Finaliza la cosecha de té dos meses antes de lo habitual

Dos meses antes de lo habitual entra en la etapa final la cosecha del té en Misiones. Ello ocurre en el momento de muy buena producción, pero se interrumpe ante una baja en la demanda del producto en el exterior.

A nivel nacional sólo se consume un 5% del té que se cosecha en Argentina, mientras que el restante 95% se exporta. A su vez, de ese total Misiones produce alrededor del 90% y otro 10% Corrientes, por lo que toda la producción se encuentra en esta parte del país.

Enrique Urrutia, integrante de la Cámara de Elaboradores de Té Argentino (Ceta), y el empresario tealero Jonathan Klimiuk coincidieron en señalar que hay empresas y secaderos que a lo sumo extenderían la cosecha hasta la próxima semana y que algunas empresas y secaderos, ya en forma progresiva tras completar la demanda que tenían, dejaban de cosechar.

“No fue bueno para la venta, fue bueno para la producción.  También hay que aclarar que no es temporada de cosecha grande en este momento”, resumió Urrutia. Recordó que la gran cosecha comenzaría en septiembre y al menos para entonces hay promesas de que mejore la demanda.

Urrutia considera que se está en etapa de transición, porque los habituales mercados están stockeados y esperan más adelante retornar con mayor demanda.

Klimiuk también apuntó que registran un importante stock tras la histórica demanda registradas entre el 2020 y 2021 en medio de la pandemia. Pero también apunta que se registró una recesión del consumo, al explicar la caída de la demanda de brotes de té por parte de Estados Unidos. Estimó que se terminará de cosechar alrededor del 30% menos de lo habitual en esta época del año.

No obstante, observó que la merma en las ventas se da porque también mercados y países productores como Chile y Sri Lanka -grandes productores de té- están pasando por un muy buen momento”. La mayor producción y por lo tanto oferta hicieron que bajaran los precios internacionales.

“La verdad es una lástima porque hay muchas inversiones de los productores, o como empresa mucha inversión hecha para recolectar la cosecha que siempre normalmente iba hasta mediados de mayo o  fines de abril”, recordó. Y ratificó que ahora “ya estamos finalizando la zafra”.

También factores locales

La competencia en el mercado exterior no es el único factor a tener en cuenta en el momento que transita la zafra tealera local. Klimiuk recordó que por la suba del dólar se dispararon los precios de los combustibles y la electricidad. Como es un producto que demanda mucha producción, las estimaciones de costos realizadas fueron absorbidas por los costos que debían cubrir como la nueva tarifa de electricidad y combustible. Por tal razón el panorama se torna aún más complejo.

“Es grave para lo que se viene, porque no vamos a poder ser competitivos a nivel mundial por los costos que tenemos hoy acá en Argentina”.

Como para dar cuenta del salto del costo, detalló que en uno de los secaderos había pagado en enero del 2023 un total de 3.700.000 pesos y ahora con igual consumo y kilovatio se pagaron 12 millones de pesos.