Afuera del Juzgado la vigilia fue con carteles y música

martes 22 de septiembre de 2020 | 6:00hs.
Las manifestantes pidieron perspectiva de género.
Las manifestantes pidieron perspectiva de género.
Bastante antes de que empezaran a llegar los protagonistas, Karina Aliendre (48), del Plenario de Trabajadoras, se bajó de un remís con un gran parlante, cartulinas y hasta una silleta. Estaba dispuesta a hacerse escuchar.

Luego de ella llegaron muchas otras compañeras de militancia. Los carteles se colgaron frente al Juzgado y al otro lado de la calle, donde poco a poco se fue completando el grupo de una decena de mujeres. También hubo pegatinas. “No a la criminalización de las mujeres pobres”, “María, no estás sola”, “Perspectiva de género en la Justicia de Misiones urgente”, fueron algunos de los mensajes que leyeron y le dieron ánimo a Ovando.

La mujer, antes de entrar al juzgado levantó ambas manos en respuestas a los gritos de aliento que allí se escucharon. El movimiento en el centro fue poco, pero nadie pasó por alto la música y los bailes de la vigilia.

Aliendre señaló que el colectivo acompaña a María desde la primera causa del 2012, cuando María Ovando fue absuelta por la muerte de su hija de tres años, remarcando que se trató de una criminalización de la mujer pobre, analfabeta, “que hizo lo que pudo con los 13 hijos, porque también se hizo cargo de una nieta”.

“Hoy le acompañamos porque nuestra expectativa es que sea absuelta. Entendemos que esta causa está armada como una forma de perseguirla porque ella inicia un juicio al Estado luego de que fue absuelta y a partir de eso se vio que el Estado empezó a perseguirla”, acusó.

También remarcó que a los padres de las criaturas nunca los trajeron ante la Justicia y adelantó que se harán presentes todas los días que dure el debate.

La familia
Quienes también se hicieron presentes en el lugar fueron los familiares de Marcos Iván Laurindo (23). Su madre Isabel (44) y su hermano Juan (32) aguardaban expectantes las noticias desde adentro y solamente pudieron ver a su familia entrando esposado al Juzgado.

“Ya son cinco años desde que está detenido. Él cayó en julio del 2015 y no sé dónde está, por qué motivo. Cuando hablás te dicen que se trata de abuso a menores, es la respuesta que te dan y tenés que quedar tranquila esperando que el Estado decida”, expresó Isabel.

Ese fue el principal reclamo, el tiempo que llevan detenidos los dos jóvenes sin una sentencia. “Yo no tengo plata para pagar un abogado que me ayude a agilizar el proceso. No puedo ponerme en los zapatos de nadie, pero sí me pongo en los zapatos de mi hijo y no debe ser lindo estar ahí adentro”, añadió.

Y finalizó: “Vamos a tener fe en Dios. Yo digo que es inocente, porque es fácil acusar a una persona que no tiene nada”.

A su turno, Juan (32) pidió “de una vez por todas que la Justicia sea imparcial, que investiguen como deben ser las cosas. Muchas veces dejan sin investigar cuestiones que son importantes para la causa. En la investigación no vemos la mano de la Justicia buscando datos importantes, parecería que buscan lo más fácil para ellos”.