Pretenden expulsar del barrio A3-2 a un joven acusado de múltiples robos

Los ánimos en el barrio A3-2 de Posadas están caldeados. Los vecinos aseguran que no pueden resistir más la creciente oleada delictiva y por estas horas caminan sobre la frágil línea que de un lado sostiene lo poco que queda de calma para esperar respuestas de las autoridades y del otro el irrefrenable deseo de salir a la caza de los delincuentes que desde hace bastante tiempo no los dejan vivir en paz.
En lunes van a dar un paso más concreto después de la protesta que desarrollaron el viernes a la noche frente a la Comisaría Décima para pedir el cambio inmediato de las autoridades policiales y de todos los efectivos que cumplen funciones en esa dependencia que están siendo constantemente observados después del asesinato de Arnaldo Alejandro Amarilla (33) a principios del mes de julio.
Van a recurrir al ámbito judicial para pedir la expulsión del barrio de uno de los hombres a quienes señalan como cabecilla de una gavilla que -dicen- se mete en las casas, roba hasta en plena luz del día y ante las denuncias, reacciona atacando a quienes lo dejan en evidencia.
Fue identificado por ellos mismos como Raúl Exequiel B. Sostienen que actúa en connivencia con algunos uniformados, que se manejaría armado y con absoluta impunidad ante la supuesta pasividad de la fuerza provincial e incluso, que contaría con la protección de punteros barriales que serían sus parientes.
“No se puede vivir más de esta manera, encerrados en nuestras casas con candados por todos lados cuando estos tipos están sueltos, armados, cometiendo cualquier tipo de atropello y amenazando a quienes se animan a denunciarlos. No contamos con apoyo de nadie y estamos con el corazón en la boca desde hace muchos años”, se quejó Analía González, una vecina que en paralelo acotó que “para colmo de males, inmediatamente se los denuncia y desde adentro de la comisaría les dicen quién fue, provocando que nos ataquen con más saña. Por favor, pedimos que hagan algo antes de que ocurran cosas peores porque los vecinos nos estamos cansando”.
Sobre eso, el presidente del Foro de Seguridad Vecinal, Carlos Aranda, trató de calmar los ánimos después de una reunión que mantuvo a media mañana de ayer con el jefe de la Décima, ante quien planteó la necesidad de mantener entre rejas a los sospechosos debido a que recuperan la libertad pocos días después de ser detenidos.
“Los vecinos aseguran que son atacados a cualquier hora por estos sujetos que andan armados y no son detenidos, ni sus casas allanadas en busca de todos los objetos que roban, pero lastimosamente la Policía no puede hacer nada si no hay una orden judicial. Eso me planteó el comisario, que ellos intensifican las recorridas y trabajan en la prevención, toman las denuncias y hasta detienen a los acusados pero la decisión de largarlos o mantenerlos entre rejas es judicial, no policial”, aseveró.
En esa línea, manifestó que “la situación se agravó tanto, llegando al límite de que los vecinos están dispuestos a hacer justicia por mano propia porque el delincuente sigue operando impunemente y no tenemos respuestas de ningún tipo”.

Pedido judicial
Teniendo en cuenta eso, es que el pedido de expulsión del hombre irá dirigido al titular del Juzgado de Instrucción Tres, Fernando Verón.
La misiva, firmada por alrededor de 150 habitantes del barrio, dice: “Nos dirigimos a usted a fin de solicitarle contemple disponer la expulsión de este barrio al ciudadano Raúl Exequiel B. (22) -detallando la dirección y número de casa- por considerarla persona no grata por los graves y reiterados hechos delictivos, vandálicos y amenazas con armas de fuego a distintos vecinos de este populoso barrio, que en su mayoría lo componen familias sencillas, humildes y trabajadoras, con muchos adolescentes y niños en edad escolar que padecen diariamente serio riesgo de ser víctimas de este individuo”.
“Esto acarrea una tremenda angustia e impotencia en los vecinos, que queremos una convivencia pacífica, dentro de las normas y al amparo de las leyes que nos rigen y que hoy vemos vulneradas ante la inacción de quienes deben velar por nuestras personas y los bienes que con tanto trabajo nos cuesta adquirir y en caso de ser robados, difícilmente se recuperen por falta de una inmediata orden de allanamiento o de captura, según corresponda. Queremos evitar la justicia por mano propia ante los hechos que va sumando este delincuente en sus andanzas, por lo que recurrimos a usted a fin de que tome cartas en el asunto y efectúe lo solicitado”, se consigna luego.
Los vecinos relataron que la semana pasada este conocido delincuente robó varios objetos de la casa de una señora, quien luego hizo una denuncia pero la orden de allanamiento tardó en llegar y nada de lo robado se pudo recuperar.
Posteriormente, un hijo de la damnificada cruzó entredichos y hasta golpes con el sujeto apuntado por los robos, a tal punto que por las agresiones hubo denuncias cruzadas y este muchacho terminó siendo detenido. Los vecinos reclamaban su liberación (que se efectivizó a primera hora de la tarde del sábado) y la detención del sindicado delincuente que está en la mira de todos.