Cristina: Vamos a traer gas de donde sea para todo el nordeste

Discurso conciliador para el campo y defensa del modelo
viernes 25 de abril de 2008 | 0:00hs.

La presidente Cristina Fernández de Kirchner presidió ayer la inauguración de 843 viviendas en el barrio Aeroclub de Posadas y anunció que el Gasoducto del Nordeste abastecerá a la provincia de Misiones, así como a otras provincias cercanas que  carecen de conexiones domiciliarias.
La mandataria hizo los anuncios al cerrar el acto y en respuesta al reclamo del gobernador Maurice Closs, quien en su discurso previo pidió compensaciones para la provincia por estar siempre marginada en los modelos políticos y económicos anteriores.
Closs, antes de Fernández de Kirchner, dio un discurso de tono localista donde remarcó el bajo índice de coparticipación, las ventajas de la ubicación geopolítica de la provincia y la falta de infraestructura como el gasoducto y la energía de Yacyretá, que "beneficia a la pampa húmeda", dijo.
La respuesta de la presidente no se hizo esperar: "quiero decirle señor Gobernador, que así como aquí donde empieza la patria y donde dan energía a toda la Argentina todavía no ha llegado el gas, quiero contarle que también allá en el sur, en Santa Cruz, durante décadas se llevaba el gas al centro del país. Hace muy poco, allí en el Calafate donde están los hielos continentales recién pudimos hacer el gas".
"Ahora con este Gasoducto del Noroeste, que algunos ven como una obra demasiado costosa, es que vamos a traer el gas también, de donde sea, para todo el Noreste Argentino, con quien todos los argentinos pero fundamentalmente las regiones más ricas del país, las más favorecidas, tienen una deuda histórica", respondió Cristina a Closs.
El gobernador de Misiones antes había reclamado que "mientras durante mucho tiempo algunos sostenían que acá terminaba la patria, que en Santa Cruz terminaba la patria, nosotros decimos con orgullo que en la provincia de Misiones no termina la Argentina, en la provincia de Misiones recién empieza la República Argentina, en San Antonio, en Irigoyen, en Iguazú, en Alba Posse y en Posadas".
"Vemos y tenemos ejemplos para contar cómo durante años las provincias marginales estuvimos a servicio de la pampa húmeda", indicó el Gobernador, quien se puso a favor del Gobierno Nacional en el conflicto con el campo por la suba a las retenciones a los granos.
"Recién ahora están llegando los transformadores que nos van a permitir recibir la energía de Yacyretá y nosotros pusimos mucho del costo social y ambiental, porque la energía de Yacyretá iba a la pampa húmeda", dijo Closs.
"Recién ahora empezamos a imaginar de que no vamos a ser una de las pocas provincias que no tiene gas natural", añadió, y al hablar de energía se quejó por "el costo de producción", el "costo de consumo doméstico" y el "costo ecológico porque quemamos leña en nuestros secaderos y nuestros lugares de producción y trabajo".

