Transilvania: historias de un pueblo maldito

lunes 22 de mayo de 2017 | 5:00hs.
Transilvania: historias de un pueblo maldito
Transilvania: historias de un pueblo maldito

En Transilvania, historia y leyenda van de la mano. Territorio del conde Vlad Tepes -también conocido el Empalador-, la región rumana es una de la más misteriosas. Se emplaza a tan sólo dos horas en coche de la capital Bucarest, en donde recorrer la zona supone sumergirse en las tierras del príncipe de las tinieblas, más conocido como Drácula.

 

Un hombre cruel, aterrador y temible que fue transformado en leyenda gracias al escritor irlandés Bram Stoker. La novela, un clásico literario, cumple 100 años desde su publicación el 26 de mayo de 1827.

 

Considerada para algunos como un héroe nacional, este personaje jamás existió, pero la ficción se entremezcla con el viaje, ya que Drácula se convirtió en su gran embajador turístico. La sangrienta ruta incluye desde el auténtico castillo de Drácula al pueblo natal de Vlad Tepes, el sádico príncipe de Valaquia, en el sur de Rumania, que ganó "celebridad" en su tiempo por actividad guerrera contra el Imperio otomano en el siglo XV y por hacer de la tortura un pasatiempo.

 

 

En el antiguo barrio de Curtea Veche se encuentra el Palacio de Vlad Tepes. El Museo Nacional de Historia resguarda la imagen del príncipe de Valaquia, como también el documento más antiguo que atestigua el nombre de la ciudad, firmado por el 'Empalador'.

 

Su padre, Vlad III, llamado Vlad Dracul fue un gobernante firme y despiadado, quien debió entregar en 1444 a dos de sus tres hijos: Vlad Tepes, de 13 años, y su hermano Radu, a los líderes otomanos, quienes ordenaban que los caudillos y nobles cristianos entregaran a alguno de sus herederos para ser trasladado a Estambul como rehenes.

 

 

 

Aunque jamás vivió ahí, los alrededores están ambientados en su homenaje. Los lugareños venden souvenirs con corazones sangrantes e imágenes de Vlad Tepes.

 

En esta temporada, sobre todo por la aniversario del centenario, este pequeño pueblo recibe la visita de turistas curiosos que buscan vivir la aventura del pueblo 'maldito'.

 

 

 

Fue aquí, en el norte de los Cárpatos, donde nació Drácula. Situada en la zona vieja, rodeada por casas coloridas y calles empedrada, el edificio alberga un museo de armas antiguas y un restaurante.