Dejar el nido para buscar un futuro en la universidad
Estudiar una carrera en el exterior significa una serie de decisiones complejas para un adolescente. La primera abandonar, el lugar en el que están los vínculos más cercanos -los amigos y la familia-, en ocasiones involucra aprender un idioma nuevo y también insertarse en un contexto social totalmente distinto a nivel cultural.
Carolina Muller tiene 27 años y es nacida en Porto Alegre, en el Sur de Brasil. Cuando terminó el secundario eligió que quería ser médica.
“Allá el sistema de educación brasileño es muy meritocrático en cuanto a las carreras públicas de medicina. Al finalizar el secundario te toman un examen de ingreso nacional y en base a un puntaje tenés que ir a estudiar a la universidad que te designan”, explicó.
“Esto hace que no tengas muchas opciones para elegir en lo público, y en cuanto al sector privado, los precios son impagables para muchos adolescentes”.
La brasileña comentó que una carrera de medicina en Brasil podría costar más de 100.000 pesos por mes, dependiendo de la casa de estudios. Mientras, el valor actualizado del arancel mensual de la Ucami es de 39.400 pesos. Esta diferencia sustancial termina por convencer a los jóvenes, a quienes las diferencias cambiarias los benefician considerablemente.
Por otra parte, Muller destacó la facilidad migratoria con la que contó al momento de arribar a Posadas para estudiar.
“Al ser parte del Mercosur y con los convenios bilaterales que rigen hoy, no se nos hace muy complicado venir a estudiar”.
A lo que sumó: “En un primer momento ingresamos con una ciudadanía provisoria, se nos pidió una documentación y antecedentes penales. Ya luego de los años tenemos el documento con la leyenda de extranjeros”.
Aunque en la Ucami no tiene mayores inconvenientes para la inscripción por ser extranjeros, la estudiante de Brasil mencionó que para personas de afuera la universidad tiene un cupo de ocho alumnos para los primeros años con lo cual tuvo que prepararse.
Ana María Forth, directora de la Ucami, destacó: “Hoy tenemos 43 estudiantes extranjeros cursando en la universidad. Esto nos posiciona como una de las instituciones con mayor matricula extranjera en el sector privado de Argentina”.
De Bogotá a Posadas
Juan Diego Cotrina Wilches es de Bogotá, Colombia. Por cuestiones familiares llegó a Posadas a los 14 años y cursó en distintos colegios secundarios de la capital misionera. Hoy tiene 21 años, después de terminar la educación obligatoria decidió estudiar la Tecnicatura Universitaria en Tecnologías de la Información de Exactas. En su experiencia como estudiante destacó la gratuidad del sistema educativo argentino: “Sé que en Colombia las distintas etapas de la educación son todas pagas, no tenés la oportunidad de estudiar lo que querés gratis como pasa acá”.
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