Dejar de fumar: jóvenes lideran los pedidos de ayuda

Los adultos jóvenes son, en la actualidad, quienes más se preocupan por el consumo de tabaco al notar los cambios en su salud que el consumo de este producto provoca, tales como fatiga al caminar o hacer deportes, tos y abundante expectoración, síntomas comunes al fumar frecuentemente o desde temprana edad.

Así lo informaron en el marco de las actividades por el Día Mundial Sin Tabaco que se realizaron ayer en la plaza San Martín, de Posadas.

En ese sentido y dado que el tabaquismo es una adicción multicausal, el tratamiento para abandonar el cigarrillo es abordado desde sus aristas social, psíquica y biológica, trabajo interdisciplinario que se lleva adelante en los catorce consultorios de cesación tabáquica que existen en toda la provincia. Una de esas aristas tiene que ver con la alimentación.

Al respecto, la licenciada en Nutrición Valeria Da Luz explicó a El Territorio que la mayoría de los pacientes fumadores no tiene una alimentación saludable, por lo que se acomodan hábitos y conductas que acompañen el dejar el vicio, contemplando que la persona no supla el cigarrillo con comida.

“El cambio de conducta lleva a un cambio en la psiquis y en la parte alimentaria, porque también hay una afectación del metabolismo”, señaló.

Al tener el cigarrillo como un hábito, desde el área psicológica se trabaja con el manejo de la ansiedad que sufre quien está dejando de fumar. Es decir, con las cuestiones conductuales y emocionales que “varían dependiendo de la subjetividad de cada persona”, pero, por lo general, pueden relacionarse al ámbito laboral, familiar o académico.

La convocatoria de ayer reunió a decenas de estudiantes secundarios que fueron convocados por los ministerios de Salud y Prevención de Adicciones, la Municipalidad de Posadas y otras áreas para poner en común información para concientizar y dialogar sobre distintos temas: consumo problemático de alcohol y tabaco, prevención y tratamientos de adicciones.

“Es una muestra simbólica para que tomemos conciencia sobre una sociedad libre de humo”, remarcó el ministro de Prevención de Adicciones, Samuel López.

En Misiones hay consultorios gratis para dejar el cigarrillo. Fotos: MARCELO RODRÍGUEZ

El eje es la prevención, pero también “generar conciencia y brindar dispositivos de atención para aquellos que toman la decisión de dejar de fumar o para quienes están atravesando situaciones difíciles con el alcoholismo”.

Una de las preocupaciones de las autoridades en la población joven es el uso del cigarrillo electrónico y la falsa creencia de que no produce complicaciones y sirve para dejar el cigarrillo tradicional.

“Nunca desde Salud Pública se lo propuso como un método para dejar de fumar y desde el programa estamos totalmente en contra, sabiendo que hay estudios que dicen que contiene sustancias que se convierten en residuos tóxicos”, señaló Guillermo Rolón, a cargo del programa de Cesación Tabáquica en Misiones.

Y siguió: “Además, tienen un sistema de pila que varias veces provocó explosiones y daños irreversibles a nivel orofaríngeo. Provoca una adicción que es igual o mayor al cigarrillo tradicional y el proceso de calor y combustión va dañando las células de las mucosas”.

Nocivo

Si bien el tabaquismo es nocivo para la salud, debido a que por pitada hay un ingreso de casi 700 sustancias tóxicas, también es la adicción de la que más rápido el cuerpo empieza a recuperarse. Al cabo de una semana son notorios los cambios en la respiración, los sabores, los olores, las uñas y el cabello. Una vez alcanzado el año sin consumo, hay un 70% de recuperación cardiovascular y respiratoria. En otras palabras, el cuerpo da tregua al tomar la decisión de dejar de fumar.

En el evento los profesionales coincidieron al indicar que la mayoría de consultas es de adultos a partir de los 30 años aproximadamente. “Vimos muchas mujeres que generalmente están más estigmatizadas al querer dejar algún tipo de adicción, porque vivimos en una cultura patriarcal, entonces es como que les da un poco de vergüenza pedir ayuda cuando hay un problema con el alcohol o el tabaco”, precisó Da Luz.

De este modo, explicó que los programas de cesación tabáquica son gratuitos. Cuando la persona llega a la consulta, además de hacerle controles de rutina, el equipo de salud le pregunta por qué quiere dejar de fumar y en conjunto con el paciente se establece lo que los profesionales denominan el Día D, cuando ya no toca más un cigarrillo.

Desde ahí y durante ocho semanas el reemplazo nicotínico se hace con parches y después de esas semanas el paciente queda en un control de vigilancia con consultas presenciales o virtuales. El punto crítico, por el peligro de que existan recaídas, ocurre a los tres meses, por ello al paciente se lo monitorea.

En la provincia los consultorios con equipos formados en la materia están en los hospitales de San Pedro, Capioví, Apóstoles, Candelaria, Puerto Esperanza, Campo Grande, Fátima (Garupá) y Ramón Gardés (Eldorado) y el CIC de San Vicente. En Posadas funcionan en el Caps 32 de Itaembé Miní, el Caps 5 de Yacyretá, el Caps 23 del A-4, el Monoclínico Manantial y el Caps municipal de Miguel Lanús.