Homenaje a la nación europea
Una fecha, el 27 de agosto de 1897, conmemora el arribo a “colonia Apóstoles, a 16 leguas de la capital”, según escritos de la época, de un contingente de inmigrantes europeos. La misma fecha que Posadas recuerda un 27 de agosto de 1937 y deja plasmada en una placa de bronce sobre lo que era la transitada y conocida “bajada nueva” al puerto.
Posiblemente, la placa sea la constancia de la instauración del nuevo nombre a la arteria, que de ahí en más sería la avenida cuyo nombre, Polonia, evoca el país de procedencia de muchos de esos que descendieron al puerto y luego con sus bártulos a cuestas subieron la empinada curva que unía el apostadero de embarcaciones con la ciudad.
Los primeros polacos que desembarcaron en Posadas, llegaban hasta un galpón que habría estado ubicado en calles San Martín y Félix de Azara y donde se habría habilitado una Oficina de Inmigración.
La placa denota además la importancia de la arteria que bajaba al puerto por su transitabilidad, al denominarla “avenida”. Algo que con el correr de los tiempos y los cambios urbanísticos, se transformó en la calle que hoy conocemos como una bifurcación de Santa Fe.
Esta perlita urbana se encuentra en la confluencia de la avenida Polonia con la avenida Roque Sáenz Peña, a metros del inicio de la calle Belgrano y a pasitos de la Costanera de Posadas, rumbo al río Paraná.
