Le dieron salidas transitorias y se alojará donde tenía el búnker

viernes 04 de agosto de 2017 | 5:00hs.
Le dieron salidas transitorias y se alojará donde tenía el búnker
Le dieron salidas transitorias y se alojará donde tenía el búnker

Daniel Ricardo ‘el Chino’ Dos Santos consiguió el beneficio de salidas transitorias como medida previa a su libertad absoluta. Llamativamente, el permiso implica que deberá alojarse en la misma propiedad donde funcionaba su búnker.
Se recordará que el sujeto está condenado por ser uno de los cabecillas de la banda narco del Gauchito Gil, que durante años operó en los barrios Cien Hectáreas y Villa Stemberg de la Capital del Monte.
El condenado cumplirá su pena bajo tuición personal de su madre, que asumirá la responsabilidad penal por cualquier desliz de su hijo, más la palabra de honor propia.
La medida dispuesta recientemente por el Tribunal Federal de Posadas contempló que pueda visitar a su familia y hasta quedarse a dormir, como máximo, durante una noche (fines de semana) en la casa de su progenitora, que actualmente está en el mismo sitio donde hace más de dos años fue detenido por estar al mando de uno de los centros de distribución y venta de drogas, en la calle Picada Argentina, a pocos metros de dos instituciones educativas.
De acuerdo a lo que se explicó en el fallo que autoriza las salidas de Dos Santos -al que tuvo acceso El Territorio- éste se encuentra incorporado al período de prueba desde el pasado 7 de marzo y teniendo en cuenta la reducción de pena de cinco meses que le otorgó un estímulo educativo por estudiar en el penal, el lunes 19 de junio se dio por cumplido el tiempo mínimo de cumplimiento de condena que habilitó la posibilidad del otorgamiento de las salidas transitorias, e inmediatamente fue solicitada por el propio encartado.
En el análisis de los jueces se contemplaron los informes sobre las conductas de Dos Santos adentro de la unidad penitenciaria, aportados por el Servicio Criminológico y Consejo Correccional de la Unidad Federal 17 de Candelaria. En ese marco su madre fue aceptada como tutora legal y el domicilio, como punto de acogimiento.
En cuanto a los informes analizados, revelan que la conducta de Dos Santos “es ejemplar, no fue pasible de sanciones disciplinarias, observó reglamentos carcelarios y acató normas que regulan la convivencia y la disciplina” en tanto que sobre su concepto se añadió que registra “un positivo pronóstico de reinserción y los egresos transitorios habrán de actuar favorablemente”.
Eso terminó inclinando la balanza a su favor, obteniendo la posibilidad de externar del penal federal dos veces por mes, durante el fin de semana, siendo una salida de 24 horas y la restante de 48, más el plus del viaje desde Candelaria a Oberá que fue calculado en seis horas.
Pero no es todo tan simple. El condenado deberá cumplir una serie de reglas de conducta que tienen que ver con abstenerse de consumir o tener en posesión bebidas alcohólicas, estupefacientes o psicofármacos, no podrá conducir vehículos ni cometer contravenciones ya que momentáneamente circulará con una cédula de identificación. Si lo incumple, será su mamá la responsable.

Redada en La Cien
La detención de Dos Santos se dio en paralelo con la de Aldo Gustavo Candia (Gordo) y Alberto Alex Antúnez (30), en junio de 2015, en el marco de una serie de allanamientos realizados por efectivos de Gendarmería Nacional después de las denuncias anónimas que hicieron vecinos de la zona.
Uno de los operativos, el que para los investigadores fue el más importante, fue en la vivienda del primero sobre la avenida Picada Argentina, a menos de cincuenta metros del Bachillerato 10 y dos cuadras de la Escuela 448.
En ese lugar -aceptado ahora como inmueble para cumplir el beneficio- los federales detectaron el búnker e incautaron la mayor cantidad de evidencia que dejó al descubierto la venta al menudeo de diferentes tipos de drogas, tal cual fue denunciado.
Se secuestraron casi tres kilos de picadura de marihuana acondicionada en pequeños paquetes de entre cinco y quince gramos, además de once tizas de xilocaína, utilizada para estirar la cocaína antes de ser comercializada.
También encontraron en distintos compartimientos ocultos de la casa, un total de quince teléfonos celulares con sus correspondientes tarjetas de memoria y chips de distintas empresas, que fueron peritados y se pudo conocer el complejo entramado de la estructura narco, que incluía dealers y soldaditos.
El despliegue de los uniformados incluyó también dos propiedades ubicadas sobre la avenida Yerbal Viejo, en el mismo barrio, frente a la cancha del club Ex Alumnos 185 y a tres cuadras de la casa de Dos Santos, donde fue detenido el Gordo Candia.
El movimiento de los pesquisas se replicó también sobre la calle Hultgren del barrio 80 Viviendas, donde capturaron a Antúnez. Las intervenciones telefónicas y seguimientos encubiertos de varias semanas determinaron los roles de cada uno y, en un juicio abreviado reconocieron sus culpas y fueron condenados a cuatro años de cárcel.