Textiles alertan que la guerra comercial impactará en la industria argentina

domingo 11 de agosto de 2019 | 6:00hs.
El sector reclamó una activa política de administración del comercio exterior.
El sector reclamó una activa política de administración del comercio exterior.
La Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria expresó su creciente preocupación por la guerra comercial entre China y los Estados Unidos. Se alertó que el nuevo capítulo de la disputa entre las dos principales potencias económicas “implicará repercusiones negativas en los fabricantes de ropa nacional”.
“Se conoció la decisión de China de devaluar su moneda como respuesta a la suba de aranceles a las importaciones establecida por el gobierno norteamericano. Ambas medidas pueden tener impactos negativos para la fabricación de ropa en Argentina”, advirtió la Cámara en la entrega de su “Semáforo” que desarrolla 20 variables con los principales indicadores del sector.
El informe detalla que “en primer lugar, el freno a la entrada de producción china en Estados Unidos puede provocar desvíos de comercio hacia otros destinos, lo que podría significar para nuestro país el ingreso de prendas a precio de liquidación”.
Adicionalmente, se agrega “la devaluación del yuan significa un abaratamiento adicional de la mercadería asiática. En efecto, el tipo de cambio real con China prácticamente no se modificó en julio de 2019 comparado con julio de 2018, a pesar de la fuerte devaluación que sufrió el peso argentino en ese período”.
La Cámara explicó que el Gobierno “tiene en sus manos la llave para evitar perjuicios para la producción doméstica. Bastaría con implementar una activa política de administración del comercio exterior, similar a la que existe en la actualidad en Estados Unidos y varios países europeos”.
La situación agravaría el difícil contexto económico que viene atravesando la cadena de valor textil indumentaria.
Desde el segundo trimestre del 2016, la producción de ropa en Argentina sufre una caída ininterrumpida, según estadísticas del Indec. En junio de 2019, las cantidades fabricadas fueron un 12 por ciento inferiores a las de junio de 2018. Este fenómeno también fue acompañado por una caída de 18,5 de la producción textil doméstica.
La Cámara señaló que “la incesante caída en la producción nacional de ropa trajo aparejada la pérdida de empleos”.
Durante el último trimestre de 2018, el sector de confección de prendas de vestir generó 38.610 empleos asalariados registrados, una cifra 21,7 por ciento inferior a los 49.339 del último trimestre de 2015. La pérdida de empleos en los últimos tres años fue de 10.729.
La dinámica de contracción de la producción y del empleo en el sector se explica principalmente por la reducción en el consumo de ropa. La Came informó que las ventas de indumentaria en comercios minoristas cayeron 6,1% en julio respecto del mismo mes del año anterior. Comparado con junio, las ventas se recuperaron por el efecto estacional del aguinaldo y por el relanzamiento del programa Ahora 12. La noticia positiva fue la recuperación de la confianza de los consumidores, que mejoró 21,9% en julio de 2019 comparado con la medición de julio de 2018, según la Universidad Di Tella.
Por su parte, las ventas de indumentaria, calzado y marroquinería en los shoppings del Gran Buenos Aires disminuyeron 6,3% en mayo interanual, según el Indec.
En el mismo período, las ventas de indumentaria y productos textiles en supermercados de todo el país se retrajeron 8,5%. Esta dinámica se dio a pesar de que los precios de la ropa subieron significativamente por debajo del nivel general de inflación (43,1 versus 54,7 por ciento).


Debieron cerrar sus puertas 300 empresas

En el rubro textil argentino desde finales de 2015 cerraron una 300 empresas y se concretaron 8.000 despidos. “Además, hemos tenido 2.000 suspendidos”, indicó Hugo Benítez, secretario general de la Asociación Obrera Textil.
Además, hay cada vez más marcas que tienen que pedir su concurso de acreedores a raíz de sus inconvenientes financieros. Uno de los últimos casos es el de la firma de indumentaria femenina Ayres, que se suma a otras como Ay Not Dead, Wanama y Cook y Legacy. El rubro de indumentaria es uno de los más golpeados en el mercado: las ventas de febrero cayeron un 13,8 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior, según los datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came).


En cifras

8.000

Desde el 2015 se produjeron 8.000 despidos en el rubro textil argentino, de acuerdo a los datos que dio a conocer la Came.



Cómo un enfrentamiento perjudica al planeta entero

China bajó el jueves la cotización de su moneda por cuarto día consecutivo, mostrando su capacidad de utilizarlo como arma comercial contra Washington, aunque la tasa de cambio se estabilizó tras unas caídas que han alarmado a los mercados financieros.
El Banco Central fijó una cotización de 7,0039 yuanes por dólar estadounidense al inicio de las operaciones del día. Fue la primera vez que el punto de partida para la jornada se situaba por debajo del nivel políticamente sensible de siete yuanes por un dólar.
La divisa china operó el viernes a 7,0435 a media tarde, más fuerte que el día anterior.
Pekín alarmó a los inversionistas el lunes al permitir que el yuan cayera a un mínimo de once años frente al dólar.
El descenso siguió a la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de subir de nuevo los aranceles a las importaciones chinas por valor de 300.000 millones de dólares, dentro de una disputa comercial y tecnológica.
Las caídas de la semana son “un tiro de advertencia para el gobierno de Trump que muestra que Pekín puede debilitar el yuan para responder a la presión comercial”, señaló en un reporte el experto Nariman Beravesh. “Es una nueva fase en la guerra comercial, la tormenta financiera resultante podría sumir en una recesión tanto la economía estadounidense como la global”, finalizó.