"El clima tiene impacto pero no es un factor determinante"

domingo 26 de abril de 2020 | 6:00hs.
Gustavo Méndez. Jefe de Infectología del Madariaga
Gustavo Méndez. Jefe de Infectología del Madariaga
Victoria Bergunker

Por Victoria Bergunkerinterior@elterritorio.com.ar

A pocos meses de que se haya instalado el Covid-19 en casi todos los rincones del mundo, la información es muy vasta en algunas áreas y en otras, aún escasa y sin certezas, incluso dentro de la comunidad médica y científica. Los interrogantes son muchos, por eso El Territorio dialogó con Gustavo Méndez, responsable del Servicio de Infectología del Hospital Escuela de Agudos Doctor Ramón Madariaga, quien brindó un panorama acerca de lo que hasta hoy se sabe del virus y de la enfermedad.

¿Qué es un coronavirus?
El coronavirus pertenece a una familia y con este nuevo son siete en total, que han demostrado afectar al ser humano. A algunos ya se los conoce desde la década del 50 y otros son más nuevos, como el del año 2003, que tuvo una mortalidad más elevada pero con una menor tasa de contagio, fue el famoso Sars. Hace algunos años hubo un coronavirus que se conoce con el nombre de Mers, que afectó fundamentalmente áreas del Medio Oriente y tenía una tasa de mortalidad que rondaba el 35%, pero menor capacidad de contagio, que es la principal característica de este.
Los otros coronavirus son causantes de cuadros febriles o gripales, que muchas veces hemos diagnosticado, no del de este momento que es el Sars-Cov-2, sino de otras cepas, que comúnmente se resuelve y más de uno lo habrá padecido hasta casi sin darse cuenta.

¿Influye el clima en su comportamiento?
Las primeras apreciaciones eran que por la época del año en que empezó a aparecer en el mundo teníamos cierta ventaja porque nosotros tenemos temperaturas elevadas, por lo que la capacidad del virus de sobrevivir eran menores. En países cálidos o con temperaturas similares a las nuestras, la evolución parece ser muy similar. Pero, hay que resaltar que aún en este contexto si miramos las diferencias entre las provincias argentinas, la cantidad de casos ha sido distinta. En Chaco, si bien comenzó a partir del ingreso de personas que estuvieron en el extranjero, siguió independientemente del clima. Como resumen, el clima tiene impacto pero no es un factor determinante.
Lo que nosotros vemos de los días fríos es que hay más tendencia a que haya más aglomeración de la población, y eso en el contexto de un virus que se transmite de forma respiratoria, obviamente que aumenta la chance de que las personas adquieran la infección.

¿Por qué se dice que es un virus multisistémico?
Cuando hablamos de una afección multisistémica o a múltiples órganos, de cualquier enfermedad, se da en la parte más avanzada, en los cuadros más graves. Un 80% de los casos de coronavirus son leves, es decir que no van a requerir internación ni ningún tipo de tratamiento, más allá del aislamiento, el uso de barbijo y la disminución del contacto con los convivientes. Un 20% de los pacientes desafortunadamente requieren internación porque pueden presentar cuadros de neumonía que pueden ir de leves a severos.
De este 20%, hay un pequeño porcentaje que va a requerir terapia intensiva. Este paciente va a necesitar asistencia respiratoria mecánica y la mortalidad es del 50%, uno de cada dos pacientes que entra en terapia intensiva puede fallecer. En este contexto se producen las alteraciones multisistémicas más importantes porque la neumonía que se produce puede repercutir en otros órganos como el riñón, el corazón, el hígado y alterar el funcionamiento normal.

¿Cuál es el grupo más propenso?
Lo que es más común en este tipo particular de pacientes es que aquellos que ya tienen una enfermedad previa la pueden empeorar. Por ejemplo, el que tuvo un infarto miocardio o que tiene una insuficiencia cardíaca puede empeorar su situación. El paciente que tiene un problema hepático de base, una cirrosis puede descompensar la situación.
Hay muchas cosas en su comportamiento y en su forma de afectar que coincide con otras pandemias no tan lejanas en el tiempo, como la última Influenza H1N1en 2009. La obesidad, los pacientes con alguna enfermedad que genera una disminución del funcionamiento del sistema inmune, con cáncer, los que reciben medicaciones inmunosupresoras, los diabéticos, hipertensos y los más añosos son los más riesgosos.

¿Qué se sabe de las secuelas que puede dejar a los infectados?
Es muy pronto para poder sacar grandes conclusiones con el tema de las secuelas, si bien tenemos mucha información todavía hay áreas en las que no tenemos certezas. Para aquellos que tuvieron casos leves es como un resfriado común, pero en los pacientes que han tenido neumonía se ha visto que podrían quedar algunas secuelas a nivel de la capacidad pulmonar. Lo que tampoco sabemos es si esas secuelas van a ser permanentes o si con la evolución de los meses van a ir mejorando.

¿Qué no se debe hacer si se tiene la enfermedad?
Lo que nunca se debe hacer ante la sospecha de tener la enfermedad es no consultar. Lo segundo, es automedicarse. Lo tercero -que va en consonancia con los otros dos puntos- es evitar acudir a centros de salud. Lo mejor que se puede hacer como inicio es la consulta telefónica. Muchas de las cosas que decimos hay que contextualizarlas en el mundo real, lo ideal es que el enfermo se aísle en una habitación y tenga su propio baño, pero hay gente en diferentes estratos sociales que no puede hacerlo. Por eso se diseñaron estrategias para aquellos que no pueden autoaislarse, como los albergues, para cortar la cadena de transmisión.

¿Qué medidas se están tomando en Misiones?
Se está trabajando ciegamente en todas las instituciones de salud, tanto públicas como privadas, para estar lo mejor preparados posibles. No estamos esperando de brazos cruzados, se están aumentando las camas, generando insumos y demás medidas destinadas a poder absorber una potencial demanda de pacientes. Además, a diario se toman medidas para proteger al personal de salud, que no es sólo el médico sino enfermeros, kinesiólogos, técnicos de laboratorios y todos aquellos que hacen que un hospital funcione a diario.