Se cumplieron once años de la Tragedia del Paraná

El 16 de enero de 2010 será recordado para siempre como uno de los días más tristes de la historia deportiva de Misiones. Ese día, lo que era una celebración por la concreción de la 80ª edición de la competencia de natación conocida como el Cruce del Paraná se terminó transformando en una tragedia en la que ocho personas perdieron la vida en las profundas aguas del río.

Ayer se cumplieron once años de aquella jornada desesperante para quienes esperaban en la costa, pero por la pandemia del coronavirus no se realizó la tradicional ceremonia en el que los familiares de las víctimas arrojaban flores al río, a fin de evitar que se junten muchas personas. El duelo y el recuerdo lo transitaron en el seno de cada familia yendo al cementerio o a misa, confiaron a El Territorio.

Aquel sábado 16 de enero de 2010, al menos 40 personas, entre nadadores y remeros, que partieron del club Pacú Cuá, de Encarnación, fueron arrastradas por la corriente hacia unas de las barcazas que estaban ancladas en aguas del vecino país y esa combinación fatal marcó sus destinos. Víctor Sessa (36), Fernando Solé Mases (12), Eugenio Raúl Seró (59), Sebastián Ruzecki (19), Nicolás Levequi (14), Manuel Leiva (57), Mauro Bacigalupi (28) y Luis Saide (56) perecieron.

“Si mirás cómo está el cielo hoy (por ayer), está igual que el día de la tragedia, igual, encapotado, preparándose para una tormenta. Así estaba el día cuando se largó la prueba”, recordó Rodrigo Bacigalupi, primo de unas de las víctimas y quién fue el abogado querellante en la causa.

El juicio y los culpables

El juicio por la denominada Tragedia del Paraná se desarrolló durante el 2014 y los magistrados del Tribunal Federal de Posadas necesitaron de 38 jornadas de intenso debate para poder llegar a la decisión final.

La sentencia se dio a conocer el 19 de diciembre de ese año y estableció que tanto Hugo ‘Tyson’ Alfonso, que en aquel momento presidía la asociación que organizó la trágica competencia, como el prefecturiano Jorge Antonio Lezcano, encargado del operativo de seguridad para el evento, eran culpables del delito de homicidio culposo calificado por la cantidad de víctimas.

Ambos fueron condenados a cuatro años y tres años y medio de prisión, respectivamente, aunque recién comenzaron a cumplir sus penas a mediados de 2017, después de una resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que dejó firme la sentencia impuesta.