La adolescente lleva desaparecida cinco años

Una pista reaviva las esperanzas de encontrar a Candela Correas de Melo

Según el papá de la joven, el dato apunta hacia una propiedad en la colonia que en su momento estuvo en la mira. No descarta que haya sido captada por una red de trata
domingo 14 de mayo de 2023 | 6:03hs.
Una pista reaviva las esperanzas de encontrar a Candela Correas de Melo
Una pista reaviva las esperanzas de encontrar a Candela Correas de Melo

En agosto Candela Agustina Correas de Melo debería cumplir 20 años. Tenía 15 cuando desapareció, el 3 de febrero de 2018, en la localidad de San Vicente y desde entonces su paradero es un misterio.

Estaba embarazada. Lo poco que se supo durante este tiempo fue a instancias de su papá, Pablo Correas de Melo, quien recorrió prácticamente todo el país en su búsqueda y continúa tratando de encontrarla pese a que el resultado sigue siendo una herida abierta. Logró así que el caso se mantuviera visibilizado.

En ese encuadre, precisamente, manifestó que hace pocos días le dieron una pista que podría ser relevante y reaviva las esperanzas de encontrar a su hija, estando conectada una propiedad situada en las afueras de la ciudad de donde desapareció, que en su momento estuvo en la mira.

Candela vivía en el paraje San Miguel, a 14 kilómetros del centro de San Vicente.

“De manera personal me dieron un dato importante relacionado a un punto específico en la misma propiedad que había sido rastrillada inicialmente. En estos días voy a presentarme ante el juez y fiscal para determinar de qué manera avanzar sobre ese indicio”, adelantó sin mencionar más detalles “para no generar falsas expectativas o entorpecer algún posible resultado”.

A su vez, dijo estar consciente de que “han pasado muchos años y si llegó a pasar con mi hija eso que me dijo esta persona, a los 8 o 10 días de la desaparición, habrá que buscar mucho porque será bastante difícil”.

“El lugar es perfectamente identificable y bastante chico así que se reduce bastante la tarea en caso de que avancemos a partir de este nuevo indicio”, reveló Pablo.

Zona rural como epicentro

Cabe mencionar que Candela vivía con su mamá, Nilda Galeano, en el paraje San Miguel, a unos 14 kilómetros del centro de la ciudad.

Lo último que supo la progenitora es que la joven salió de la casa a las 22.30 de aquel 3 de febrero para encontrarse con su novio, que supuestamente la pasaría a buscar. El joven, que en ese entonces tenía 20 años, vive en Picada Agroforestal, a casi 20 kilómetros de ese lugar. “Desde ese punto se perdió el rastro”, recordó el padre en diálogo con El Territorio.

La madre de Candela, en tanto, cuando fue citada declaró en sede policial que su hija le dijo que estaba “embarazada de 11 semanas y que se iba a vivir con su novio”, para lo que “se llevó una mochila con ropa”.

Días después el novio fue detenido y en su declaración testimonial aseguró que no sabía nada de la adolescente y que nunca habían hablado sobre que tenía que pasar a buscarla. Fue liberado a los pocos días pero nunca dejó de ser sospechoso. Hacia la zona donde vive apunta otra vez el nuevo dato aportado al padre de Candela.

“Si le pasó algo a mi hija, que la mataron, porque no hay que perder de vista al novio de ella que está sospechado, tenía que haber aparecido un cuerpo. El femicidio de Fiorella Aghem y ahora de Daniela Radke, fue en el pueblo y están los cuerpos; la desaparición de mi hija fue en la colonia y en la zona donde vive el novio son 5.000 hectáreas de propiedad. Esa es la diferencia, pero creo que seguir esta nueva pista sería importante para tener certezas, sea cual sea el resultado”, sostuvo Pablo.

A su vez, recordó que “hubo gente que en su momento me dijo que Candela fue asesinada en Picada Agroforestal pero al no haber hallado su cuerpo nunca pudimos confirmar esa versión, tampoco descartarla”.

Sospecha de trata de personas

En paralelo Pablo mantiene firme su intención de que la investigación pase al ámbito de la Justicia Federal ante la presunción de un posible delito de trata de personas. “El deseo es encontrarla pese al silencio o al nulo avance investigativo en Misiones”, apuntó el progenitor, y continuó: “Yo siempre estuve haciendo y hago mi parte, como padre la sigo buscando por todos lados, en tanto que desde el ámbito policial y judicial dicen que siguen trabajando en el caso pero sinceramente no veo que sea así”.

El progenitor se sumó al multitudinario pedido de justicia por el femicidio de Daniela Radke realizado el pasado miércoles a la mañana en San Vicente. “Lo que hice y hago es a pulmón, con ayuda de algunas personas conocidas. Mi investigación fue costeada por mí y hasta hace pocos días estuve caminando el sur del país porque una de las hipótesis marcan que Candela fue captada por una red de trata de personas”, dijo apesadumbrado. En esa posibilidad justifica el deseo de que la Justicia Federal asuma la investigación del caso: “Falta un cuerpo, si no hay cuerpo quiere decir que puede estar viva y eso afianza la chance de que haya sido captada por alguna red criminal que opera en el país, lo que no es ámbito investigativo de la justicia provincial”, enfatizó, explicando que “voy a seguir insistiendo porque espero que se esclarezca y se sepa qué pasó con Candela”.

Con la mochila y una autorización

Las horas previas a su desaparición, Candela le dijo a su mamá que el novio la buscaría para cenar. La madre declaró que se acostó y no vio a qué hora ni con quién salió su hija.

Supuso que se fue con el chico, e incluso el domingo 4 recibió un mensaje desde el teléfono que utilizaba diciendo que estaba bien y que tendría a su bebé lejos. Fue entonces que desconfió de quién pudo haberlo escrito.

Sus sospechas se confirmaron cuando un día después habló con el novio, que le habría manifestado que no se vieron ese fin de semana. Candela llevó una mochila con una muda de ropa, los estudios del control de embarazo, la autorización de viaje, elementos de higiene personal, la plancha de pelo y el celular. 

Missing Children y Sifebu

La búsqueda de la joven sanvicentina se replica desde hace un par de años en la página oficial de la organización Missing Children y del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu), que depende del Ministerio de Seguridad de la Nación.
Se sumaron a la pesquisa publicando la foto de Candela y sus datos personales, tanto en las páginas web oficiales como en las diversas redes sociales, ampliando el radio de búsqueda a todo el territorio nacional. “Si tiene información contáctenos al 0800-333-5500 o al correo info@missingchildren.org.ar” expone la publicación de Missing Children, agregando el Sifebu la posibilidad de la línea 134 donde el aporte de datos es anónimo.

 

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