A 80 años del inicio del horror

domingo 01 de septiembre de 2019 | 0:00hs.
El desembarco de Normandía, más conocido como el Día D, marcó un punto de quiebre en la Segunda Guerra Mundial.
El desembarco de Normandía, más conocido como el Día D, marcó un punto de quiebre en la Segunda Guerra Mundial.
Gustavo Hollmann

Por Gustavo Hollmann gushollmann@gmail.com

El 1 de septiembre de 1939, la Alemania de Hitler invadía Polonia, lo que provocaría dos días después la entrada en el conflicto de Francia y el Reino Unido, a los que posteriormente seguirían casi todos los países del mundo. La mayoría de los expertos consideran por ello esta fecha como el inicio de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), la más mortífera de la historia, con decenas de millones de víctimas, la mayor parte de ellas civiles.
La Segunda Guerra Mundial fue una contienda armada internacional que involucró a prácticamente todas las naciones del mundo. Se desarrolló durante seis años y un día -comenzó el 1 de septiembre de 1939 y finalizó el 2 de septiembre de 1945- enfrentando principalmente a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón) contra los Aliados (Francia y Reino Unido), a los que acabarían uniéndose en 1941 Estados Unidos (tras el ataque japonés a Pearl Harbor) y la Unión Soviética (después del intento de Alemania de conquistar Stalingrado).
La guerra tuvo una causa similar al de la Primera Guerra Mundial: el afán de Alemania, Italia y Japón de expandir sus dominios territoriales.
El desencadenante oficial que hizo estallar el conflicto fue la invasión de Alemania a Polonia el 1 de septiembre de 1939 (una Alemania a la que se le prohibió rearmarse después de causar/ser derrotada en la Primera Guerra Mundial), lo que provocó la declaración inmediata de guerra de Francia y el Imperio británico.
En este punto, el avance de la contienda se dividió en tres grandes frentes:
– El frente continental: Alemania contra los Aliados por el control de Europa.
– El frente en los Balcanes y el Norte de África: Italia (con la ayuda alemana) contra los Aliados por la conquista de estos territorios.
– El frente en el Pacífico: Japón contra los Aliados (más la incorporación de los Estados Unidos en el conflicto después del ataque japonés a la base militar estadounidense de Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941) por el control del Pacífico y Asia Oriental.
Los tres focos de batalla acabaron con victoria aliada. Las primeras derrotas del Eje llegaron en los Balcanes y en el Norte de África, donde los Aliados los obligaron a replegarse.
Al mismo tiempo, Alemania, alentada tras conseguir conquistar gran parte de Europa continental, traicionó su pacto de neutralidad con la Unión Soviética y trató de invadirla; acabando derrotada en la Batalla de Stalingrado.
Mientras, en Europa Occidental, la unión de fuerzas aliadas consiguieron recuperar el dominio europeo y conquistar Berlín (capital de Alemania), entre otras ofensivas, con el famoso Desembarco de Normandía.
Por último, en el Pacífico, Japón perdía cada vez más territorios, especialmente después de la inclusión de Estados Unidos en la guerra tras el ataque a Pearl Harbor. Este último frente se sentenció con el bombardeo nuclear estadounidense de Hiroshima y Nagasaki el 6 y 9 de agosto de 1945, forzando al Imperio japonés a declarar su rendición incondicional el 2 de septiembre de ese mismo año, dando por finalizada así la guerra más mortífera de la historia.
Las principales consecuencias de la Segunda Guerra Mundial fueron: la caída de los regímenes fascistas de Alemania e Italia, el fin del imperialismo japonés, la destrucción de una importante parte de Europa, Asia y Oceanía, la muerte de más de 60 millones de personas y la creación de la Organización de las Naciones Unidas el 24 de octubre de ese año mismo año para asegurar la paz internacional y la prevención de futuros conflictos.


Consecuencias políticas

Bloque capitalista
Políticas económicas capitalistas y democracia instaurada en Europa Occidental bajo el liderazgo de los Estados Unidos.
Bloque comunista
Políticas económicas comunistas y apoyo a las dictaduras que el propio líder de la URSS tenía en su país de la mano de Stalin. Influencia en Europa del Este.


En cifras

62.000.000

El número de muertos que dejó la Segunda Guerra Mundial en el planeta. Los más damnificados: Unión Soviética 27.000.000, China 11.324.000, Alemania 7.060.000, Polonia 6.850.000, Japón 2.000.000, Yugoslavia 1.706.000, Rumania 985.000, Francia 810.000, EE.UU. 500.000, Italia 410.000 y Reino Unido 388.000.



