de la nafta y el gasoil impactan sobre los costos de logística de toda la economía y constituye una de las causas de la alta inflación”, según los expertos.