Emprendedores se afianzan con la producción de lechuga

lunes 24 de febrero de 2020 | 5:00hs.

Matías Koruñak es ingeniero agrónomo y su esposa, Patricia Nemeth, es licenciada en administración de empresas. Oriundos de las localidades de Andresito y Corpus, el destino los preparó para que se instalaran en Oberá, donde levantaron el proyecto “Sabia Chacra” que tiene como producto estrella a la lechuga a través del sistema de hidroponía.

En el mes de marzo el proyecto cumplirá un año y en ese mismo mes serán cinco meses desde que comenzaron a producir lechuga. En este tiempo lograron afianzarse y meterse en el mercado obereño con una enorme demanda, por lo que planifican seguir creciendo.

Ambos trabajan en una empresa privada, pero el sueño de la pareja siempre fue volver a la producción de la chacra, porque es de donde salieron y además observan la falta alimentos en una provincia con mucha tierra para producirlos.

“Somos de familia de padres que viven en la chacra y veíamos mientras trabajamos en la actividad privada que hay mucha demanda, faltante de alimentos. Estudiamos diferentes opciones de la producción y nos pareció que este sistema nos iba a servir para producir de forma continua y muy eficiente”, empezó explicando Matías a El Territorio.

La construcción del espacio comenzó en marzo del año pasado y para el mes de noviembre largaron la venta a diferentes mercados, supermercados y restaurantes de Oberá, con muy buena aceptación por parte de la clientela.

Visión de emprendedores

Antes de hacer la inversión realizaron un estudio de mercado y confesaron que “siempre vimos a Oberá con la intención de crecimiento a futuro, es una población muy importante y eso se traduce en consumo”, manifestó el emprendedor.

Actualmente venden todo lo que producen, no tienen desperdicios, ya que ofrecen un producto limpio y fresco porque el sistema que emplean utiliza solamente agua para el crecimiento de la planta y no tiene contacto con la tierra, asegurando así calidad a la lechuga.

“Producimos por planta y por mes estamos entre 2.500 y 3.000 plantas, con intenciones de seguir creciendo, pero además de hidroponía tenemos zapallo, melón, sandía, choclo”, aseguró Koruñak.

Conformes con la venta y proyecciones de seguir creciendo, aseguraron que “logramos establecernos, tuvimos muy buena aceptación pero fue un desafío muy grande, estamos contentos porque tenemos demanda insatisfecha, la idea es ampliar y pasar los límites de la ciudad”

Ambos son hijos de colonos y siempre fueron incentivados para estudiar y tener una vida fuera de la colonia, pero decidieron volver a esos espacios con una perspectiva de emprendedores.

“Lo que pudimos notar es que las familias incentivan a sus hijos a estudiar y salir de la chacra para estar mejor y de pronto vemos muchas chacras sin producción, demostrando que hay faltante de alimentos, principalmente Misiones porque estamos lejos de grandes producciones de horticultura, por eso nos motiva seguir en la chacra”, concluyeron.