Proyecto político común
Tanto la Presidente como el Gobernador en sus discursos también hicieron fuerte hincapié en el proyecto político y económico aplicado a nivel nacional y que repercute en la provincia.
Cristina Fernández agradeció "en esta mi primera visita a Misiones el apoyo, el calor del voto popular del 28 de octubre no a una mujer, no a una persona sino a un proyecto político que ha vuelto a poner de pie a la República Argentina".
Hasta hubo tiempo para el halago: "me gusta su orgullo señor Gobernador de pertenecer a este espacio político, de saber que el cambio es precisamente continuar profundizando esta transformación que se inició en 2003" expresó.
Con respecto a la obra dijo luego que "hoy aquí estamos inaugurando casi 900 viviendas que se agregan a otras formando un espacio de 1500, para familias que van a poder contar con el sueño y la esperanza de la vivienda propia".
Las 843 viviendas inauguradas ayer fueron construidas mediante el Iprodha con fondos nacionales provenientes del Fondo Nacional de la Vivienda (Fonavi).
"Hasta que vino este proyecto la obra pública se consideraba un gasto, no como lo consideramos nosotros, punta de lanza para el crecimiento del país, puestos de trabajo, crecimiento social y económico", arengó la mandataria nacional.
"Este modelo ha vuelto a recuperar la dignidad de los argentinos porque sabemos que el trabajo es mas que salario, es la dignidad", continuó Cristina Kirchner.
Luego convocó "a todos ustedes, al compromiso de lograr una Argentina más equitativa en la distribución del ingreso, en donde la educación, la salud, la vivienda, el alimento, no sea una dádiva sino un derecho de todos los argentinos".
A su turno Closs se refirió a las expresiones sobre los cambios que deberían traer una presidente y un gobernador nuevos. "¿que cambia?, por lo menos así lo siento yo, que continuamos un proyecto político y una alianza de cooperación que iniciamos en el 2003".
El mandatario misionero indicó que "Misiones en octubre confió de manera aplastante y de manera mayoritaria en este proyecto político, más del 70 por ciento de los misioneros acompañaron este proyecto político y la eligieron como presidente de todos los argentinos".
"Permítanme decirles que con la misma convicción, la misma motivación y la misma esperanza con que acompañamos en ese momento, vamos a seguir acompañando ahora porque no tengo dudas que este es el proyecto que le conviene al país y este es el proyecto que necesita la provincia de Misiones", dijo Closs a Cristina Kirchner.
Insistió en la defensa del modelo y recordó que "en los golpes de cacerola de 2001, con el uno a uno nuestra provincia casi quiebra, se veían cerrar los comercios porque se compraba todo en el Paraguay, los yerbales se abandonaban, la obra pública estaba parada, el turismo no venía porque valía en dólares lo mismo un café en Posadas que en el Centro de Manhattan, a nosotros no nos van a contar que modelo de país queremos".

Asueto y convocatoria
El Gobernador decretó asueto desde el mediodía para aumentar la concurrencia y permitir la presencia de los empleados públicos, algunos de paro y movilización y otros en el acto.
Desde temprano se montaron equipos de audio y vallas de contención en las calles 172 A y 121 A, en el espacio verde de uno de los barrios finalizados.
Se accedió al lugar por la ruta provincial 213 y calle 177, paralela a Cabo de Hornos, aunque unas cuadras más al sur.
Unas 15 mil personas participaron del acto. Mayor presencia tuvieron los gremios oficialistas y comitivas barriales de Posadas convocadas por agrupaciones renovadoras que responden a los distintos funcionarios del Gobierno. También los intendentes del interior movilizaron manifestantes aunque menos de lo previsto.
De Ejecutivo provincial participaron funcionarios del Poder Judicial, del Poder Legislativo, todos los ministros del Gabinete, la Vice gobernadora y otros funcionarios de segunda línea.
También participó el obispo de la Diócesis de Posadas, Juan Rubén Martínez, quien otorgó la bendición a los hogares entregados.
Junto a Cristina Kirchner, integrando la delegación nacional vinieron el ministro de Interior, Florencio Randazzo, el secretario de Obras Públicas, José López, y Luis Bontempo, subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda.


Un espacio para referirse al campo
En su discurso, la Presidente hizo un espacio para referirse al conflicto con el campo. "Quiero pedirles encarecidamente, rogarles, a aquellos que han tenido la suerte a partir de este modelo de crecimiento de tener gran rentabilidad, que piensen un poco en los demás, piensen un poco en el país, que todos necesitamos crecer y vivir y que para ello es necesario no renunciar a ganar dinero, nadie pide eso, sino a contribuir a que más argentinos puedan vivir mejor porque de esta manera se procede de forma inteligente en las sociedades donde todos podamos avanzar. Esa es la convocatoria, sin distinciones de partidos políticos, cada uno con sus ideas, sus experiencias, pero todos con un solo objetivo, seguir construyendo patria", indicó.
En otro fragmento dijo que "nos hemos equivocado demasiado los argentinos, nos hemos enfrentado demasiado, hemos creído que algunos podían imponerse sobre los otros y tal vez mi generación y nuestro espacio político haya sido el más castigado en toda la historia y haya hecho el aprendizaje político, por eso hoy convocamos de esa historia de fracasos a esta nueva Argentina que estamos construyendo, de éxitos y un lugar en el mundo, a no desperdiciar esta fantástica oportunidad que tenemos y que venimos ejecutando desde el año 2003”.

