A sospechosos de homicidio también se los acusa de robo

Los dos hermanos detenidos por el crimen del brasileño Antonio Adir Sorensen (57), un trabajador rural de la localidad de Comandante Andresito, fueron trasladados ayer al Juzgado de Instrucción de Puerto Iguazú para completar la audiencia indagatoria.

Se trata de Daniel F. (58) y Ramón F. (50), quienes fueron detenidos horas después de conocerse el crimen, el último sábado. Según detallaron fuentes ligadas al proceso, luego de designar abogado y escuchar los elementos en sus contra, ambos decidieron dar su versión de los hechos.

Ante el juez ambos se desligaron de la responsabilidad del asesinato, aunque sus palabras se mantienen en reserva para no entorpecer la investigación que recién se inicia.

Lo que se pudo saber es que el juez Brites le imputó el delito homicidio criminis causa, lo que significa un agravante en su situación procesal que podría valerles la pena a prisión perpetua en caso de ser considerados culpables.

Según se reconstruyó, en los últimos días se incorporaron elementos que dan cuenta de un robo. Es que en la casa de ambos detenidos se hallaron 40.000 pesos en efectivos que los mismos no supieron justificar.

En este sentido, el dueño de la chacra y jefe de los tres declaró que el único a quien había pagado antes del hecho era a Sorensen.

El hecho
Como viene publicando este medio, el homicidio se conoció cerca de las 9.30 del sábado en una chacra del Paraje La Selva de Comandante Andresito, mediante el llamado de un vecino. El hombre explicó que en la mencionada zona rural, dos trabajadores habían encontrado el cuerpo de Sorensen con varias lesiones de arma blanca.

Asimismo, el cadáver se encontraba con signos de haber sido parcialmente comido por los cerdos de la granja, una situación que lastimosamente se repite cuando ocurren fallecimientos en zonas rurales alejadas.

Según fuentes que realizaron labores periciales en la chacra, el cuerpo estaba tendido en el suelo, a dos metros de la puerta de la vivienda.

El médico policial estableció que el hombre presentaba cortes en la zona de la cabeza, cuello y brazo derecho.

Continuando con las averiguaciones, otros peones de la misma chacra alegaron que el viernes pasado los ahora sospechosos habían compartido una ronda de tragos en la casa de la víctima, siendo la última vez que se lo vio con vida al brasileño.

Con los hermanos dieron versiones distintas con respecto al fatídico hecho.

Ramón mencionó que la ronda de tragos se produjo en horas de la tarde. En tanto, Daniel expresó a los pesquisas que se reunieron con Antonio y su hermano en horas de la noche.

En cifras

$40.000 La cantidad de dinero que los presuntos asesinos no pudieron justificar. Su jefe expresó que solamente le había pagado a la víctima.