El sol siempre brilla en la paradisíaca isla de Bolivia

“Todo comenzó algún tiempo atrás, en la Isla del sol, se cruzaron nuestros caminos por casualidad”, reza la canción de los años 90 compuesta por Leo García, en la que dejó retratada a la hermosa playa como un destino alegre, romántico y muy placentero.
La Isla del Sol  es también conocida como la isla Titicaca, ya que está situada en el lago Titicaca, en el municipio de Copacabana. Es considerada como la isla más grande del lago y su nombre original es Isla Titikaka y por ello el lago donde se encuentra lleva su nombre, que significa “puma de piedra”.
La Isla del Sol es un destino de gran belleza con terrazas de cultivos y el lago azul de fondo. Además es un sitio muy especial ya que se considera el lugar donde se inició el imperio inca. Cuenta la leyenda que en dicha isla, Manco Capac y su mujer, Mama Ocllo, iniciaron la dinastía Inca y desde allí partieron a fundar Cuzco.
La isla está surcada por senderos que la recorren de Norte a Sur donde se desarrollan las actividades de senderismo, observación, fotografía y algunos rituales.
Hay infinidad de tours que salen desde La Paz o desde Copacabana para visitarla en una excursión de medio día. En este lugar se experimenta la sensación de aislamiento y de mucha paz.
Desde Copacabana (Bolivia) se llega a la isla luego de una hora y media de navegación. Las lanchas y botes parten desde la playa del centro del pueblo y llegan al embarcadero de la isla.
Bien temprano las lanchas comienzan a andar y su precio varia según la cantidad de personas que quieran llegar a la isla. Para conocer este lugar un solo día sería muy poco, lo recomendable es quedarse por lo menos una noche para, al dia siguiente, seguir recorriendo o admirando la imponente naturaleza. 
La isla tiene dos embarcaderos conocidos como puerto sur y puerto norte. La mayoría de las personas que visitan la isla en el día se bajan en el puerto norte (Challapampa) y caminan al sur (Yumani) para tomar la lancha de regreso a Copacabana.
Otra recomendación importante es la de llevar una mochila liviana, ya que en la isla no hay ningún tipo de vehículos a motor y se trata de un terreno escarpado, por lo que al desplazarse de un punto a otro de la isla, se tendrá que hacer a pie. Cargar con una mochila de 10 o 12 kilos quizá no sea la mejor de las ideas.
Al llegar, la Escalera del Inca da la bienvenida al turista. Aquí, el terreno se eleva 200 metros en apenas un kilómetro.
Puede pasar que se sienta un pequeño malestar, y eso hay que tenerlo en cuenta cuando se vaya a planificar viajes a esta zona. En la Isla del Sol se está a unos 4.000 metros sobre el nivel del mar, por lo que hay que tomar agua antes de tener sed, comer antes de tener hambre, caminar despacio y beber mate de coca o mascar la hoja para prevenir los síntomas.
Una vez llegado a la Isla del Sol es hora de buscar un alojamiento, claro está para aquellos que deseen disfrutar de más de un día de visita.
Hay opciones de alojamiento tanto en el norte como en el sur de la isla. Y alguna más aislada en otras áreas. Se ofrecen cuartos con comodidades básicas y comidas donde la trucha del lago es el plato típico. La mayoría de los hospedajes se encuentran en la población Yumani y el resto en Challapampa.
La Isla del Sol en el período inca era un santuario con un templo con vírgenes dedicadas al dios Sol. En la actualidad la isla está poblada por indígenas de origen quechua y aymara, dedicados a la agricultura, el turismo, artesanía y el pastoreo. Además del español los habitantes hablan el aymara y quechua.
Otro atractivo que no debe dejar de visitarse es la Isla de la Luna, de menor tamaño que la Isla del Sol. Se puede llegar en lancha desde la Isla del Sol o Copacabana. La Isla de la Luna es el hogar de comunidades originarias y tiene menor desarrollo para el turismo.
La isla es elegida por aquellos que quieren visitar un lugar con menos turistas que la Isla del Sol. Entre los sitios para conocer se encuentra el Palacio de las Vírgenes, el templo de la luna “Iñak Uyu”. 

Un poco de paz
En el oeste de Bolivia aparece una  tierra de diversidad y de contrastes. Con más de 1.700.000 habitantes es una ciudad con claros rasgos indígenas y a la vez muy cosmopolita. Muchas de las más extraordinarias bellezas naturales, de patrimonio cultural y arqueológico están en esta zona.
Existe una gran parte del territorio, especialmente en las provincias del norte donde la naturaleza es seductora y atractiva. Debido a la altura en que se ubica la ciudad de La Paz, el clima no presenta grandes variaciones durante el año.
Generalmente en La Paz los días se cubren con mucho sol y las noches se tornan un poco más frescas. Desde La Paz se puede descender a los cálidos trópicos o subir hasta los nevados.
Vuelve la recomendación al viajero: tener en cuenta que aquí los malestares relacionados con las alturas son muy frecuentes. Para evitar cualquier inconveniente lo  mejor es moverse más lento que de costtumbre y no comer en exceso, la idea es que poco a poco el cuerpo se vaya adaptando al nuevo contexto en el que se encuentra.
Además de la naturaleza, la ciudad también cuenta con monumentos donde la parada es practicamente obligatoria, entre ellas el Palacio de Gobierno y la Iglesia de San Francisco.
Teatro Municipal Alberto Saavedra: de estilo clásico, es el más antiguo de la ciudad. En su fachada se destaca el escudo del departamento de La Paz. Tuvo varias remodelaciones, pero sin embargo conserva el encanto de épocas pasadas.
Palacio de Gobierno:el edificio fue construido en 1845 y posee características de la arquitectura renacentista. Dentro del edificio se encuentra el despacho del Presidente de la República.
El Mercado de las Brujas: se extiende por algunas cuadras en las calles Sagárnaga y Linares del centro de La Paz. Su nombre se debe a que en muchos puestos se vende pócimas, amuletos, hierbas medicinales y objetos necesarios para rituales ancestrales. En la actualidad cada vez son más los puestos del Mercado de las Brujas que venden artesanías, tejidos y souvenires a los turistas
Plaza Murillo:  la Plaza Murillo es el centro de La Paz, a su alrededor se levantan importantes edificios como el Palacio Quemado (sede del Poder Ejecutivo), el Palacio Legislativo y la Catedral de Nuestra Señora de La Paz.
Iglesia de San Francisco: tiene características arquitectónicas del estilo barroco y en su interior se destaca un retablo realizado en talla de madera y decorado con dorado (oro). Funciona como museo con una importante pinacoteca y elementos históricos-religiosos.
Catedral Metropolitana Nuestra Señora de La Paz: en su interior se destaca el altar mayo con la imagen de la Virgen y el mausoleo que contiene los restos del del Mariscal Andrés de Santa Cruz y Calahumana.

