Cuentos de antaño que se cuelan en el presente

La madre del Che Guevara hablando de la revolución cubana en Posadas, El Mono Gatica y su cruce con el local Negro González... y otros insólitos relatos dan vida a los cuentos que recorren las páginas de Misiones del ayer, Posadas de antaño, el 10º libro de Rubén Emilio ‘Tito’ García. Recordando cómo se conocieron con algunos amigos y personajes destacados de la cultura local o cómo vivieron en una Posadas donde todavía se ordeñaban vacas cerca del casco céntrico, la presentación del libro se llenó de anécdotas que dieron vida a las historias reflejadas en este compilado de textos.

 En la mesa dispuesta en el escenario de la Biblioteca Popular Posadas -donde se realizó el lanzamiento- acompañaron a García, el escritor Raúl Novau y Gonzalo Peltzer, director de El Territorio, que prologaron el título. En esa línea García agradeció a su doble colega veterinario y escritor Novau y especialmente al Decano no solo la oportunidad de publicar sus textos sino también por ser  “una casa cultural que se aboca a la gente misionera”.

“Ellos  me dieron la idea de organizar este libro y con sumo cariño lo tomé, lo hice  para mí porque creí que mis artículos transmitían sentidas emociones de mi querida provincia de Misiones”, sumó. Además recordó a sus maestros y luego intercambió recuerdos compartidos con Novau y otros presentes.

En coincidencia, Novau  por ejemplo recordó la amistad de García con Abdón Fernández y algunas vivencias de antaño que aparecen en el libro y se sienten en carne y hueso como los corsos en los clubes, Club El progreso o la Casa paraguaya y personajes como Eulalia, la curandera del barrio detrás del Regimiento.

 “Cuanto más fuerte la anécdota mejor sale el cuento”, refirió Novau. “Ya tenés un saco de imágenes fuertes y de ahí tenés que ir sacándolas de a poco e ir trabajando en la ficción porque la ficción hace entrar mucho más en el cuento”, completó el experimentado escritor. En tanto, Peltzer resaltó la constancia y el tesón de García, que comenzó publicando estos recortes históricos en El Territorio, por emprender la tarea de nuclearlos finalmente en un libro.

 “El libro es un soporte también del periodismo y este libro está lleno de historias que nadie las hubiera contado si Tito no lo hacía”, destacó al tiempo que reconoció la acción como periodística. “En parte lo que hace el periodismo es contar historias”, definió.

 Convencido de la necesidad de plasmar relatos que grafican más que un momento, la idiosincrasia de un pueblo, García celebró el puntapié inicial de esta aventura que terminó convirtiéndose en libro y que en definitiva, eterniza las vivencias de la gente que persiste en este tiempo y alentó a seguir escribiendo y seguir contando, a pesar de que no es fácil encontrar canales para hacerlo.