Cámara Gesell a tres hijas de Ovando por supuesto abuso sexual

Durante la mañana de ayer se realizaron los estudios en Cámara Gesell a las tres hijas menores de María Ovando (39), en el marco de la causa que investiga los supuestos abusos sexuales de los cuales habrían sido víctimas las niñas por parte de una supuesta pareja de Ovando.

Según trascendió de fuentes incuestionables, las pequeñas, de entre 4 y 10 años, habrían ratificado ante los profesionales los distintos tipos de abuso y a su vez habrían manifestado que eran víctimas de maltrato por parte de su propia madre.

Por otro lado, no sólo el concubino de Ovando sería el responsable de las aberraciones, ya que un amigo de éste también estaría en la mira de los investigadores, todo en base a los elementos que se han recolectado hasta el momento en la causa.

Según se desprendió de aquel informe, en el caso de la niña de 10 años presentaba una defloración vaginal de vieja data, con evidencias de haber sido víctima de reiterados vejámenes. En el caso de la de 7, se remarcaron posibles lesiones correspondientes a manoseos.

Esta última había obtenido la tenencia de las pequeñas en marzo pasado, otorgada por la jueza de familia de Eldorado, Margarita Potschka.

Todo esto a partir de que trascendiera una seguidilla de denuncias y quejas por maltrato y abandono de persona respecto a las pequeñas.

Dichas acusaciones fueron coincidentes a las que presentaron varios docentes del establecimiento educativo a la que asistían las víctimas, junto al aporte de una asistente social de Eldorado que también trabajó con las menores.

A partir de la presentación en sede policial, el magistrado subrogante del Juzgado de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, Osvaldo Lunge, fue quien tomó las riendas de la pesquisa y ordenó las diversas diligencias judiciales, entre ellas la realización de las pericias de Cámara Gesell realizadas ayer.

Luego de los testimonios de las pequeñas ante los psicólogos, el magistrado aguardaría una serie de estudios antes de ordenar algún tipo de determinación con respecto a la situación procesal de los implicados que tiene la causa.

Según contó la mujer, ni bien las pequeñas habían llegado a su hogar rompieron el silencio y le contaron que eran encerradas en su casa de Eldorado por su padrastro. "Apenas llegó conmigo, la más grande me confesó lo que venían haciendo desde hace un tiempo su padrastro y el cuñado de Ovando. María debe estar presa, no la quiero ver más por acá", reclamó con profundo dolor la abuela.

También recordó que en una oportunidad, su nieta más grande le relató que "una vez le contó a su mamá lo que pasaba pero ella le dio una cachetada y luego nunca más les dijo más nada".