En diez años cometió dos crímenes y ahora puede ir a prisión perpetua

domingo 06 de enero de 2019 | 6:00hs.
El hombre se llamaba Cristian Hugo Ayala (32) y el crimen ocurrió en el kilómetro 7 de Eldorado.
El hombre se llamaba Cristian Hugo Ayala (32) y el crimen ocurrió en el kilómetro 7 de Eldorado.
Agustín Mazo

Por Agustín Mazo fojacero@elterritorio.com.ar

A penas siete meses y ocho días después de haber purgado una condena de ocho años de prisión en la Unidad Penal de Miguel Lanús por el asesinato de una joven de 19 años en Eldorado, Marisa Duarte volvió a figurar, a finales de 2017, en los principales portales policiales de la provincia al volver a cometer un hecho de sangre.
En este último episodio la víctima fue quien por ese entonces era el concubino de la mujer: Cristian Hugo Ayala (32). El hombre recibió una certera puñalada en el pecho y falleció en el living de su casa.
Pero no sólo en este ataque la protagonista de esta historia utilizó un arma blanca para acabar con la vida de una persona, ya que su primera víctima también fue ultimada de la misma forma.
Se trata de Karina Villalba, una muchacha de 19 años del barrio Nach, ubicado en el kilómetro 6 de la Capital del Trabajo, quien encontró la muerte tras una acalorada discusión que mantuvo con Duarte y que, casualmente, vivía a pocas cuadras del lugar donde se produjo el crimen más reciente.
El recorrido por la triste y delictiva vida de Duarte lleva a reconstruir este último caso mencionado. De acuerdo a los archivos policiales y a lo vertido tiempo más tarde en el juicio oral contra la implicada, el ataque a Villalba se produjo el 6 de mayo del 2009 en una vivienda de la avenida San Martín, donde vivían la víctima y su pareja. Justamente éste último mediante su relato en el debate fue clave para narrar la dramática escena que derivó en la muerte de la joven, ya que presenció toda la violenta secuencia.
Una vieja disputa entre Duarte y la dueña de casa fue el inicio de una fuerte discusión verbal en aquella jornada. El clima tenso no tardó en pasar a forcejeos y golpes entre las nombradas. Todo esto hasta que Duarte tomó un cuchillo que había en el lugar y de un certero puntazo provocó una grave lesión en el pecho de Villalba.
La muchacha herida fue trasladada de urgencia por sus familiares al hospital Samic de Eldorado, donde tras pasar varios minutos internada en terapia intensiva murió como consecuencia de la estocada.
Esto hizo que efectivos de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional III fueran inmediatamente tras los pasos de la agresora, quien fue detenida y al poco tiempo enjuiciada por el Tribunal Penal Uno de Eldorado.
Las pruebas y relatos de testigos fueron determinantes para que la mujer recibiera ocho años de prisión al ser hallada culpable del delito de homicidio simple, lo cual le valió su traslado a la Unidad Penal V del Servicio Penitenciario Provincial, en Miguel Lanús.

Nueva agresión
Poco tiempo después de que Duarte saliera en libertad tras cumplir su condena entabló una relación con Cristian Hugo Ayala (32), un vecino de la calle Residencia en el kilómetro 7 de Eldorado, con quien rápidamente comenzó a compartir techo en un modesto inquilinato.
Todo parecía estar bien entre la pareja hasta la siesta del jueves 14 de diciembre de 2017, cuando un vecino de la zona se topó con el cuerpo sin vida del hombre dentro de su casa y con una importante puñalada en el pecho.
Fue la propia Duarte quien recurrió a esta persona para pedir auxilio y alertar que su concubino se había quitado la vida, instantes antes.
Sin embargo, la afirmación de la mujer generó dudas desde un principio y los investigadores optaron por demorar a la implicada ante la firme sospecha de que existiera un homicidio detrás del caso.
Mediante los estudios forenses se pudo constatar que Ayala presentaba un puntazo en el corazón que le afectó el ventrículo izquierdo, junto a otras lesiones superficiales en el rostro y otras partes del cuerpo.
Además, entre las diligencias ordenadas por la Justicia se dispuso el secuestro de tres cuchillos, de los cuales uno de ellos tenía manchas de sangre, las cuales fueron peritadas por los expertos en criminalística.
Lo último que se supo en torno a este caso trascendió en septiembre del año pasado cuando el Juzgado de Instrucción Dos de Eldorado, a cargo de la magistrada Nuria Allou, cerró la investigación y el caso fue elevado a juicio oral y público.
Es decir que la mujer deberá volver a enfrentarse a la Justicia en un debate oral donde se resolverá su futuro. En esta ocasión, está imputada por homicidio calificado por la relación de pareja, delito que prevé una pena de prisión perpetua.