Puerto Libertad: Halcones Azules subcampeones de básquet infantil en los Juegos Evita del año 1952

Características de hazaña tuvo la incursión en el año 1952 representando a la tierra colorada, del club de básquetbol Halcones Azules de Puerto Libertad, en el Campeonato Nacional Evita llevado a cabo en Buenos Aires, consagrándose en la ocasión subcampeón nacional en esa disciplina, representando a la provincia de Misiones. Precisamente en ese año se incorporaba a los juegos el básquetbol, ya que en 1949 se inició con el fútbol infantil.

La delegación de Halcones Azules estuvo conformada por 10 jugadores: Jorge Rodríguez, Raúl Talavera, Marcelino Santacruz, los primos José Miguel “Ruley” y Derlis Carballo, Francisco “Chongo” Cabañas, Alejandro “Paí” Giménez, Armando “Totí” Velázquez, Ramón Carballo y Apolinario Marín. La Dirección Técnica estuvo a cargo del recordado docente entrerriano Enrique González Villamea, y el ayudante de campo, el también docente pero porteño, de apellido Couzo; la categoría era cadetes y para clasificar al Nacional debieron eliminar a los equipos de la provincia y a los de Corrientes y Chaco.

El 1 de enero de 1952 partieron del puerto local en el Guayrá hasta Posadas, de allí hasta Concepción del Uruguay en tren y la etapa final hasta el puerto de Buenos Aires, nuevamente en barco.

El regreso triunfal con el podio fue en el mes de marzo; tiempo en el cual vivieron experiencias increíbles estos niños, que de practicar el básquet en la canchita de tierra de la escuela 157, con tablero de madera y pelota de cuero Nº 6; lo hicieron en los escenarios porteños (San Lorenzo de Almagro, Luna Park, Ríver y Ateneo de la Juventud), con piso de parqué, tableros de vidrio y las desconocidas para ellos, “pelota naranja” de plástico.

 Santa Fé fue el campeón en aquella ocasión. Mil y una anécdotas quedaron de aquellos días en la mente y la memoria de estos “mitaís”, de su paso por la gran ciudad; conociendo lugares emblemáticos como ser el autódromo recién inaugurado, el zoológico, la cervecería Quilmes de los fundadores de la  localidad como Puerto Bemberg, y otros tantos.

Como recuerdos imborrables también que atesoraron los Subcampeones, recordaron entre otros, que se hospedaron con otra delegación en el Liceo General San Martín, que el lanzamiento de los juegos se realizó en el estadio de River Plate, y las palabras de bienvenida estuvieron a cargo del entonces Presidente de la Nación Juan Domingo Perón; y el broche de oro de la gira fue cuando al final de los juegos, todas las delegaciones fueron recibidas en la Casa de Gobierno por Evita, recibiendo de sus manos cada uno de ellos el libro “La Razón de mi Vida”.

Recordaron que la esposa de Perón estaba entonces con la salud desmejorada, y fallecía 4 meses después en julio de ese año. 70 años pasaron de aquella epopeya, memorada hoy todavía, por dos de los protagonistas: Marcelino Santacruz y Francisco “Chongo” Cabañas.