Se presentó ayer en la Facultad de Humanidades

Longoni, el de ojos honestos, y una charla imprescindible

El fotógrafo reconocido por captar imágenes emblemáticas de la historia argentina, repasó el devenir de la democracia
viernes 19 de mayo de 2023 | 6:00hs.
Longoni, el de ojos honestos, y una charla imprescindible
Longoni, el de ojos honestos, y una charla imprescindible

La sala se fue llenando con facilidad, tanto que los asientos quedaron faltos y los espacios libres cotizaron como el blue en sus mejores días. Pero los alumnos de la pública saben de ubicarse donde sea que exista un lugar y el maestro, como en esas noches en que los chamanes compartían alrededor del fuego sus secretos con los más jóvenes, se vio rodeado de oídos, ojos y corazones dispuestos.

El personaje que aguardaba a que el protocolo comience es Eduardo Longoni, fotoperiodista, para empezar, y con una larga lista de logros que fácilmente se puede conocer haciendo una búsqueda en Google. Sus ojos miraban, mientras estudiantes, docentes, periodistas, fotógrafos, público interesado estaban en la sala Figueredo de la Facultad de Humanidades.

Después de las presentaciones y palabras de rigor, el hombre de la mirada honesta toma el micrófono,  rememora en varias oportunidades que le hubiese gustado estudiar historia después de haber salido de “la colimba” como se conocía al servicio militar obligatorio.

Confiesa que su formación técnica se la debe a un curso en el Foto Club Buenos Aires, por eso sabe que lo que hace falta, más que ser buen fotógrafo, es tener voluntad. Voluntad, es una palabra que tiene que ver con el deseo, la intención, con intentar, con procurar. En la voluntad está implícita la búsqueda, la curiosidad, el querer más.

Longoni tiene el micrófono en la mano y a su costado una pantalla reproduce imágenes, las mismas que hicieron que el tipo no sea uno más, sino el de las fotos del Juicio a las Juntas, el de la mano de Dios en el estadio Azteca en el 86, el de las fotos a las Madres de Plaza de Mayo, o el del copamiento a la Tablada.

Calma y memoria

En sus palabras hay calma, también hay memoria. Su voz transmite vivencias. Los jóvenes preguntan sobre algo para ellos lejano y desconocido, “¿cómo era eso de vivir y trabajar en tiempo de dictadura?”.

El fotógrafo rememora situaciones, responde, pero no desde el pedestal, ni bajando línea. Quiere compartir. Reconoce y comparte lo que aprendió en el ejercicio del oficio, eso de que hay algo del apostador que hace que uno se juegue a un lugar, a un ángulo, que se deja llevar por la intuición para apostarse en un lugar u otro aún sabiendo que el devenir es impredecible.

El militante sabe que hace falta una mirada y un compromiso. Que hay una ética que se trae y también que se aprende. Que los maestros en eso son esenciales. Los que están, que acompañan, como él que es capaz de contar de sus dos viajes a Malvinas, uno el del entusiasmo sin preparación y otro el de la revancha luego de darse cuenta que la cosa no es ir por ir, sino prepararse para encontrar la historia.

No se trata de sacar por sacar

La mirada es la que se posa, recorta, decide, sobre qué testimoniar. “No es uno el que decide si esa foto será una prueba judicial que condenará a un militar responsable de la desaparición de personas en democracia como la de los militantes que coparon La Tablada a final del gobierno de Alfonsín. Uno no hace la foto pensando en eso. Uno busca dejar un testimonio” refiere quien fue responsable de hacer fotos de los comandantes enjuiciados en 1985.

Ese estudiante de historia, devenido en fotoperiodista, ese joven militante, el personaje de la película documental Una mirada honesta compartió sus experiencias.

Muestra fotográfica

Para la posteridad están sus fotos expuestas en el frente de la Facultad de Humanidades, por calle Tucumán y en el anexo de calle San Lorenzo.

Testimonios de una época dura de poca libertad, mucha intolerancia y un odio a muerte hacia lo desconocido y diferente. Nos queda la ilusión, la esperanza de un mundo mejor,  más solidario, y la posibilidad de testimoniar honestamente sobre eso y lo que aún falta.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?