Solución Final y campos de concentración para judíos

Con la llegada al poder del Partido Nacional Socialista Obrero Alemán en enero de 1933 de la mano de Adolf Hitler, se construyeron en Alemania los primeros campos de concentración. Se trataba de una serie de instalaciones diseñadas para encarcelar a los enemigos del Estado alemán. La mayor parte de prisioneros en los primeros campos de concentración eran comunistas o izquierdistas alemanes, gitanos y personas acusadas de un comportamiento impropio.
Uno de los primeros campos de concentración creados fue el de Dachau, que mantendría su actividad durante 12 años, desde 1933 hasta 1945. Con el comienzo de la política expansionista nazi dio comienzo también la persecución a los judíos, que comenzaron a llenar los campos de concentración donde se les forzaba a trabajar hasta la extenuación. En la entrada de todos los campos de concentración había una inscripción que decía Arbeit Macht Frei , que significa “el trabajo los hará libres”.
Para 1939 ya había seis campos de trabajo principales: Dachau, Sachsenhausen, Buchenwald, Flossenbürg, Mauthausen y Ravensbrück. Ese año se construyó en Polonia el campo de concentración de Auschwitz, que fue el más grande creado por el régimen nacionalsocialista, dividido en tres campos de trabajo, uno de los cuales (Auschwitz-Birkenau) funcionó como campo de exterminio de judíos.

Holocausto
El régimen nazi liderado por Hitler se caracterizaba por un profundo antisemitismo que se tradujo con el comienzo de la guerra en la persecución y genocidio sistemático de este grupo étnico. La lucha alemana contra el pueblo judío comenzó con el encarcelamiento de grandes masas de civiles judíos en guetos o su deportación a campos de concentración.
Sin embargo, los alemanes fueron un paso más allá en la lucha contra el pueblo judío y llevó a cabo lo que se denominó Solución Final, que consistía en exterminar esta raza en lo que se conoce como Holocausto.
La matanza se realizaba bien por medio de ejecuciones con armas de fuego, o bien empleando las denominadas cámaras de gas; los cuerpos inertes de los asesinados se acumulaban posteriormente en fosas comunes.

Consecuencias territoriales

La URSS, gran favorecida
La Únión Soviética se anexionó todos los territorios que había conquistado Alemania por el este, las repúblicas bálticas, Letonia, Lituania, Estonia y partes de Finlandia y Rumania. Ucrania y la parte este de Polonia también pasaron a manos de Stalin.
Zonas de influencia
Alemania se dividió en cuatro zonas de influencia repartidas entre EE.UU., Reino Unido, Francia y la Unión Soviética. Las tres primeras unificaron sus territorios en la denominada República Federal Alemana y la URSS definió la República Democrática Alemana en su zona de influencia.
Independencias
Austria, Hungría y Checoslovaquia se independizaron de Alemania. Italia cede las posesiones que había capturado antes de la guerra. Se pone fin al colonialismo de los países europeos y Japón sobre África y Oceanía dado que los movimientos independentistas de estas regiones resultan imposibles de controlar por los mermados ejércitos después de la Segunda Guerra Mundial.

La bomba atómica que puso punto decisivo a la contienda

La bomba atómica que puso punto decisivo a la contienda
En el marco de la Segunda Guerra Mundial, el presidente de Estados Unidos, Harry S. Truman, autorizó un primer bombardeo sobre Hiroshima. La justificación: Japón se había negado a aceptar la rendición que los aliados le habían impuesto por medio de la Declaración de Postdam, a finales de julio de 1945.
De manera que el 6 de agosto, un avión bombardero Boeing B-29, bautizado Enola Gay, dejó caer la bomba Little Boy. El artefacto hizo estallar una carga de 15 mil toneladas de TNT, que devastó un rango de 13 kilómetros cuadrados.
Al menos 70.000 personas murieron ese mismo día. Sin embargo, para el final de 1945, la cifra de muertos aumentó a más de 100.000 por causa de la exposición a la radiación que sufrieron los sobrevivientes.
Tres días después de Hiroshima, el 9 de agosto, la fuerza aérea estadounidense sobrevoló la ciudad de Kokura. Pero el cielo estaba tan nublado que fue preciso ejecutar el plan alternativo, lanzar la bomba Fat Man sobre Nagasaki.
Las pobres condiciones visuales del B29 norteamericano le impideron acertar en el blanco programado, de modo que el impacto destructivo fue menor en comparación a Hiroshima. Aun así, murieron instantáneamente 39.000 personas.
El 12 de agosto el emperador japonés Hirohito oficializó un anuncio de rendición: “El enemigo ha empezado a utilizar una bomba nueva y sumamente cruel, con un poder de destrucción incalculable y que acaba la vida de muchos inocentes. Si continuásemos la lucha, sólo conseguiríamos el arrasamiento y el colapso de la nación japonesa, y eso conduciría a la total extinción de la civilización humana”.
El 2 de septiembre de ese mismo año, Japón firmó la rendición absoluta ante los aliados.