El fiscal del caso AMIA no recibió respuesta por la causa Barakat

Sin respuesta. La unidad Fiscal que investiga el atentado a la AMIA aún no recibió la información que requirió al fiscal de la localidad paraguaya de Ciudad del Este, Juan Carlos Duarte, sobre las actividades que realizaba Assaad Ahmad Barakat, uno de los principales sospechosos de recaudar en la Triple Frontera dinero y reclutar voluntarios para el Hezbollah y diferentes grupos terroristas ligados al integrismo islámico.
Los fiscales Alberto Nisman y Marcelo Martínez Burgos, creen que pueden encontrar pistas vinculadas al atentado de 1994 a la mutual Judía que dejó un saldo de 98 muertos, en las causas penales que tiene Barakat y su hermano Hattem en el vecino país. También se había pedido información sobre otros ciudadanos de origen árabe que están involucrados en los oscuros negocios en la región.
“Hemos tenido algunas comunicaciones con el fiscal de Ciudad del Este pero todavía no recibimos la información que solicitamos”, explicó Nisman durante un breve diálogo telefónico con El Territorio.
Los diálogos telefónicos que se hicieron desde la mezquita Profeta Muhammad, ubicada en el centro de Ciudad del Este, y la mezquita At-Tauhid que se encuentra en la localidad porteña de Floresta y cuyo director es el Sheij Abdul Karim Paz, es uno de los datos que estarían buscando los investigadores argentinos. Sin embargo, fuentes de la fiscalía de Ciudad del Este aseguraron a este diario no tener información sobre esas llamadas.
Según Nisman “son varias las pistas que se están investigando”, y  algunas de ellas vinculan el atentado con la Triple Frontera. “No descartamos nada, también estamos pidiendo estos informes que son parte de las líneas investigativas”, agregó.
Aún la justicia paraguaya no pudo probar que Barakat se dedicaba a financiar supuestos actos terroristas, y la fiscalía sólo tuvo elementos para acusarlo por evasión y por ese delito fue condenado a seis años y medio.
Pero los fiscales argentinos sospechan que Barakat pudo haber tenido alguna participación en la financiación del atentado a la AMIA y no se descartaría algún tipo de participación en la planificación del ataque terrorista a la embajada de Israel en Buenos Aires en 1992.
Diferentes informes de inteligencia coinciden en que los comercios que tenía Barakat en Ciudad del Este eran una especie de pantalla para recaudar fondos y lavar dinero a favor de organizaciones no gubernamentales que prestan ayuda en diferentes lugares de conflicto en medio oriente. El sospechoso comerciante era socio de la gigantesca Galería Page, propietario de “Casa Apollo”, y de una operadora de comercio exterior.


Las pistas que buscan en la Triple
El equipo de los fiscales Nisman y Martínez Burgos está formado por 25 abogados expertos en terrorismo internacional y 21 empleados que trabajan en un flamante búnker montado en una oficina de Yrigoyen al 400, frente a la Plaza de Mayo. Fue creado por orden del procurador general, Esteban Righi.
La fiscalía busca localizar a un brasileño llamado André Márquez que figura como dueño de un celular usado para hacer misteriosas llamadas desde Foz de Iguazú (Brasil) a Buenos Aires y El Líbano.
También pretenden definir si un colombiano de ascendencia siria y miembro del partido libanés pro iraní Hezbollah llamado Samuel Salman El Reda, con vínculos en Ciudad del Este, fue el jefe del grupo de operaciones que ejecutó el ataque.