Incentivar la base para reactivar el país

domingo 29 de diciembre de 2019 | 6:00hs.
Ochoa espera resultados en meses.
Ochoa espera resultados en meses.
María Marta Fierro

Por María Marta Fierro política@elterritorio.com.ar

Para el economista Darío Ochoa, la Ley de Solidaridad y Emergencia crea el marco para que el país pueda ponerse en movimiento y pagar la deuda. Estimó que la inflación todavía seguirá alta, en torno al 40%. La tarea pendiente: reestructurar la deuda. Los puntos centrales de la charla, punto por punto.

La megaley
“Me parece que la ley de Emergencia va en un sentido correcto. Enumero un par de medidas: la compra de bienes y servicios en dólares o moneda extranjera con un 30%, las retenciones al agro para poder despegar los precios internos de los externos, mejorando la situación de los sectores de menores ingresos. También Bienes Personales: mientras más cosas tenés, más pagás. Congelamiento de tarifas, importante porque generan inflación. Hoy no tenemos cortes porque el consumo cayó”.

Riesgo país
“El paquete ofrece una perspectiva viable de pago de deuda y eso repercute en algunos mercados o el riesgo país. Dota de recursos al Estado para cancelar la deuda. Ahora falta la restructuración. Igual, no hay que analizar los mercados en el corto plazo, porque tienen un humor medio raro, un día te apoya, al otro día pasa algo en Ucrania y explota. Pero el riesgo país viene bajando”.

Jubilaciones
“Las cuestiones de urgencia tienen que ver con el cambio quizás más polémico: la movilidad jubilatoria. Lo urgente es mejorar la base de la pirámide social, o sea las jubilaciones mínimas. Y elevarla muy por encima de la actualización vía fórmula, pero achatar la parte de arriba. O sea, los sectores que tienen mejores jubilaciones no recibirían aumentos. Es polémico, pero es justo en una situación de extrema vulnerabilidad”.
“Paralelo a esto se recompone el fondo de garantía de sustentabilidad a través del impuesto a las operaciones en dólares. Viene a recomponer un fondo que tenía 62 mil millones de dólares a fines del 2015 y que ahora anda en 28 mil. Lo han reventado durante los últimos cuatro años y ahora hay que recomponerlo para poder dar aumentos más generosos en el futuro”.

Reactivación
“No quiero caer en el remanido segundo semestre, pero entiendo que en seis meses vamos a empezar a ver los resultados. Si se analiza desde la lógica macro, primero está el aumento de los ingresos del Estado para poder distribuir. El Estado se va a apropiar de una riqueza de un sector que puede aportarla y redistribuirla a los sectores que no pueden consumir. Lo va a hacer vía jubilaciones y vía aumentos salariales, en especial de la parte más baja de estatales que ha perdido muchísimo dinero, paritaria nacional docente, el bono a los privados o sea una batería de medidas para dinamizar el consumo. Como somos un país que genera el 80% de su producto interno a través del consumo de las familias, las jubilaciones y demás, es evidente que vas a empezar a mover la rueda de la economía, a tener mayores recaudaciones y vas a poder hacer inversión pública, lo cual va a dinamizar aún más la economía. Y la inversión privada va a venir atrás. Entonces vamos a tener un 80% de la economía andando a pleno. Hay que afinar la ecuación de las exportaciones. Agregar más valor agregado. En esto celebro el Ministerio de Ciencia y Tecnología”.

Deuda
“La reactivación permite el repago de deuda. Porque el principal problema de Argentina es que se endeuda, pero se endeuda para fugar. Estos cuatro años han sido endeudamiento y fuga. No compraron nada. No han hecho nada con la deuda, más que llevársela a Panamá. Y no es justo porque todos aportamos para conseguir esos dólares y cuatro o cinco vivos se la llevan, que es la historia de este país. Espero que no vayamos a un nuevo ciclo de endeudamiento. Ahora, los mercados están cerrados y la Argentina nuevamente va a tener que pagar”.

Inflación
“La inflación tiene una dinámica muy acelerada. Los dos últimos meses fue del 5%. Ahora a partir del cepo que dejó el macrismo, sumado a desactivar las comprar en el exterior, sumado a que esta recomposición salarial va a ir a la base que va a ir a consumir alimento y bebidas, una cadena de valor que no demanda dólares, no tiene por qué haber picos inflacionarios. Hay una dinámica estructural de la economía argentina, pero para mí en 2020 vamos a rondar el 40% y ahí le espera un sendero en degradé. No hay que plantear fantasías, como hacía el anterior gobierno, de decir que la inflación del 2018 era del 15% y terminó en 43%. Hay que anclar las expectativas con todos los jugadores. En esto va el acuerdo de planchar las expectativas de precios y salarios y reacomodar un poco. Si logramos eso, vamos a tener una transferencia progresiva y progresista de los ingresos, esto es un país más justo. Y por el otro lado solucionar el tema de la deuda que va a dar oxígeno para implementar políticas públicas. Si lográs hacer eso vamos hacia un modelo de crecimiento. Y si aumenta el empleo”.

Dólar
“La medida estructural más que importante es este impuesto al atesoramiento de dólares. Es fundamental, lo banco. Hay gente enojada, pero tiene que ver con una cultura que hemos tenido los argentinos, que no es culpa nuestra. Sino de las brutales devaluaciones. En 2018, 100% de devaluación, de 20 a 40. Y ahora 50% de 40 a 60, de la gente que supuestamente era amiga del mercado. Acá, o el Estado maneja la economía, con fuertes normativas en función de las necesidades generales, o la manejan los mercados en función de cuatro vivos”.

Ahorro
“Hay que generar mecanismos de ahorro para los argentinos. En ese sentido va el desgravamen a los plazos fijos, que gravaba el ahorro. Era una locura. Hay que desincentivar el ahorro en dólares, porque no los generamos. Los dólares tienen que ir para el aparato productivo, para general empleo. La política no puede renunciar a su dimensión pedagógica. Eso tiene que ser bien explicado. Los medios de comunicación tienen que clarificar. Tienen un rol social que cumplir. Y en función de eso ir desacostumbrándonos”.
“Todos admiramos a Brasil porque no ahorran en dólares, sino en reales. Tiene que bajar la inflación y generar mecanismos de ahorro cierto. Te tiene que dar un plazo fijo con una tasa de interés real, por encima de la inflación. Pero no puede ser la del macrismo, al 80%. Si baja la inflación a 40%, la tasa de interés tiene que ser 47 o 48%. Un poquito más, que te permita ahorrar. Y a los bancos y al Estado direccionar ese ahorro en cuestiones productivas”.

Acuerdo político
“La principal incógnita es en términos políticos. Cómo lográs sentar a estos sectores de la economía, grandes cadenas de supermercados, elaboradoras de alimentos, bancos. Me preocupa este acuerdo social con una oposición que no parece ser muy constructiva. Tenemos que ir a un consenso social lo más amplio posible y dejar los planteos neoliberales que han generado todo esto dolor. Este es el desafío más difícil. Pero en principio, esta ley da muchas herramientas al Estado. Y hay que celebrar”.