 

Estuvo durante dos horas en la provincia y escuchó planteos de los yerbateros
Cristina recuperó su sonrisa con el afecto de los misioneros

Agradeció “desde el corazón” por el cariño recibido y prometió volver. Pidió esfuerzo a quienes se beneficiaron con este modelo, para que más argentinos vivan mejor


POSADAS. Durante dos horas exactas, la presidente Cristina Fernández de Kirchner estuvo en Misiones. Apenas pisó el aeropuerto General San Martín, a las 16:45, transmitió glamour y predisposición para recibir afectos y atender diversas inquietudes, saludando con una gran sonrisa como si Misiones le transmitiera un poco de calma ante tantas tensiones vividas en las últimas semanas a raíz de los reclamos del campo.
Como intentando mimetizarse con la tierra colorada, llegó envuelta en un vestido color rojo fucsia, cartera verde y zapatos y collares a tono. 
Una vez concluidos los primeros saludos protocolares, recibió con el mismo gesto de buena predisposición los reclamos de los productores yerbateros e igual actitud de calma y tranquilidad, mantendría durante toda su estadía.
En el trayecto, por la ruta 12 antes del ingreso al barrio Itaembé Miní, debió presenciar los reclamos realizados por los integrantes de la Clase Combativa quienes carteles en manos pedían “trabajo ya”. El pedido no quedaría en la nada. Luego, a su paso, la gente salió a demostrarle su afecto y consiguió renovarle su sonrisa. En el palco, su figura resaltó comparados a los demás funcionarios, todos vestidos con ropas oscuras.
Desde ese lugar, observó los diversos carteles, algunos de agradecimiento, otros de solicitudes. Pedían: "Cristina, queremos el puente en San Javier"; "Queremos un nuevo Mercado Central" y la presencia del "Movimiento Sin Tierras", entre otros.

Atenta a todo
Apenas empezaron a hablar los funcionarios de la Provincia, la Presidente escuchó los reclamos de un grupo de obreros molestos por no poder apreciar a los integrantes del palco principal. Desde ahí, indicó a los de seguridad a reacomodar a los hombres de prensa que debieron bajar del lugar donde estaban, por cierto muy mal ubicados para la mayoría de los cronistas de Misiones y con excepciones para fotógrafos y camarógrafos de Capital con ubicaciones de privilegio, en especial quienes vinieron y volvieron en el avión presidencial Tango 01. Durante el discurso del intendente de Posadas, Orlando Franco, Cristina tuvo muchos momentos para intercambiar palabras con Closs.
Cuando al Gobernador le llegó el turno del discurso, dejó de acomodar sus flequillos y escuchó detenidamente cada palabra. Aplaudía al coincidir o reafirmaba con movimientos de cabeza. Esos gestos pudieron apreciarse en especial cuando se refería a  la manera en que el matrimonio Kirchner logró imponer un nuevo modelo de país y superar la crisis 2001.
Antes de comenzar su discurso, además de ser declarada Visitante Ilustre y Huésped de Honor, recibió distinciones tanto de la intendencia de Posadas como del Gobierno de la provincia. Entre los obsequios, le entregaron una gargantilla de plata con piedra de topacio y artesanías y un cuadro de una niña mbya.
Luego inauguró oficialmente las 843 viviendas en el barrio Aeroclub, entregando la llave de la vivienda a Luis Acosta, un ex combatiente de Malvinas. Harían lo propio el ministro del Interior Florencio Randazzo y funcionarios de Misiones.
Durante su discurso, puso énfasis tanto en sus palabras como en sus gestos. Hizo un paralelismo de Santa Cruz con esta provincia, al recordar que hace poco tiempo llegó el gasoducto como se reclama.
Dedicó palabras a los obreros,  a los “cascos amarillos” y criticó a otros gobiernos, porque “antes la obra pública era considerada un gasto”. Luego se refirió a la necesidad de la distribución equitativa de la riqueza, “para que los alimentos no sean una dádiva”. Y pidió el esfuerzo a quienes se beneficiaron con el actual modelo, para contribuir “a que más argentinos puedan vivir mejor”.
Mientras sus colaboradores recolectaban las innumerables cartas y pedidos realizados por escritos por diversos sectores, ella repitió un ritual de su esposo Néstor. Rompió el protocolo, para abrazarse a la gente.  De regreso al aeropuerto, no se olvidó del reclamo de la gente ubicada a la vera de la ruta y pidió detenerse y recibió los reclamos.
A las 18:46 Cristina, levantó sus brazos como último saludo y con una gran sonrisa volvió a Buenos Aires. Aquí, en dos horas, recuperó el afecto del pueblo, que le estaba siendo esquivo en los últimos tiempos.