Cómo lograr que sean seguras

Veredas: la seguridad es responsabilidad de todos

El arquitecto Rodrigo Ibáñez Schaer explicó qué se debe tener en cuenta a la hora de construir este espacio de tránsito
lunes 30 de mayo de 2022 | 0:00hs.
Veredas: la seguridad es responsabilidad de todos
Veredas: la seguridad es responsabilidad de todos

A la hora de construir la vereda es necesario tener en cuenta muchos factores y no simplemente tirar una capa de cemento. La importancia de planificar y evaluar antes de comenzar la obra se debe a que si, por ejemplo, se utilizan las cerámicas incorrectas se puede provocar un accidente y lastimar a un transeúnte. Peor se vuelve la escena si por causa de una vereda mal realizada, una persona ciega sufre caídas y resbalones.

En este sentido, el arquitecto Rodrigo Ibáñez Schaer explicó que es mejor evitar algunas construcciones según sea el caso.

“El propósito de una vereda es brindar un espacio de circulación segura para los peatones. Por esta razón tenemos que pensar que debemos evitar todo tipo de obstáculos que dificulten el libre tránsito de las personas, y no sólo limitarse a pensar que las personas que transitan las veredas son caminantes, también circulan personas en sillas de ruedas, personas con alguna disminución visual que tiene que valerse de un bastón para poder desplazarse o alguna persona que está con una dificultad física y precisa de una muleta, andador, etcétera. Estas personas tienen que poder desplazarse con total comodidad, así que se debe evitar obstaculizar las veredas con escalones, carteles que obstruyan el paso, canteros que se encuentren elevados y demás”.

En Posadas existen ordenanzas que regulan las construcciones en este espacio público, justamente para garantizar la libre circulación. Por ejemplo, los canteros tienen que tener ciertas dimensiones para no molestar al transeúnte.

“Hay espacios de circulación peatonal, con dimensiones mínimas que hay que respetar del lado de la línea municipal (entrada, fachada) y del lado del cordón cuneta. El espacio que se desarrolla entre estos dos es el que se denomina espacio de arbolado, que es el espacio donde se pueden colocar árboles, canteros, postes, cartelerías, y demás, porque están previstos para que siempre quede un espacio de circulación sin obstáculos”, explicó el arquitecto, que agregó además que un problema frecuente en la ciudad es la construcción de rampas. “Las ordenanzas determinan el espacio en donde deben desarrollarse las rampas, para evitar construirlas de manera que genere un obstáculo para el peatón. Las veredas deben tener una pendiente transversal entre 2 y 5% como máximo para seguridad del peatón, por lo tanto, no puedo realizar rampas que superen esas pendientes en los espacios de circulación peatonal”.

Otro punto clave a tener presente es que si se quiere agregar cerámica al piso, ésta debe ser antideslizante, de textura rugosa para que no se vuelva resbaladiza con la presencia de agua (lluvia, el rocío, después de haber lavado el piso, etc).

“También tenemos que pensar que tiene que ser un piso durable, si es una cerámica o un porcelanato, tiene que ser PEI 4 (alto transito) o superior, para evitar que al poco tiempo se termine deteriorando y pierda el color o el diseño que buscábamos al momento de elegirlo. Existen además los pisos o baldosas calcáreas o cementicias, son de alta durabilidad y actualmente vienen opciones con diseños interesantes, símil piedra o símil ladrillos, lo que suele ser limitante en estos casos es que los colores no son tan variados como en el caso de las cerámicas”, comentó Ibáñez Schaer.

El arquitecto también remarcó que hay que tener en cuenta que está permitido tener canteros en las veredas pero eso no significa que se puedan realizar caminos de acceso desde el cordón cuneta hasta la entrada de la casa, los cuales están delimitados y marcados con plantines “porque terminan cortando el libre paso para el peatón, y las personas que transitan por esas veredas tienen que bajar a la calzada para poder seguir desplazándose, generando inseguridad y posibles accidentes”.

Los desniveles del terreno, que son comunes en Misiones, no deben solucionarse con escalones, sino con rampas, con pendientes cómodas. Siempre la construcción de estos espacios debe ser pensada de antemano en quienes necesitan transitar libremente.

 

Asumir el compromiso de mantenerlas

Si bien son espacios públicos, es responsabilidad del frentista mantener las veredas en condiciones aceptables de transitabilidad, sin baldosas rotas, sueltas, pisos de tierra que se convierte en barro y no se puede caminar, entre otras cuestiones. Hay ocasiones en las que la Municipalidad o alguna empresa realiza intervenciones que rompen las veredas; en esos casos, es responsabilidad del ejecutante reparar y dejar la vereda en las condiciones que se encontraba (y si se puede mejorar la condición en que estaba) antes. de la ejecución de los trabajos.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?