Una pequeña gran reserva en Posadas

Para conocer los sorprendentes árboles de la selva misionera no hay que ir muy lejos. Aquí, en la capital provincial, pueden encontrarse y admirarse más de 180 especies nativas. Se trata del bosque de especies nativas ubicado en el Parque de la Ciudad y que se denominó “Bosque de Especies Nativas Misiones 2000”.
El lugar fue ideado y desarrollado en 1990 por el ingeniero agrónomo Carlos Krausemann. El predio, propiedad de la Municipalidad de Posadas, consiste de un reducido espacio de aproximadamente dos hectáreas donde se están concentrando la totalidad de las especies nativas existentes en Misiones tanto arbóreas, subarbóreas y arbustivas leñosas de más de cinco metros de altura. “Por el reducido espacio y la gran variedad no se implantan más de tres plantas por especie, salvo los casos en los que para producirse una buena semillación sea necesaria la fecundación cruzada, optándose en estos casos por cinco o seis plantas por especie”, comentó el profesional tiempo atrás en una nota para el suplemento El Productivo.
La razón prioritaria por la que el ingeniero Krausemann propuso este bosque y que hoy se puede considerar concretado en un 85%, se basó en la necesidad de contar con un área que se constituya en un reservorio de especies nativas y como consecuencia en una reserva semillera.
Entre la gran variedad pueden encontrarse especies de frutales como el araticú, diversas especies de pitangas y hasta una planta de yerba mate en proceso de tomar dimensión de árbol.
A pesar de la gran variedad, Krausemann recuerda que todavía hay varias especies que pueden anexarse o que se las plantó pero por algún motivo no prendieron. Así, recordó al mamón del monte, el ombú y la mora de monte como especies que deben ser repuestas en el predio.

Algunas especies
En la foto de esté artículo puede verse una ejemplar de yukeri guazú. “Es un árbol que da una floración muy linda y que en algún momento se lo pensó como opción de ser plantado para embellecer la ciudad”, comentó el profesional. Krausemann recordó que el bosque puede ser usado con fines didácticos y como muestra multiplicadora de las variedades que pueden volver a plantarse en la ciudad y en la provincia.
Entre algunas de las muchas especies (plantadas en su gran mayoría por el ingeniero agrónomo) se pueden encontrar ejemplares de: aguay guazú, aguay, anchico colorado, anchico blanco, alecrín colorado, aguaribay, araticú, azahar de campo, araticú hojas finas, araticú miní, ambay, cauna, cancharana, canela de viado, danela do brejo hojas finas.
También curupí, camboatá colorado, guatambú blanco, barba de chivo, koku, kaki de monte, laurel negro, mata ojos, mistol, mora amarilla, ñandipa, ortiga brava, pakuri, palo amargo, palo jabón, pitanga naranja, pata de buey, sauco, sangre de drago, siete capotes, seibo de monte, soita, tataré, timbó colorado, tala gateador, urunday, tala trepagdor, iva pobó , ivaporoity blanco, yva hai, yatay misionero, jazmín de monte o palo cruz, entre otros.




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