Con el fin de La Niña comenzaría El Niño en otoño

Tras varios períodos sin lluvia, se estima que este año haya un mejor pronóstico. Finalizó el fenómeno de La Niña, con características de pocas precipitaciones y extremas temperaturas y comenzaría en otoño el fenómeno opuesto, El Niño. Se habla de que a partir de la acumulación de agua en las vertientes y arroyos, también se inicie la recuperación del suelo, un factor sumamente beneficioso para todos los sectores productivos.

José Olinuk, responsable del sector de agrometeorología del Inta Cerro Azul, indicó que en abril llovieron 103, 9 milímetros en la zona Sur, menos que el promedio que es 191,4.

“En abril estuvimos por debajo, pero en marzo llovió más que el promedio. Cayó un total de 208,3 milímetros”.

Luego, contó que comenzó la época de lluvias. “Enero y febrero fueron meses por debajo de lo normal en cuanto a lluvias. Pero el cambio empezó con marzo, se dio con 208,3 contra un promedio de 168,5”.

Según Olinuk, “cada zona presenta sus valores y es variable”. No obstante, las precipitaciones llegaron a todas las localidades de la provincia.

“En abril las temperaturas bajaron mucho, entonces llovieron 103 milímetros, una buena cantidad considerando que las temperaturas ya son más moderadas a comparación de otros meses”, dijo.

Sostuvo que en lo que va de mayo ya cayeron 202 milímetros, con lluvias generales en toda la provincia.

“Es la primera vez en el año que entró un frente de lluvias frontales que abarcan toda la región. Por el contrario, en verano teníamos lluvias puntuales en una localidad, pero no en otra. En este caso, el frente abarca toda la provincia y zonas aledañas”.

Al ser consultado por los parámetros de lluvia del año pasado, Olinuk recordó que “en el 2022 en marzo llovieron 359 milímetros, mientras que en abril fueron 320”. Son números que superan los datos de este año, sin embargo, debido a la finalización del fenómeno de La Niña, la región se encuentra en una fase neutral, esperando al fenómeno de El Niño, que traerá aún más lluvias.

“El año pasado sucedió un comportamiento muy particular porque había llovido mucho a partir de marzo. Pero hasta febrero, la sequía fue terrible. En tanto, en marzo, abril y mayo del 2022 hubo muchas precipitaciones y a partir de allí sequía nuevamente”, rememoró.

Detalló que  en lo que va del 2023 hasta el momento, en la zona Sur se precipitaron 732,6 milímetros de agua y el promedio es 875,4, “todavía estamos en 142,8 por debajo de lo normal, pero aún resta todo mayo para acercarnos a los parámetros normales”.

Recuperación del suelo

El especialista indicó que “para que el suelo recupere la humedad adecuada luego de cuatro años de sequía tendría que llegar el otoño con más lluvias”. De este modo, planteó que de cara al otoño debería llover parámetros por encima de lo normal.

“Lleva tiempo para que el suelo recupere humedad en todo su perfil. Algo que no sucede sólo con una lluvia, porque el agua se va penetrando muy lentamente en el suelo después de la humedad”. Es decir que la situación de sequía aún no empieza a recuperarse, demoraría un tiempo más.

“Tendríamos que esperar un tiempito más, con más humedad y lluvia, para recibir el otoño e invierno. Estamos en una etapa neutra”, explicó.

Después, afirmó que tras la finalización del fenómeno de La Niña, se encuentran todos los pronósticos indicando que va a iniciarse el fenómeno de el niño en la próxima primavera-verano.

“Este fenómeno traería lluvias por encima de lo normal, lo que atraería alivio al suelo y al sector productivo que fue castigado en los últimos cuatro años”.

Para mitad de este año se estiman 1.000 milímetros de agua caída en la zona Sur de Misiones, lo que comenzaría con la recuperación de la fuerte sequía que azotó a la región. 

Las abundantes precipitaciones trajeron alivio al sector ganadero