Caso Goncalves: aguardan por el testimonio del sobreviviente y analizan prisión domiciliaria para uno de los imputados

A un mes del ataque a tiros que se cobró la vida de Hugo Sebastián Goncalves (25) y dejó en grave estado al padre -identificado como Néstor Fabián Goncalvez (49)-, la justicia aguarda que el último pueda recuperarse para luego contar su versión de lo que ocurrió en la tardecita del pasado 3 de marzo en una chacra del Paraje Cabure-í de Comandante Andresito. Por el hecho, hay dos detenidos.

Mediante fuentes judiciales, El Territorio pudo saber que, si bien el relato de Goncalves padre puede ser una de las pruebas más claves para la reconstrucción del hecho, esto no afecta a la investigación en curso. En relación a las distintas pruebas recolectadas hasta el momento, fuentes consultadas con acceso al expediente manifestaron que siguen a la espera de distintos resultados.

Uno de los resultados que necesitan para continuar con la investigación son las pericias metalográficas a las distintas armas de fuego secuestradas durante los allanamientos en los domicilios de los dos sospechosos, identificados como Basilio M. (74) y Joel F. (31) -dueño y capataz de la propiedad de la zona Industrial de Andresito-. Los estudios determinarán si alguna tiene relación con el fatal episodio.

Pedido de domiciliaria
Por otro lado, según fuentes consultadas por este medio, la defensa del mayor de los imputados solicitó ante el Juzgado de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, presidido por el magistrado Martin Brites, que su cliente espere el proceso de investigación de la causa desde su vivienda. Es decir, que le conceda la prisión domiciliaria debido a su edad. Este pedido aún no ha sido respondido por las autoridades.

Esta solicitud no es la primera realizada pidiendo mejores condiciones para los sospechosos, ya que dos días después de las detenciones, agricultores de la zona se congregaron en la comisaría local para reclamar por la aprehensión de los acusados. Mediante esto, los manifestantes lograron que Basilio acceda a mejores condiciones de detención.

Autopsia e hipótesis
Por otro lado, la autopsia realizada en el cuerpo de Sebastián Goncalves (25) determinó que la víctima falleció por el impacto de proyectiles -similares a perdigones de escopeta- en la zona de la espalda. Estos disparos afectaron el pulmón y otros órganos, que le provocaron la muerte inmediata.

Respecto al móvil del hecho, aún no se descarta ninguna hipótesis. Una de ellas apuntaría a que las víctimas pudieron ser confundidas con delincuentes por uno de los detenidos. Asimismo, se trazó la posibilidad de que el crimen haya sido consecuencia de una vieja rencilla previa entre el mayor de los detenidos con padre e hijo.

Fuentes que intervienen en el caso indicaron que los nombres de los sospechosos fueron incorporados al caso apenas unas horas después del ataque a partir de la declaración de la novia del menor de las víctimas. El aporte testimonial fue incorporado por Ana Paula (21), quien apuntó al dueño de la chacra como posible sospechoso y en base a una mala relación que el ahora detenido mantenía con su pareja y suegro por una antigua venta de tabaco.

El hecho
Lo que se pudo reconstruir hasta el momento en base a los datos recabados por los investigadores apunta a que el ataque se habría producido entre las 18 y las 19.30 del domingo, ya que un rato antes Ana Paula (21) compartió una ronda de tereres con sus familiares, mientras estos dos trabajaban en un sector de la chacra.

A partir de lo que declaró la pareja de Hugo Sebastián, se sabe que la muchacha había regresado a la chacra cerca de las 17, luego de haber estado en casa de un familiar.
Al no encontrar a su novio en la vivienda, decidió ir hasta el sector donde se trabaja con el secado de las plantas de tabaco. Allí, ubicó al joven y a su papá en plena labor diaria.

En ese contexto, Ana Paula narró a los investigadores que pasó varios minutos acompañando a sus familiares cebando tereré, pero que al cabo de un rato, cuando empezaba a oscurecer, decidió regresar a la casa.

Sin embargo, minutos antes de las 19.30, ya en su morada, la muchacha relató que escuchó un estruendo similar a un disparo, pero que no le llamó la atención en ese momento.

Un rato más tarde, notó raro que su pareja no le respondiera unos mensajes que le envió para saber a qué hora regresaban para cenar. Por lo que ya preocupada, decidió preguntar al encargado de la plantación de tabaco donde viven si sabía algo de su novio y su suegro.

Es en medio de la charla con el vecino en donde arriban a su casa un agricultor de la zona quien contó a la joven que instantes antes había visto a dos personas tiradas en cercanías a una cortina de eucaliptos de la zona y que al parecer serían su novio y su suegro. Cuando fueron a corroborar ese dato se toparon con los cuerpos de padre e hijo tendidos sobre un camino terrado. El más joven sin vida y su familiar en delicado estado de salud.

Según el exámen realizado por el médico policial de turno, Néstor Goncalvez recibió impactos en distintas partes del cuerpo; uno de ellos en el ojo izquierdo y otros en la espalda, sumado a las lesiones provocadas por perdigones que luego de un mes lo mantienen internado en delicado estado de salud y con respirador en la sala de terapia intensiva del hospital Samic de Eldorado.