“El misterio de la Pascua nos llena de esperanza”

Con hojas de palmas trenzadas, adornadas con plantas medicinales y cantando alabanzas, vecinos de Posadas se acercaron ayer a la céntrica plaza San Martín para vivir el Domingo de Ramos, la celebración que da inicio a la Semana Santa de los cristianos.

En el lugar, el Obispo Juan Rubén Martínez bendijo los ramos y con el agua bendita llegó a todos los presentes. “Hoy nos congregamos para celebrar en toda la Iglesia el misterio pascual, este sagrado misterio que se realiza por la muerte y resurrección de Jesús. Por ello, Jesús ingresó en la ciudad santa y nosotros llenos de fe y con gran fervor recordemos aquella entrada triunfal y sigamos al Señor para que por la gracia que brota de su cruz lleguemos a tener parte de su resurrección”, expresó al comenzar su bendición.

Procesión con las palmas hacia la explanada de la Iglesia Catedral, donde se celebró la misa.

En tanto, continuó, “el anuncio, la revelación de la presencia de Jesús provocaba la indignación de muchos de sus contemporáneos que no entendían la presencia de Dios en medio de ellos, por el contrario lo rechazaban, lo veían como alguien peligroso. Pero Jesús sigue este camino aún con la incomprensión sobre todo de los más poderosos, y nosotros ahora lo acompañamos en este momento fuerte, dónde él sube a Jerusalén para vivir el misterio de la Pascua”.

“La Pascua en el corazón”

El monseñor indicó que en esa entrada gloriosa de Cristo a Jerusalén cuando cientos de personas le dan la bienvenida, él llega sobre un burro, de la manera más humilde, “no parecía que ingresase un rey y sin embargo él era el salvador y en estos días lo vamos a acompañar”, invitó y añadió que la clave para vivir la Semana Santa es no ser meramente espectadores externos sino que “podamos internalizar en nuestros corazón la celebración del misterio de la Pascua”.

Vecinos de Posadas en la tradicional cita que da inicio a la Semana Santa.

Indicó que ese es el camino del cristiano, “él nos salva y en esta Semana Santa, en las liturgias vamos a colocar nuestros dolores,  sufrimientos, tantas muertes y tantas sombras que hay en nuestra realidad. Pero nosotros sabemos que el misterio de la Pascua nos llena de esperanza a los cristianos aún en medio de los odios, del daño, de los pecados estructurados en nuestra sociedad”.

Antes de culminar la bendición y encabezar la procesión hasta la explanada de la Catedral, donde se celebró la misa de ramos, el prelado alentó a vivenciar la Semana Santa no como un recuerdo sino que “por la fe podamos vivir haciéndolo presente, actualizando el misterio de la Pascua”. z“Comenzamos este camino de acompañar a Jesús con una fe comprometida, que se refleje en nuestras vidas y en nuestras opciones”, concluyó.