Desde el origen a la expansión con la ayuda de Marco Polo

domingo 20 de enero de 2019 | 6:00hs.
El cultivo se afianzó en la zona Centro de Misiones y prosperó con su particular clima.
El cultivo se afianzó en la zona Centro de Misiones y prosperó con su particular clima.
En la página del Ministerio de Agroindustria de la Nación se da a conocer un trabajo del profesor Luis De Bernardi sobre el Perfil del té (Camellia sinensis). Da cuenta, en primer término, de los registros históricos que hacen referencia a que el descubrimiento del té es atribuido al emperador chino Shen Nung, en el año 2737 antes de Cristo.
Cuenta la leyenda que el emperador había ordenado hervir toda agua para el consumo humano. Y por casualidad hojas de té silvestre cayeron en uno de los recipientes en ebullición. Al sentir el aroma especial, el emperador se vio tentado a probar la infusión y al instante quedó encantado con su sabor.
En el siglo VI a.C. fue llevado por monjes budistas al Japón. El té se hizo rápidamente popular y se comenzó a cultivar localmente. Su preparación conforma un ritual que adquirió importancia ceremonial. Con la dinastía Tang (618-907) comenzó el arte del té, ocupando un lugar destacado similar a la pintura y la poesía. Bajo esta dinastía, el poeta Lu-Yu escribió en el siglo VIII el Código del Té, conocido como Tcháking.
Durante la dinastía Sung (1101-1127), el emperador Hui-Tsung estableció el consumo entre sus seguidores, alcanzando rápidamente trascendencia y popularidad.

Motivo de viajes épicos
El té es introducido en Europa en el siglo XIII por Marco Polo, luego de sus épicos viajes a Oriente. A comienzos del siglo XVII, la Compañía Holandesa de las Indias Orientales se aseguraba el comercio con Asia, desplazando a portugueses y españoles de la India y el lejano oriente. El té comenzó a ser popular en Holanda a mediados del siglo XVII, con posterioridad los holandeses lo introdujeron en el resto de Europa.
En el año 1600 el gobierno británico crea la Compañía de las Indias Orientales, quienes iniciaron su actividad luego de obtener concesiones comerciales que permitieron realizar importaciones monopólicas de té de china, para satisfacer el rápido crecimiento de su mercado interno como el de su principal colonia en América.
En el continente africano se introdujo a comienzos de 1877.
En Georgia, república transcaucásica a orillas del Mar Negro, inicia su cultivo a comienzos de siglo XX, alcanzando su máximo desarrollo en la década del 60.


En Misiones

En la Argentina, en la provincia de Misiones, precisamente en la localidad de Tres Capones, en el año 1923, se realizaron los primeros ensayos. Las pequeñas parcelas dieron origen a un incipiente negocio local, no obstante, comienza a trascender y adquirir importancia económica cuando se empieza a operar en el mercado internacional. De este modo, nuestro país se convierte en el productor más austral del mundo y el más importante del continente.
En el citado informe del Ministerio de Agroindustria de la Nación, recuerdan que en la Argentina la época de cosecha o zafra abarca el período comprendido entre la segunda quincena de octubre, hasta fines de mayo, dependiendo de las precipitaciones ocurridas, como así también de las heladas tardías y tempranas.