Un poquito más afuera de la ciudad  se encuentra el Valle de La Luna, un lugar que desafía a la imaginación del visitante. Este lugar es tan impresionante que estar ahí es como pisar el suelo de la luna. Sus formas son producto de la erosión y asemejan cráteres volcánicos.
Muy cerca se encuentra el parque de cactus denominado cactario en cuyo recorrido se observa una variada colección de especies de cactáceas y bromeliáceas. Sus predios permiten esparcimiento y descanso a los habitantes. Este hermoso paisaje debe quedar plasmado en una fotografía, ya que el suelo y la vegetación son unicas.  

Un poco de Potosí
La historia de Potosí está ligada a un metal precioso: la plata. En 1650 era la ciudad más poblada del mundo debido a la gran cantidad de plata que albergaba.
Practicamente Potosí permanece intacta, tanto en arquitectura como en  la presencia de las culturas originarias. En su paisaje se destaca el imponente Cerro Rico en combinación con el conjunto de edificios, iglesias y torres con cubiertas características de la época colonial. En este pedacito boliviano los paisajes son increíbles. Recorrerlos es una experiencia maravillosa.
Salar de Uyuni: Es el mayor desierto de sal continuo y alto del mundo. Está ubicado en el suroeste del país en la provincia Daniel Campos  y en este lugar, se reflejan las nubes cuando no está ligeramente cubierto de agua.  Miles de visitantes registran sus más creativas y graciosas fotografías. En  noviembre se convierte en el lugar de cría de tres especies de flamencos: el flamenco austral, la parina grande, y la parina chica.
Catedral de Potosí: es uno de los templos más característicos del estilo arquitectónico Neoclásico. En su interior hay importantes reliquias religiosas de oro y plata. También un órganos que donó Simón I.
Casa de la Moneda: es un museo con diferentes salas dedicadas a la pintura y las artes, a la historia, la numismática y maquinarias para acuñar monedas.
Torre de la Compañía: su edificación se concibió como un arco del triunfo con cinco aberturas, treinta y dos columnas salomónicas y tres cúpulas de media naranja. La Torre se puede visitar y desde su cima se obtiene una vista privilegiada de Potosí.
Iglesia y Convento de San Francisco: tiene una torre de dos cuerpos, una hermosa portada y un retablo exterior para la cruz, interiormente mantuvo su ornamentación de estilo barroco, con obra de arquitectura en madera como los retablos y púlpito. 

La ciudad de varios nombres
La historia de la Bolivia colonial está en Sucre. Fue conocida como Charcas, La Plata y Chuquisaca. Por su mezcla de construcciones coloniales y arquitectura republicana, Sucre fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La ciudad es la cuna de la independencia de Bolivia y por esta razón está repleta de monumentos históricos.
Casa de la Libertad: es un antiguo edificio construido en el año 1700 por los jesuitas, allí funcionó una universidad donde estudiaron la mayoría de los protagonistas de las revoluciones de la independencia de América del Sur.
Mirador La Recoleta: Si la idea es sacar muchas fotos, este mirador ofrece hermosas vistas de la ciudad y sus alrededores. Junto al mirador se encuentra el reloj de sol, la fuente La Peregrina, la caja de agua y a pocos pasos se puede visitar la plaza Pedro de Anzures y el Monasterio de La Recoleta, en la actualidad es un museo. En el mirador también se destaca el café ideal para disfrutar de las vistas desde alguna de sus mesas.
Parque Cretácico Cal Orck’o: el Parque Cretácico surge con el descubrimiento del yacimiento paleontológico Cal Orck’o, uno de los lugares más importantes donde se descubrieron restos fósiles de dinosaurios. El parque se encuentra a 5 kilómetros del centro de la ciudad de Sucre, en la carretera a Cochabamba, Distrito 2, Municipio de Sucre.

Parque Nacional Madidi
La naturaleza está presente en Bolivia y el Parque Nacional Madidi puede dar fe de ello. Se trata de una reserva natural en el que los amantes a la naturaleza lo encontrarán como el lugar perfecto para descansar y olvidarse de todo lo que pueda llegar a afectarlo.
Ese contacto con la naturaleza logra que se recobren las energías para salir de ahí totalmente renovado. 
Se caracteriza principalmente por ser el área protegida con mayor biodiversidad tanto en flora como en fauna así como en pisos ecológicos, ya que va desde las nieves perpetuas hasta la llanura amazónica albergando etnias comunitarias en su territorio. Está ubicado  entre las provincias Abel Iturralde y Franz Tamayo, al noroeste del Departamento de La Paz.