En Bernardo de Irigoyen los comerciantes destacan la reactivación económica

Los brasileños invaden diariamente esta localidad para adquirir distintos productos en supermercados, almacenes, locales de ropa, agroveterinarias y a cargar combustible, debido a la diferencia cambiaria peso-real.
Hace un par de años se veía ir en forma masiva a los argentinos a comprar a Brasil, pero hoy la reactivación comercial de Bernardo de Irigoyen hace presumir que, si nada cambia, comienza el despegue económico y el bienestar para comerciantes de la zona y pobladores, que tienen más posibilidades de encontrar empleo a partir de la reactivación
Los comercios del microcentro y de las inmediaciones superaron todas las expectativas y hasta comerciantes brasileños se instalaron y ya comenzaron a abrir sus locales en Irigoyen. Hace un par de meses los locales comerciales no superaban la decena, pero ahora casi llegan a los cien habilitados.
Pero distinta es la realidad de los comerciantes brasileños de Dionisio Cerqueira y Barracão, estados de Santa Catarina y Paraná, respectivamente. Es que la mayoría de sus conciudadanos y muchos argentinos que eran dependientes de los productos brasileños, ahora se vuelcan masivamente a comprar en Bernardo de Irigoyen dejando el dinero en esta localidad. 
El brasileño Lucas Roya, con domicilio en Dionisio Cerqueira,  comentó la situación de una manera rotunda a este corresponsal. “La frontera de nuestro lado está muerta, la región entera viene para Argentina, ahora les toca a ustedes”, vaticinó el vecino.
Juan Alberto Junes, propietario del supermercado Romi, ubicado en avenida Brasil y a 50 metros del portón fronterizo, dijo que “por suerte han mejorado las ventas en un ciento por ciento en relación al verano pasado.  El  movimiento de a poco se fue acrecentando, no obstante 60 días antes de las fiestas de fin de año, ya se notó la invasión de brasileños”.
Junes indicó que “no solamente compran brasileños, sino también argentinos, nuestros vecinos irigoyenses y de las colonias; es que tenemos hasta el combustible y muchos productos de la canasta familiar, más baratos que en Brasil”.
El brasileño Edisón Kersting, propietario del supermercado Irigoyen, local ubicado en la principal arteria comercial de esta localidad, avenida Brasil, expresó que “el comercio en las fiestas de fin de año y como se viene viendo en estos últimos meses, anda muy bien, ojalá siga así”.
No obstante las buenas no son para todos los rubros. El dueño de unas de las principales librerías, Ricardo Horianski, dijo que “veo el éxito con el que están trabajando los demás comercios, sobre todo con los productos comestibles y de bebidas como los vinos y cervezas. En mi caso no puedo decir lo mismo, porque lo mío es librería, fotocopias y otros que van con el ramo”.
Por su parte, los jefes o encargados de las tres estaciones de servicios de Irigoyen coincidieron en explicar que “los brasileños abordan masivamente las playas, para cargar combustible, nafta o gasoil”.  Todo esto ya no es una novedad, porque, y sobre todo en el Automóvil Club Argentino (ACA), el movimiento vehicular es continuo y en las horas pico, a simple vista  se pueden contabilizar quince autos brasileños y cuatro argentinos. En la actualidad el movimiento aumentó mucho más, acrecentado por compatriotas que llegan de otros puntos del país, de la provincia y de naciones vecinas como el Paraguay, quienes  viajan rumbo a las playas brasileñas de Camboriú, Florianópolis u otros puntos turísticos.