Yerba orgánica potenció la producción de carne ovina
Una familia productora de Montecarlo potenció su emprendimiento de yerba mate orgánica, y ahora también produce ovinos. En el medio de los cuidados de las plantaciones, en las que implementaron ovejas para limpiar las malezas, surgió la producción de carne de cordero donde notaron una buena aceptación por los consumidores locales.
La diferencia entre una yerba orgánica y una convencional se encuentra en el cuidado de la planta y el suelo. Allí se debe preparar la tierra, dejarla descansar un tiempo del uso de agroquímicos y reemplazarlos por preparados naturales, sin afectar el medioambiente. En el medio, verifican el proceso certificadoras habilitadas por el Senasa que realizan el control directo.
“Una yerba mate orgánica es demandada por aquellos que llevan adelante una vida más saludable o tienen recomendaciones médicas que cumplir. Es más liviana, más suave. Más allá del cuidado del suelo y la conciencia ecológica que conlleva”, explicó la productora, Claudia Plocher, en diálogo con El Territorio.
Yerba mate
La productora detalló que certificar yerba mate orgánica significa no utilizar ningún producto químico que pueda modificar el proceso. Por ende, la limpieza de las malezas se debe hacer de forma manual -es decir, con guadaña o con machete-, o con ovejas.
“Conocimos otras experiencias en Misiones, y empezamos a trabajar con estos animales y nos dio buenos resultados”. Luego, detalló que la certificación le llevó un período de tres años “A partir de allí recién se puede vender la hoja como orgánica. Somos parte de la Cooperativa Agrícola de Montecarlo a quien le vendemos nuestra producción, y ellos se encargan de secarla, empacarla y comercializarla”.
Sobre la producción ovina, destacó la demanda y el consumo local. “Comenzamos a trabajar con la raza Santa Inés en el 2018. Además de simplificar la tarea con la yerba, el mercado en la carne de cordero es positivo, y está en auge”.
