Nono, un tesoro poco conocido en las Sierras Grandes de Córdoba

Nono, situado en  Valle de Traslasierra, en el departamento San Alberto de Córdoba, se encuentra a 160 kilómetros de la capital provincial. Rodeado por localidades como Mina Clavero, Arroyo de los Patos, Las Calles y Las Rabonas, Nono se conecta con ellas a través de la ruta provincial n° 14, un corredor que une todo el Valle de Traslasierra. Lo que hace que Nono sea aún más especial es su fusión única de crecimiento turístico y desarrollo inmobiliario sostenible. Esta combinación ha llevado a una amplia oferta de alojamientos y restaurantes que satisfacen a los visitantes más exigentes. Aquí, los turistas pueden disfrutar de una variedad de opciones gastronómicas y de hospedaje que se adaptan a todos los gustos y presupuestos.

Sin embargo, a pesar de su crecimiento, Nono ha sabido conservar su autenticidad y riqueza cultural. El perfil artístico y cultural del pueblo se ha convertido en un tesoro que la comunidad local se esfuerza por preservar. Los visitantes pueden experimentar la calidez de un típico pueblo serrano mientras exploran su diversidad geográfica y cultural.

Nono se alza como un centro neurálgico en el Valle de Traslasierra, tanto por su ubicación estratégica como por la calidad de sus servicios. Además, cuenta con el honor de ser el pueblo más antiguo en esta región, una historia que se mezcla con el presente en sus calles empedradas y su arquitectura pintoresca.

Laberinto de Nono

Ubicado en la Ruta 14, kilómetro 104, en el pintoresco Bajo De Ocanto, se encuentra un lugar mágico que promete desafíos y diversión para todas las edades: el Laberinto de Nono. Con su número de contacto (03544) 15435986 y su sitio web www.laberintodenono.com.ar, este emprendimiento privado se convirtió en un destino imperdible para los amantes de los juegos y la aventura.

El Laberinto de Nono es mucho más que un simple recorrido de enigmas. Este parque es un verdadero oasis de entretenimiento con seis laberintos, incluyendo el tradicional de tuyas que abarca impresionantes 900 metros cuadrados de intriga y emoción. Pero no se detiene ahí, ya que también ofrece una variedad de juegos de coordinación y equilibrio que desafían incluso a los más ágiles.

Los más pequeños también tienen su lugar en este paraíso de la diversión, con una sección especialmente diseñada para ellos, donde podrán disfrutar de juegos adaptados a su edad y habilidades.

Una visita al Laberinto de Nono es una experiencia que puede durar desde una hora hasta hora y media en promedio, aunque muchos visitantes eligen quedarse mucho más tiempo, sumergiéndose completamente en la diversión que este lugar tiene para ofrecer. Y cuando llegue el momento de un merecido descanso, la confitería del parque es el lugar perfecto para recargar energías. La confitería cuenta con una amplia terraza desde donde se puede disfrutar de un panorama impresionante y relajarse con un delicioso refrigerio.

El Museo Rocsen

Una imponente fachada custodiada por 49 esculturas da la bienvenida a los visitantes del Museo Rocsen, un lugar donde el tiempo y las culturas se entrelazan en una colección fascinante y diversa. Fundado por Santiago Bouchon, este museo es uno de los destinos más concurridos del Valle de Traslasierra y de toda la provincia de Córdoba. La fachada del museo, con sus 49 estatuas, es solo el comienzo de un viaje a través de la historia y la cultura. Estas estatuas, que representan a científicos, artistas, filósofos y místicos de todas las épocas, fueron fabricadas a mano por el propio fundador.

Una vez dentro, los visitantes se sumergen en una exhibición impresionante que abarca más de un centenar de temáticas diferentes y alberga cerca de 55,000 piezas en exhibición permanente, con aún más en depósito esperando ser mostradas. Desde animales prehistóricos hasta elementos culturales de todo el mundo, el museo ofrece una experiencia dinámica e interesante para personas de todas las edades e intereses. La versatilidad de las exposiciones se refleja en la diversidad de disciplinas que abarcan, incluyendo biología, física, química, arqueología y antropología. Entre las piezas más sorprendentes se encuentran una momia de Nazca con más de 1,200 años de antigüedad, urnas funerarias calchaquíes que datan de hace más de 1,000 años, una colección de 2.000 minerales de América y el resto del mundo, y 400 fósiles de todas las eras.