Formativas en el tapete
El conflicto de intereses entre la Urne (Unión del Rugby del Nordeste) y la Urumi (Unión de Rugby de Misiones) generó un nuevo episodio en este ‘tire y afloje’ por posicionarse en la UAR (Unión Argentina de Rugby).
Ayer, cerca del mediodía, más de 50 chicos del Tacurú Social Club fueron notificados de la suspensión del viaje que ya habían organizado para formar parte del Encuentro Infantil ‘62º aniversario del club Sixty’ de Resistencia a realizarse el próximo sábado.
Estos eventos resultan ser importantes para la formación de las futuras estrellas de la tierra colorada. Por lo que el esfuerzo de los padres para cubrir los gastos de viaje, comida y hoteles se vio totalmente empañado.
Luciano Vernetti, capitán de la disciplina en el club de la Hormiga, afirmó que “es una página negra para el rugby de la región. Es muy difícil de explicarles a los chicos que van de 6 a 14 años, es muy frustrante”.
Según sus palabras, esta decisión es producto de una política que ya lleva un año y medio sin resolverse. Y es que la Urumi ocupa un puesto en el Consejo de la UAR, mediante Bruno Núñez, que la Urne discute por haberse definido ‘sin su consentimiento’.
“La pelea de los grandes por esta silla termina haciendo que los chicos no puedan jugar”, remarcó Vernetti.
“Nos invitaron a comienzos de año. Contratamos el colectivo y lo pagamos con todo lo que implica el esfuerzo económico en estos tiempos. Sabemos que estos eventos son necesarios para confraternizar con chicos de otros clubes, de otras provincias. No es sólo deportivo, sino que es social. Hay familias que iban a acompañar a los chicos y se iban a quedar la noche allá”.
“El lunes nos avisaron que teníamos que recibir el ‘OK’ de Urne. Mandamos la nota porque teníamos el viaje pagado y cerca del mediodía (ayer) nos avisan que la decisión de la Urne era negativa. Miguel Ojeda -titular de la Urumi- habló con Luis García Borghes -presidente de la Urne- y recibió como respuesta que al no firmar un acuerdo político los chicos no podían jugar”.
“Es un maltrato, los chicos son rehénes de temas políticos. Es una locura y hace que los dirigentes no estén a la altura de las circunstancias”, aseveró Luciano, quien al mismo tiempo se quejó de la UAR porque “permanece impávida ante este conflicto. No protege a los niños y los deja abandonados”.
“Lo absurdo del tema es que los grandes están jugando el Regional. Sin dudas es una extorsión y ojalá se reflexione”, cerró.
Por el momento el problema sigue sin resolverse y sin dudas es un retroceso.