A través de un petitorio buscan evitar el cierre de la Sala Tempo

El cierre de la Sala Tempo, previsto para el 31 de octubre de este año, es hasta el momento un hecho inminente. Pese a los pedidos a las autoridades para evitar su cierre en su sede de 3 de Febrero casi Córdoba -o una posible relocalización- para evitar que se pierdan los casi 31 años de historia en los que la sala trabajó en pos de la cultura misionera. Sin embargo, el pedido no obtuvo las respuestas esperadas y el drama continúa sin una posible solución.

Luis Andrada, director de Sala Tempo y defensor de la cultura en Misiones, redactó un petitorio que hará circular en los próximos días y que planea hacer llegar al resto del país. “Para que no se cierre ni una sala más de teatro independiente en ningún lugar del país”, apuntó el director.

“La señora presidenta dijo, al inaugurar una nueva infraestructura industrial que: ‘si no hay fábricas, no hay obreros’. Esto es para nosotros una sala, una fábrica donde trabajan los creativos que se expresan mediante la actividad teatral. Una fábrica que permite que el producto llegue directamente a su destinatario: la gente. La falta de salas se agudiza en el interior del país, y aún más en el interior del interior”, manifiestó Andrada en una parte del petitorio.

Andrada expresó que el apoyo de la gente es amplio porque de alguna manera todos están preocupados. Por ello, considera -y es uno de los puntos contemplados en el petitorio- que las salas independientes deben ser declaradas de interés público y patrimonio cultural en todo el país.