En la localidad actualmente no hay un espacio en el que hacer la verificación

Ante la necesidad local, montan un taller de VTV escolar en San Pedro

El proyecto pedagógico fue reconocido como uno de los 20 mejores del país y lograron financiación nacional. Buscan que sirva como fuente laboral en la zona
domingo 21 de mayo de 2023 | 6:04hs.
Ante la necesidad local, montan un taller de VTV escolar en San Pedro
Ante la necesidad local, montan un taller de VTV escolar en San Pedro

El Centro Educativo Luca Giovanni Fossati donde funcionan la Escuela 382 y la Epet 28 de Paraje Gentil, San Pedro, es uno de los establecimientos escolares que se destaca por la realización de proyectos que apuntan a resolver y mejorar distintas problemáticas o necesidades con las que puede enfrentarse la comunidad. Tal es así que algunos de estos trabajos educativos fueron reconocidos a nivel nacional.

En esa línea, se encuentran en la ejecución para el montaje de un taller de Verificación Técnica Vehicular (VTV) con el propósito de responder a una amplia demanda local y apuntar a una escuela autosustentable.

La iniciativa nació antes de la pandemia de Covid-19, pero esa situación fue uno de los factores que ralentizó el proceso para su puesta en funcionamiento. Sin embargo, la propuesta pedagógica fue postulada ante el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (Inet) y orgullosamente elegida entre los 20 mejores del país.

Por medio de Crédito Fiscal, una línea de financiamiento del Inet para estas ideas, se obtuvieron dos millones de pesos que fueron utilizados para la compra del equipamiento pesado, es decir, los que se colocan en la fosa en el área de revisión vehicular.

Objetivos

El taller fue ideado con tres objetivos principales. Uno de ellos responde a la demanda local y de la zona, ya que actualmente los sampedrinos deben trasladarse a San Vicente o Eldorado para acceder a este servicio que está entre los requisitos obligatorios para circular con un automóvil.

Destacan el trabajo en equipo para lograr los objetivos fijados.

En segundo lugar disponer de un ingreso económico, una vez este el taller habilitado permitiría al establecimiento educativo afrontar los costos que demanda su funcionamiento, teniendo en cuenta que al ser de índole rural, por cuestiones de traslados se torna una escuela de jornada completa y tercero brindar a los futuros técnicos en Mecanización Agropecuaria un espacio donde ampliar, aplicar conocimientos y ofrecer una fuente laboral.

“Pensamos en brindar un servicio necesario en la localidad y favorecer la formación de nuestros técnicos, hemos avanzado en una primera etapa con la financiación del Crédito Fiscal con la compra de los equipos que van empotrados en las instalaciones para el control del vehículo. Ver cómo este proyecto, que es resultado de un trabajo mancomunado de todo el equipo, comenzó a tornarse una realidad nos genera gran satisfacción, en especial por el aporte en la formación de nuestros alumnos”, indicó a El Territorio Luis Pedrozo, director de la Epet 28.

La ejecución del proyecto avanzó con la primera etapa que consiste en la adquisición de los artefactos pesados como por ejemplo el tablero de medición y control, el tablero de potencia 4x4, analizador de gases, opacímetro de flujo parcial, placa de deriva y el frenómetro de rodillos para 4.000 kilogramos.

Otra etapa contemplará la compra de los equipos livianos que consiste en todo aquel instrumental que será manejado por un operario como ser: medidor de suspensión liviana, detector de holgura neumática, gato mecedor, medidor de velocímetro y taxímetro, gabinete de control, para cuya compra deben gestionar un segundo desembolso del Crédito Fiscal.

Una vez que la escuela cuente con todo el equipamiento necesario para tan significante proyecto se pasará a la fase de edificación del edificio donde será montado el taller.

La estructura será construida en una superficie terrestre lindante al predio escolar, por lo que la rutina diaria del establecimiento educativo no se verá afectada por el ingreso o salida de vehículos, preservando así la integridad y seguridad de los alumnos.

En ese sentido, Pedrozo señaló: “Para esa etapa tenemos el compromiso de la Fundación Arturo y Ana Tubino, que aportarán los fondos económicos necesarios para construir el taller, que no es nada menor en estos tiempos. Una vez este todo montado esperemos este anhelo de toda una comunidad pueda tornarse realidad con la respectiva habilitación”.

Si bien el impacto social del proyecto lo torna innovador e interesante, en lo que hace referencia al efecto o beneficios que trae en la formación de los alumnos fue lo más destacado por tres motivos. El primero hace referencia a la capacidad que deben tener como técnicos de formular proyectos, lo que los hace partícipes desde los primeros pasos para la realización de la propuesta.

“Lo bueno es que el personal docente también accedió a conocimientos sobre este nuevo equipamiento que para nosotros era raro. Este proyecto forma parte del proceso de aprendizaje que tiene que ver con la adquisición de determinadas capacidades que demanda nuestra orientación, que es Mecanización Agropecuaria”, precisó el director.

Además representará un espacio donde poder realizar las prácticas, incluso se piensa en la posibilidad de que los alumnos, una vez recibidos y habiendo adquirido las capacitaciones acordes, sean quienes estén al frente como operarios en el taller y en eso consiste el tercer factor benéfico, tornarse una fuente laboral para los egresados pero también para otros jóvenes de San Pedro.

El hecho de que por medio de un trabajo en equipo donde cada miembro de la escuela puso de su parte -algo que parecía un gran desafío en un centro educativo rural- se ejecute con enormes beneficios pone en evidencia el rol de las escuelas técnicas, la gran capacidad que tienen las escuelas ubicadas en el interior de la provincia y la predisposición de los alumnos que provienen de realidades muy diferentes y encuentran en la escuela la posibilidad de desarrollar sus capacidades. 

 

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