Advierten que la presión impositiva y las altas tasas son insostenibles

domingo 19 de agosto de 2018 | 6:00hs.
Gerardo Díaz Beltrán. Presidente de Came.
Gerardo Díaz Beltrán. Presidente de Came.
Victor Piris

Por Victor Piris vpiris@elterritorio.com.ar

Profesionales contables, investigadores y directivos de asociaciones empresariales coinciden en que el peso impositivo y los mayores costos financieros cada vez pesan más sobre la actividad empresaria. Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) se propuso al gobierno cambios para que las pymes accedan a financiación de capital de trabajo más barata. Y también tengan mayores facilidades para el pago de impuestos.
En tanto, a nivel local se recordó que urgen actualizaciones por inflación en varios impuestos, ya que se trata a micro y pequeñas empresas como si fueran grandes aportantes. También se apuntó a que el gasto administrativo para adelantar y controlar impuestos está cada vez más presente en las pymes.
“Lo más acuciante en este momento son las altas tasas de interés que tenemos. Hay que aliviar la presión porque con estos costos no se puede hacer nada”, comentó Gerardo Díaz Beltrán, presidente de Came en diálogo con El Territorio. El directivo recordó en un reciente trabajo de la entidad empresaria que las pymes le deben al sistema financiero en general 490 mil millones de pesos en los últimos doce meses. Y sobre este monto se deberán pagar 150 mil millones de pesos sólo en intereses, tomando como promedio tasas de entre el 50 y 60 por ciento.
“No hay rentabilidad que permita sostener estos niveles de interés en el tiempo. Cómo no hay línea de créditos blandos, cada vez se debe recurrir más a usar adelantos de cuenta corriente. Esto hace que las pymes se vayan complicando en su financiación hasta endeudarse peligrosamente”, explicó el ahora directivo nacional.

Medidas urgentes
Díaz Beltrán recordó que recientemente el Ministerio de Producción de la Nación sacó una línea de descuento de cheques con una tasa del 29 por ciento. “En este momento es una buena tasa, pero igualmente consideramos que es alta. Se debería apuntar a ir bajándola más. En este sentido, le hemos acercado propuestas que consideramos muy viables al Gobierno”.
El empresario detalló que “le presentamos a Dante Sica (ministro de Producción) dos propuestas fundamentales, una para el sector financiero y otra tiene que ver con la Afip. Ninguno de los planteos que hicimos requiere una aprobación legislativa y pueden implementarse con celeridad. Somos muy conscientes de que hoy necesitamos pequeñas cosas, pero urgentes”.
Se explicó que en el primer pedido requiere modificaciones del Banco Central en la regulación de los encajes de los bancos. Esto permitiría menores exigencias para bajar tasas de crédito para capital de trabajo al 21 por ciento. Después otra propuesta para que se permita al (banco) Bice ofrecer líneas especiales del 21% para las pymes. Creemos que la tasa de referencia debe ser del 21 por ciento para las pymes”.

Trabajo con la Afip
En cuanto a la reglamentación del esperado artículo 10 de la Ley Pyme, Díaz Beltrán recordó que “Esta reglamentado para las zonas de frontera. Pero requiere del acuerdo entre Nación y provincias para bajar ingresos brutos. Se iba aplicar la rebaja para el sector comercial y de servicios y la rebaja de aportes patronales a partir de los 12 mil pesos”.
Otro pedido importante según Díaz Beltrán es conseguir flexibilizar el pago de impuestos: “Le pedimos a la Afip que el adelanto de ganancias sea del 5% y no del 25%, como es ahora. Buscamos que las pymes no tengan que desfinanciarse pagando impuestos, porque hoy lo que más necesitan es financiarse”.


La presión tributaria que más subió

Un reciente trabajo del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) destacó que la presión tributaria argentina fue la que más subió entre 2002 y 2016 a nivel de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Se detalló así que en el último año del periodo, el país llegó a tener un valor de 31,3% de presión fiscal sobre el PBI. Con los valores registrados Argentina quedó en el cuarto lugar, luego de Cuba (41,7%), Barbados (32,2%) y Brasil (32,2%).
“Nosotros analizamos qué componentes de la recaudación fueron los que más incidieron en el aumento de la presión tributaria”, explicó a El Territorio Florencia Maldonado, investigadora del Iaraf que integró el equipo de realización del estudio.
La profesional destacó que entre los impuestos más significativos en el aumento de presión se destacaron “el IVA neto, junto con el impuesto a las Ganancias y por último el impuesto de las provincias más importante que es Ingresos Brutos”. Así, el Iaraf destacó que, en ese contexto, Argentina fue el segundo país de mayor crecimiento acumulado en su presión tributaria a lo largo del período 1990-2016, con una variación de 17,6 puntos porcentuales del PIB, luego de Bolivia que experimentó un crecimiento de su carga tributaria de 17,7% del PIB. "Si bien Argentina aumentó su carga tributaria entre 1990 y 2016, el 73% de ese aumento se registró entre 2002 y 2016, convirtiéndose en el país que más incrementó la presión fiscal en ese período", sostiene el informe.