Cooperativas piden racionalizar el uso del agua potable ante la alta demanda

martes 31 de diciembre de 2019 | 6:00hs.

Persiste el intenso calor en toda la provincia, situación que se mantendrá al menos hasta mañana.Tal es así que ayer el Servicio Meteorológico Nacional mantenía dos alertas por calor: una naranja para Puerto Iguazú y otra roja para Bernardo de Irigoyen. Según el organismo, la alerta naranja implica un efecto moderado a alto sobre la salud y puede ser muy peligrosa, especialmente para los grupos de riesgo como niños, ancianos, diabéticos, hipertensos o todo aquel que padezca una enfermedad crónica. Y el color rojo implica un peligro alto y puede afectar a todas las personas saludables.

Incluso la Oficina de Prevención de Riesgos ante Fenómenos Naturales (Opad) de Posadas registró ayer otro día con térmicas de 40°.

En ese contexto el uso de los servicios públicos toma preponderancia, debido a que su utilización aumenta en esta época del año.

Y en las últimas jornadas los cortes de energía eléctrica se repitieron en distintas zonas de Misiones, por lo que algunas cooperativas tuvieron problemas en sus plantas.

En Eldorado, por ejemplo, la Cooperativa Eléctrica de Eldorado Limitada (Ceel) señaló que “debido a las altas temperaturas no se logra mantener los niveles adecuados de los tanques, por ello se solicita el uso racional del agua. Aquellos que posean reservas o tanques en sus domicilios, cuidar”.

En Puerto Iguazú el faltante se registró ayer en algunos barrios de la ciudad, pero se debe a repetidos y extendidos cortes en el servicio eléctrico. Los barrios más afectados fueron zona Industrial, parte de Villa Alta y las zonas altas de la ciudad. Algunos vecinos indicaron que llevaban ayer 48 horas sin servicio o con cortes intermitentes y solicitaron al municipio que los asistan hasta recibir el líquido vital con la presión necesaria.

Al respecto, Iván Escobar, encargado de la planta potabilizadora, explicó a este medio: “No hemos llevado adelante el bombeo desde la toma de agua del arroyo Mbocay por la falta de energía eléctrica durante 16 horas. Estamos trabajando pero no hemos podido recuperar el volumen de agua”. Esa toma aporta a la planta al menos 300 metros cúbicos por hora.

En Posadas, el último fin de semana el Eprac acercó agua potable a la chacra 141 junto al cuerpo de bomberos voluntarios a vecinos que estaban sin el líquido.

Evitar derroches

A pesar de que las localidades que conforman la zona Paraná Medio no presentan actualmente deficiencias en el servicio de distribución de agua potable, todas coincidieron en recomendar el uso racional del vital líquido y evitar derroches.

En el caso de Garuhapé, el intendente de esa ciudad, Gerardo Schmied, confirmó que “el servicio de agua potable funciona con total normalidad, de todas maneras, siempre se les pide, de parte de la cooperativa, a los vecinos y usuarios que cuiden el agua”.

De su lado, desde la Cooperativa de Agua Potable y otros servicios de Capioví (Capca), Rubén Ely, precisó a El Territorio que “felizmente no hay problemas y estamos ofreciendo el servicio sin ninguna restricción, el arroyo está con bajo caudal (acorde a la época del año), pero no en situación crítica”.

Y agregó que por la cantidad de habitantes de la localidad pueden “trabajar en las tareas de potabilización del agua durante medio día y ya es suficiente para responder a la demanda del lugar”.

Además sostuvo que en general “no tenemos cortes de energía como sí lo sufren otros colegas que no tienen suficientes reservorios”.

En el caso de Puerto Rico, informaron desde la Cooperativa Aguas Puras Puerto Rico (Capril) que están ofreciendo un servicio de distribución normal “trabajando con dos bombas de río que bombean 150.000 metros cúbicos por hora, no hay faltantes”.

La Capril tuvo que trabajar el pasado miércoles sobre “una rotura en el acueducto de impulsión de agua potable al sector de almacenamiento y distribución número 1, allí personal de la cooperativa trabajó y subsanó rápidamente los inconvenientes que provocaron la baja de la presión”.

Ese día se lanzó en Puerto Rico una intensa campaña de advertencia de la situación a través de las redes sociales destinada a los vecinos que respondieron positivamente utilizando lo mínimo que pudieron el agua potable, de esa manera las reservas pudieron abastecer a toda la población.

Ernesto Faccendini, gerente de la Cooperativa de Servicios Públicos de Jardín América, informó que “a pesar de que el jueves a la noche se nos había roto un sector del caño de impulsión y el viernes una bomba de la toma se desprendió, pudimos tener todo solucionado el viernes al mediodía”.

“De todas maneras siempre les pedimos a los socios que verifiquen de que sus tanques estén cargando y que no derrochen el agua”, sumó.

Además, confirmó que iniciaron gestiones ante el gobierno nacional para licitar la segunda etapa del acueducto y la toma desde el Paraná hacia Jardín América. “A su vez, el gobierno provincial ya asumió el compromiso de concluir la primera etapa del acueducto que está inconclusa”, comentó.

En el caso de Ruiz de Montoya, Marcos Haser, presidente de la Cooperativa de Servicios Públicos informó que “estamos distribuyendo con normalidad”.

Por su lado, Juan Alberto Fleitas, síndico titular de la Cooperativa de Provisión de Agua y otros Servicios de Bernardo de Irigoyen Limitada (Coopabil), recordó los inconvenientes que tuvieron meses atrás cuando la falta de lluvias dejó seca a la represa de donde se alimenta de agua a toda la localidad.

Para ello “estuvimos trabajando en la recuperación y construcción de pozos perforados. El intendente Guillermo Fernández nos acompañó mucho a la hora de hacer las gestiones ante el gobierno provincial para poder construir un pozo perforado que está frente al barrio Soberanía, otro que estaba hecho pero le faltaban terminaciones y equipamiento en el barrio Ramos y ahora estamos trabajando con la recuperación de dos equipos que se quemaron en la represa por el problema de la energía eléctrica”, destacó Fleitas.

En esa línea precisó: “El problema más grave ahora es la energía, estamos teniendo muchos cortes y eso hace que se suspenda el bombeo de agua a las casas y esto nos retrasa muchas horas el traslado de agua a los barrios a través de las redes”.

Contó que por los constantes cortes se les quemó en la represa un motor de 40 Hp “que tiene un valor de 170.000 pesos. Por suerte conseguimos auxilio en una cooperativa amiga, la de Roca-Corpus porque quedamos directamente sin motor”.