Silencio y libertad para últimos dos implicados en picada mortal

sábado 27 de julio de 2019 | 0:05hs.

Los últimos dos automovilistas detenidos a mediados de semana bajo sospecha de haber sido parte de la picada en la que el taxista Guillermo Flores (23), manejando alcoholizado y en exceso de velocidad, atropelló y mató a un peatón en Puerto Iguazú, se abstuvieron de declarar ayer ante la Justicia, pero al cierre de esta edición fueron excarcelados.

De acuerdo a lo consignado por diversas fuentes consultadas por este matutino, los implicados idenficados como Fernando G. (26), oriundo de Jardín América pero radicado hace pocos meses en Iguazú, y Luis M. (35), amigo del principal sospechoso, fueron llevados ayer al Juzgado de Instrucción Tres local.

Allí comparecieron en audiencia de declaración indagatoria ante el magistrado Martín Brites, aunque decidieron abstenerse de declarar, tal como los ampara su derecho.

Las fuentes añadieron que en la misma audiencia ambos designaron abogados defensores particulares y luego fueron imputados por infringir el artículo 193 bis del Código Penal Argentino que juzga “con penas de prisión de seis meses a tres años a aquel conductor que creare una situación de peligro para la vida o la integridad física de las personas mediante la participación en una prueba de velocidad o de destreza con un vehículo automotor realizada sin la debida autorización de la autoridad competente”.

Culminada la audiencia, la defensa de los dos sujetos presentó sendos de pedidos de excarcelación que fueron analizados de forma individual durante el trancurso de la jornada y las autoridades anoche iban a dar lugar a ambos planteos, por lo cual los dos automovilistas iban a recuperar la libertad pero supeditados a la causa.

Además, las fuentes añadieron que en la víspera la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional V dio con el Volkswagen Gol que faltaba y el rodado iba a ser inmediatamente incautado para las respectivas pericias.

Se cree que este rodado era conducido por Luis M. (35), dado que el Chevrolet Celta propiedad del otro implicado ya había sido secuestrado durante el procedimiento que culminó con la detención del sujeto en la jornada del último miércoles.

Ambos sujetos quedaron vinculados al hecho a partir de una pesquisa que se apoyó inicialmente en testimonios de ocasionales testigos y que terminó confirmando en base a registros de cámaras de seguridad que sus vehículos y el Renault Logan de Flores iban realizando maniobras peligrosas en medio de las comúnmente denominadas picadas.

Fue en medio de ello que el auto de Flores terminó embistiendo a tres obreros salteños que caminaban por la avanieda Tres Fronteras. Gustavo Morales (46) murió practicamente en el acto, en tanto que Fabián Maras (23) y Sebastián Carrizo (23) sufrieron graves lesiones.

Los ocasionales testigos habían afirmado que Flores, al mando del Logan, iba excedido de velocidad y cuando ocurrió el siniestro, los otros automóviles con los que estaba se escaparon de la escena. Las cámaras mostraron que, efectivamente, trataba de alcanzar a los otros coches que iban a gran velocidad metros mas adelante.

El dosaje sanguíneo hecho por un bioquímico determinó después que tenía 1,04 gramos de alcohol en sangre, es decir, más del doble permitido para circular por la Ley Nacional de Tránsito.

En cuanto a los otros, si bien por el tiempo transcurrido es imposible saber si estaban alcoholizados, es lo que se presume porque habrían sido vistos en un local bailable un rato antes.

Flores fue imputado por el delito de homicidio culposo agravado y lesiones, lo que aún lo mantiene privado de la libertad, dado que el jueves la Justicia rechazó un pedido de excarcelación.

Por el lado de los heridos, el único que permanece internado en el hospital Madariaga de Posadas es Sebastián Carrizo, a quien le amputaron una pierna y su estado general es grave, por lo que sigue en terapia intensiva bajo monitoreo médico permanente.

Alcohol al volante, otra vez en debate

Las circunstancias en las que se produjo el hecho registrado el domingo reabrió el debate en torno a un proyecto de ordenanza de alcohol cero al volante, el cual fue presentado hace casi dos años en el Concejo Deliberante. En esta oportunidad, la iniciativa es de la Dirección de Prevención de Conductas Adictivas de la Municipalidad, que en la figura de Daniel Peralta insiste en la sanción y puesta en marcha de la ordenanza. “Iguazú debe contar con una ordenanza de alcohol cero, es una medida preventiva, lamentablemente somos infractores por naturaleza y muchas veces ponemos en riesgo la vida de alguien, y necesitamos que alguien nos diga lo que no debemos hacer”, dijo Peralta en diálogo con El Territorio esta semana.