Proyecto de amigos en San Ignacio
Conectados más allá de la música y la grabación
La música sin lugar a dudas conecta, mueve los sentimientos de muchas personas y enlaza una amistad que no sólo une en instrumento o voz para el canto, sino que también con distintas experiencias vividas a la par.
En los estudios de grabación también sucede magia como en los escenarios. Es un rincón donde se reúnen los músicos para que el ritmo musical perdure en el tiempo. Por eso, en San Ignacio, dos amigos Matías Salinas (34) y Emiliano Lorenzo (24) tuvieron una gran idea, que el estudio que tienen sea un espacio no solo de trabajo, sino también de reunión para disfrutar entre músicos.
Matías, oriundo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y radicado en Misiones, y Emiliano, nacido en San Ignacio, están detrás de este emprendimiento.
“Matías hace muy poco tiempo llegó, fundó este mágico espacio. Yo llevo once años en la música y siempre tenía el entusiasmo de cooperar con músicos y brindar un servicio con el fin de relacionarse y mostrar su arte”, contó Emiliano sobre la experiencia.
Ambos, apasionados por el rock, incursionaron en distintos tipos de instrumentos. Matías experimentó con la guitarra, piano, banjo, ukelele, mientras que Emiliano se dedica al canto y también ejecuta guitarra, bajo, batería, ukelele y cavaquinho.
El porteño llegó con la valija llena de ilusión e iniciativas. “Tuve una sala de ensayo en Buenos Aires durante diez años, en 2021 vine a San Ignacio, sentí cierto romanticismo y hasta enamoramiento por el entorno natural majestuoso que Misiones nos brinda, debido a eso el proyecto de sala de ensayo evolucionó en estudio de producción y grabación”, contó.
Matías se dio cuenta de que en la zona no hay tantas bandas como en la ciudad, pero a la vez hoy más personas quieren hacer música y no necesitan tener todo el armado de una banda.
“Hoy podés crear todo desde una computadora y solamente el cantante es el que viene al estudio a grabar, no es en todos los casos así pero sí en la gran mayoría”, expresó.
El objetivo es ofrecer un espacio en donde los músicos generen un contenido audiovisual y puedan ser parte de la vidriera que brinda hoy internet.
Los amigos saben que esto tiene un gran costo de inversión para bandas y que muchas veces no está tan al alcance. Por eso, optan por ofrecer un servicio profesional pero con precios accesibles.
El proyecto comenzó en enero y a casi un año ven que ya se ganaron un lugar.
Esto se puede ver en el ciclo de sesiones del canal de YouTube Vibración Estudio con artistas invitados. Según explican, funciona como difusión del espacio y también al portfolio artístico del músico.
“Nuestra intención es tejer redes, que aquí se encuentren músicos y nosotros como productores vamos a impulsar que compartan la experiencia. Queremos llenar ese espacio vacío en lo externo e interno, que pueda fluir el arte, se pueda crear y compartir la misma pasión”, explicó Matías.
En tanto, Emiliano, al reflexionar sobre la importancia de la música, expuso: “Va más allá de ser una ciencia física, de vibraciones sonoras que viajan por el aire, es una parte esencial de nuestras vidas y cuando dicen ‘no podes vivir de la música’ o ‘sos un vago’, estamos convencidos de que la música es el motor de nuestras vidas y que, pese a las condiciones, sí se puede vivir de este rubro, de diversas maneras, pero se puede”.
Las puertas de Vibración Estudio están abiertas para todos, es una oportunidad para ampliar los horizontes del arte, desde todos los estilos, edades y géneros ya que, tanto Matías como Emiliano consideran que el arte va mucho más allá de los límites que uno mismo pueda imaginar.
Sin restricción de ningún tipo, creen que es un lugar donde se puede entablar una amistad entre músicos de distintos puntos de la provincia y más allá de grabar o trabajar en conjunto, que se constituya como un sitio también para compartir y disfrutar entre artistas.